18
septiembre 2025
Homenaje
en Bilbao a los ocho vascos asesinados por yihadistas
Una
exposición de la Fundación de Víctimas del Terrorismo recuerda a quienes
murieron en el 11-M y en ataques terroristas alrededor del mundo
Ocho
vascos han muerto a manos del terrorismo yihadista. La Fundación Víctimas del
Terrorismo va a homenajearles con un panel 'in memoriam' dentro de la muestra
'Atentados del 11M. Memoria de dolor y solidaridad' que se inaugurará el jueves
en el centro municipal de Abando en Bilbao. Acudirán autoridades municipales y
del Gobierno vasco, que colaboran en ella.
La
exposición no sólo recuerda a las víctimas del 11M sino a las de todos los
atentados yihadistas cometidos en España o en el extranjero, cuando hubo
víctimas españolas. Unas 300 personas en total, según la obra 'Las víctimas de
la yihad', editado por Espasa junto al Centro Memorial de las Víctimas del
Terrorismo y la FVT. Entre ellos hay ocho vascos. Esta es su historia.
Magie
Álvarez Calleja. Zarautz
Un
cambio de vida letal
Magie
tenía 24 años. De padre paraguaya y madre vasca, era la mediana de tres
hermanas. Trabajaba en La Cantina, un establecimiento hostelero que regentaba
su madre en Zarautz. Decidió iniciarse como guía turística y se apuntó a un
viaje a Yemen, donde pretendía quedarse una temporada acompañando a grupos. En
aquel primer viaje, tras visitar el 2 de julio de 2007 el sitio arqueológico
dedicado a Bilquis, la legendaria reina de Saba, su convoy fue atacado con un
coche boba. Murieron ocho personas, tres de ellos vascos.
Mikel
Essery Arruti. Zarautz
Un
apasionado de los viajes
Mikel
Essery, nacido en Zarautz, era el segundo de cinco hermanos. Licenciado en
Derecho, se exilió a Francia durante la dictadura y regresó a España tras la
llegada de la democracia. Se instaló en Bilbao, donde se casó y tuvo dos hijos.
Docente de profesión, su pasión por los viajes -heredada de su padre, que lo
hacía por trabajo-le llevó a crear la agencia Banoa Bidaiak, que organizó el
viaje a Yemen en julio de 2007.
María
Asunción Vitorica Arbaiza. Amurrio
Gestos
de repulsa al atentado
Natural
de Amurrio, María Asunción Vitorica tenía siete hermanos. Residía en Galdakao y
trabajaba en el Ayuntamiento de la capital vizcaína. Fue otra de las viajeras
del convoy atacado por los yihadistas en Yemen. El día de su funeral, oficiado
en la parroquia de Santa María de su localidad natal, hubo concentraciones de
repulsa por el atentado en las tres capitales vascas.
José
Ramón Moreno Isarch. Irún
En
vísperas de la boda
José
Ramón murió junto a su novia, María Teresa Mora, en la mañana del 11 de marzo
de 2004, en el mayor atentado yihadista cometido en España. Llevaban diez años
juntos e iban a casarse en noviembre. El ataque a los trenes de Cercanías acabó
con sus sueños una mañana cualquiera cuando iban a trabajar. Fueron enterrados
juntos.
David
Fernández Ureña. Bilbao
Un
sargento condecorado
David
Fernández Ureña nació en Bilbao. Ingresó en el Ejército en el año 2000 y estaba
destinado en el Regimiento de Pontoneros y Especialidades de Ingenieros de
Zaragoza.
Trabajaba como operador de desactivación de artefactos. Era sargento. En 2009
participó en la misión de Afganistán y le habían condecorado con una medalla de
la OTAN. Regresó en 2012. El 11 de enero de 2013, cuando formaba parte de un
equipo de reconocimiento en la conocida como Ruta Opal, entre las localidades
afganas de Qala-i-Naw y Darra-i-Bun, el convoy sufrió la explosión de una bomba
colocada por los talibanes al borde la carretera. La explosión acabó con su
vida.
Roberto
Fraile Fernández. Barakaldo
Cámara
junto a David Beriáin
Nacido
en Barakaldo y afincado en Salamanca, Roberto Fraile tenía dos hijos. Cámara y
realizador de Radio Televisión de Castilla y León durante muchos años, su
pasión por el reporterismo de guerra le llevó a muchos conflictos de alto
riesgo, casi siempre junto al periodista David Beriáin, con quien murió en una
emboscada el 27 de abril de 2021. Fue en el parque nacional de Arlyse, en
Burkina Fasso, en un ataque reivindicado por el grupo JNIM, filial de Al Qaeda
en el Magreb Islámico y uno de los grupos terroristas más activos de la región.
Roberto se sentía muy apegado a la localidad leonesa de Valdespino Cerón, donde
fue enterrado y despedido por amigos y familiares.
Iván
Illarramendi Saizar. Zarautz
Se
mudó a un kibutz por amor
Quienes
trataron a Iván Illarramendi, de 46 años, saben que era una de esas personas
que rebosan bonhomía. Se enamoró de Dafna Garcovich, de origen chileno y
nacionalidad israelí, y se casó con ella. No dudó en mudarse al kibutz
Kissufim, donde vivían con unas 300 personas, a un par de kilómetros de la
franja de Gaza. Fue allí donde Hamás les secuestró en la madrugada del 7 de
octubre. Hacia las once y media de la mañana, enviaron su último mensaje:
«Creemos que ha entrado alguien en casa. No podemos hacer ruido». Estaban
refugiados en la 'mamad' , una palabra hebrea que designa la habitación de
seguridad -paredes de hormigón y puerta reforzada con chapa- que tienen por ley
todas las viviendas. No se volvió a saber de ellos. Cuando tiempo después se
identificaron los cadáveres, los restos de Illarramendi fueron repatriados y
sus allegados le enterraron en el panteón familiar en Zarautz. Aquella noche
más de 1.600 civiles y militares fueron asesinados y unos 200 israelíes y
extranjeros fueron secuestrados y llevados a Gaza.
María
Celia Tamayo. Bilbao
Una
viajera muy conocida
El
17 de mayo de 2024, en la localidad afgana de Bamiyán, tres españoles fueron
asesinados en un ataque terrorista y una cuarta persona resultó herida grave.
Era María Celia Tamayo, de 82 años, natural de Bilbao. Fue trasladada
inicialmente al centro hospitalario que la ONG italiana Emergency tiene en
Kabul, especializado en heridas por armas de fuego y repatriada días después a
la la Unidad de Cuidados Críticos del Hospital de Basurto, donde falleció el 30
de julio. Araceli, como la llamaban en su entorno, era una apasionada de los
viajes y de los destinos poco habituales. Muy conocida en la villa, había sido
secretaria en Kutxabank, donde trabajó con su expresidente José Ignacio
Berroeta. Era muy activa en la Asociación de Jubilados y Pensionistas de BBK y
mantenía un blog donde narraba sus viajes.
Opinión:
Magnífica iniciativa la presentada porque demuestra que,
además de la existencia de las víctimas de la banda terrorista ETA, también hay
víctimas de otras bandas terroristas o de grupúsculos terroristas.
Un abrazo a aquellas víctimas del atentado en Yemen a las
que tuve el honor de echar una mano… de hecho, aún sigo en contacto con varias
de ellas. Magníficos ejemplos de DIGNIDAD.

No hay comentarios:
Publicar un comentario