24 junio 1990 Diario 16

24 juny 1990
Un altre dels diaris que amb el pas del temps han desaparegut, “Diario 16”, publicava un article el diumenge 24 de juny, coincidint amb el tercer aniversari de l’atemptat a “Hipercor”. El periodista era Xavier Horcajo.

Declaraciones de un afectado por el atentado de Hipercor

El Estado se lava las manos a la hora de indemnizar a las víctimas del terrorismo

Tres años después de producirse el salvaje atentado de ETA a los almacenes Hipercor en Barcelona las víctimas siguen pendientes de cobrar las indemnizaciones que fijó la Audiencia Nacional cuando condenó por aquel atentado a los etarras Domingo Troitiño y Josefa Ernaga. Uno de los afectados que reclama las indemnizaciones, Robert Manrique, emnpleado del almacén, considera “misérrimas” las indemnizaciones de Interior y exige al Estado la responsabilidad civil sobre los daños perpetrados por el “comando Barcelona”.

“Yo estaba trabajando tranquilamente en Hipercor. Un compañero me pidió ese día que le cambiara el turno y trabajé de tarde. La explosión fue un horror. Salí como pude, en un taxi, y me llevaron a la unidad de grandes quemados de l Hospital del Valle de Hebrón. Desde entonces operaciones, convalecencias, pérdida de capacidad física, problemas de familia... Mis hijos y mi mujer han sufrido mucho. Mi vida es distinta desde aquel viernes de hace tres años”.

Robert, que en el momento de la matanza tenía 24 años, asegura que “muchas noches te quedas sin dormir pensando: ¿por qué estoy yo así? ¡Yo no tengo la culpa de nada!”.

Manrique es el más jóven de los afectados por el atentado etarra a Hipercor y el único de entre los heridos que era trabajador de la cadena alimentaria propiedad de El Corte Inglés. “Ahora puedo volver a trabajar, pero como he perdido en 55 por ciento de fuerza en la mano, tengo frecuentes lesiones en mi trabajo de carnicero”.

“Los hay que no quieren ni oir hablar del tema” sigue el afectado. “A mí me recomendaron que lo hiciera sin inhibiciones”. La secuelas, sin embargo, impiden que algunos de los heridos hayan podido volver a reinsertarse en su trabajo”.

De ahí que trece de los afectados hayan reclamado las indemnizaciones que fijó la Audiencia Nacional, en octubre pasado, que obliga a pagar a ETA unas cantidades a cada uno de los heridos. “Pero como los terroristas se declararon insolventes, no hemos cobrado. Yo creo que el Estado debe hacerse responsable de esto. Hay una ley que obliga al Estado a cubrir esas indemnizaciones”, concluye Manrique.

“Yo me pongo en lugar del Estado –dice el herido de ETA- y entiendo que lo que no quieren es sentar precedentes que llevarían a solta una ‘pasta’ impresionante. Entonces llegamos a la incongruencia de que se lo iran para indemnizar a las víctimas del terrorismo y en cambio se dedican a repartir dinero a fondo perdido a Venezuela, a Nicaragua... ¡Es increíble!”.

El trabajador de Hipercor estuvo presente en el juicio de los terroristas: “a mi el juicio me pareció una farsa. Aquellos tipos pasaron de todo. Fue alucinante”.

El asunto acabó con una condena a 1.588 años y con la obligación de pagar mil millones a las víctimas del atentado. Manrique añade: “yo lo arreglaba rápido, los obligaría a desactivar bombas, de esas que ellos mismos ponen”.