lunes, 31 de marzo de 2025

01 abril 2025 (29.03.25) Diario de Navarra (opinión)

01 abril 2025 (29.03.25)


 

José Aguilar, víctima de ETA: "El odio es una mochila muy pesada y por eso perdoné"

La vida de este cabo primero se volvió del revés el 23 de diciembre de 1988. Con 26 años y a dos semanas de casarse, ETA le amputó una pierna y algunos sueños. Pero puede contarlo

Escuchar a José Aguilar resulta entrañable si no fuera por la dureza de lo que cuenta. Sonríe las palabras y los recuerdos, a pesar del dolor que entrañan. Para quien escucha y para él mismo. Pero hace tiempo que decidió compartir su experiencia de vida con los más jóvenes para que “nunca más” se vuelvan a cometer “ni atentados ni torturas”. Y en este camino es donde rememora el suyo. El que comenzó la madrugada del 23 de diciembre de 1988 en el cuartel de Alsasua, donde él era cabo primero de la Guardia Civil. Aquella noche, ya había terminado su turno y al día siguiente se iba de vacaciones porque se casaba con su novia, Carmen, el siguiente 5 de enero. Pero una trampa bomba de ETA puso su vida del revés. El explosivo le amputó la pierna derecha, dejó muy malherida la izquierda y se llevó por los aires parte de sus sueños. Pero se recompuso. Se casó con Carmen, estudió Derecho, ejerce como abogado penal y de familia, es padre de cinco hijos (Christian, Javier, Leyre, Paz y Óscar) y desde 2022 ha participado en encuentros de justicia restaurativa para entrevistarse con terroristas arrepentidos.

De la noche del atentado, recuerda que escuchó granadas que impactaban contra el cuartel y él quiso salir para impedir una catástrofe mayor. “En el edificio vivían 42 familias y más de veinte niños”. Pero él se llevó la peor parte. “Cuando pisé la bomba, me caí al suelo y no veía nada. No sentía gran dolor por las quemaduras”. Y entonces se dio cuenta de algo. “Nadie iba a venir a rescatarme porque no sabían que estaba allí. Tenía que llegar yo solo al cuartel. Entonces, hice un trueque con el ‘jefe’, como llamo yo a Dios. Le pedí ayuda para salir de allí porque mi novia estaba embarazada y yo quería conocer a mi hijo. A cambio, le ofrecí mi perdón para las personas que habían perpetrado el atentado”. Y así sucedió. “El odio es una mochila muy pesada. Por eso, perdoné desde el principio y he intentado educar a mis hijos sin rencor ni animo de venganza”.

Tras cuatro días en la UCI sedado, el 27 de diciembre se despertó y, por el hueco que quedaba en la cama, se dio cuenta de que le faltaba una pierna. “Me lo tomé muy mal y lloré mucho. Pero Carmen fue mi apoyo incondicional. Sin ella nada hubiera sido posible”. La boda se celebró en Zizur el 5 de marzo de 1989 y el 5 de junio nació Christian, su hijo mayor. “Luego tuvimos otros cuatro porque queríamos rodearnos de vida”. Hijo de guardia civil, él mismo tenía gran vocación de ayudar a la gente. “Era maravilloso hacerlo a pesar de la dureza de esos años de plomo. Por eso, me resultó muy duro dejar la Guardia Civil porque era muy feliz”.

Muchos apoyos

A diferencia de lo que relatan otras víctimas, Aguilar aplaude el apoyo que recibió de personas anónimas y de instituciones, como el Gobierno de Navarra que les ayudó con la compra de su piso en Barañáin. Con la carrera de Derecho recién terminada, participó junto a otros compañeros más avezados en el juicio en la Audiencia Nacional contra el Comando Nafarroa, el que había perpetrado su atentado. “Le pedí al presidente del tribunal entrevistarme con los etarras pero entonces no fue posible y se me quedó clavada una espina”. Y que se consiguió quitar en 2022.

Cuando decidió participar en los encuentros. “Llegué a una cárcel de fuera del País Vasco. Iba sin prótesis, a propósito. Y al encontrarme con el etarra que me esperaba nos dimos un abrazo y hablamos durante tres horas”. Un perdón que, reconoce, es “algo muy personal”. “Cada persona necesita sus tiempos y respeto el sentir de todas las víctimas”. En su opinión, perdonar o no hacerlo es un tema "muy complejo y personal de cada uno". "Pero mi ilusión ahora es encontrarme con personas que han pertenecido a bandas terroristas y que asumen la responsabilidad por el dolor causado. Es importante que no haya justificación ni del dolor ni del daño".

Y continúa su explicación. "Una persona no es solo los hechos que ha cometido. Ese estigma no tiene que acompañarle toda la vida. Una vez que ha pagado y cumplido su condena, tiene derecho a rehacer su vida".

Opinión:

Después de casi 11.000 noticias publicadas, calculo que habrán sido más de 8.000 opiniones presentadas. Y en muy, muy, muy pocos casos he necesitado tanto tiempo para opinar sobre una información sin importar qué medio de comunicación la publicara.

Pero en esta ocasión, es un momento muy especial. Porque en 35 años de experiencia he tenido miles de contactos con víctimas del terrorismo y he conocido personalmente a cientos de ellas. La enorme mayoría, me atrevería a decir que un 99’9 %, son magnificas personas y enormes ejemplos de dignidad y resiliencia.

Pero hay algunas con las que, por tantos momentos vividos, la relación es muy especial. Y uno de esos casos es mi AMIGO José Aguilar García a quien conozco desde 1991. En aquellos años tan duros y complicados en los que asistir a otras víctimas del terrorismo era una tarea complicada, con diferentes bandas terroristas activas día tras día.

En aquellos años tan jodidos, cuando teníamos atentados constantemente y, por lógica, había que ir localizando y atendiendo a víctimas recién llegadas a la macabra relación, José Aguilar era delegado de la ANTIGUA AVT en Navarra y servidor lo era en Catalunya. No podría explicar ni en tres vidas lo que tuvimos que sufrir y compartir junto al equipo de la sede central en Madrid, con Juan Antonio Corredor al frente y el resto de delegados autonómicos.

Algunos ya nos han dejado porque la edad no perdona. Otros lo dejaron porque las cargas familiares y los años van haciendo mella en la salud pero seguimos teniendo contacto personal por la amistad fundada en aquellos años tan difíciles y con tanto trabajo compartido.

Y con algunos la labor asistencial conjunta continúa como el primer día, como aquel día de 1992 de camino al Parlamento Europeo en Estrasburgo, en el que José Aguilar me presentó a su esposa, Mari Carmen. Allí estábamos José, Mari Carmen, mi esposa Esperanza y servidor cuando descubrimos que aquella Mari Carmen de la que tanto hablaba José había sido compañera mía en la misma clase del mismo colegio durante años… las casualidades de la vida. El viaje podía haber durado días porque la química personal era eterna.

Bueno, no seguiré escribiendo porque creo que ha quedado constancia de mi respeto y mi cariño con el AMIGO José Aguilar. Y porque un día de octubre de 2017, tras los atentados de agosto, recibí un SMS de su parte que ha sido de lo mejor que he podido leer en mi vida desde aquel maldito viernes 19 de junio de 1987, que me dio la oportunidad de conocer poco después a José Aguilar y a tanta buena, magnífica gente.

Del resto del aprecio y estima que tengo por José Aguilar, considero que sus explicaciones en la entrevista que publico hoy es más que suficiente.

 

 


 

 

 


  




31 marzo 2025 (2) Levante Mercantil Valenciano (opinión)

 

31 marzo 2025 



45 años del primer niño asesinado por ETA: José María Piris Carballo era extremeño y tenía 13 años

El 29 de marzo de 1980, tras bajarse del vehículo del padre de un amigo, golpeó un paquete que estaba en el suelo. Era una bomba de ETA que se había caído del coche de un guardia civil

“Fueron cuatro hermanos y regresaron tres” “¿Quién lo entendió?”. Así se recoge en el monumento que desde el pasado agosto honra en San Vicente de Alcántara (Badajoz) la memoria de José María Piris Carballo, el primer niño asesinado por la banda terrorista ETA, con solo 13 años, el 29 de marzo de 1980. Esas palabras son de su madre, Carmen Carballo Tomé, la primera de las veintidós madres que tuvieron que sufrir el terrorismo de la forma más dolorosa y cruel: la pérdida de un hijo menor de edad. Luego llegarían los cuatro niños muertos en el atentado de Hipercor en 1987 en Barcelona, los cinco fallecidos en la casa cuartel de Vic en 1991 (cuando un coche bomba reventó su patio de juegos), y otros muchos. Al fin y al cabo, la mayoría de los masacrados por ETA, niños y adultos, tenían madres que tuvieron que llorarles.

En tiempos actuales, las nuevas generaciones perciben el terrorismo de ETA o el yihadista del 11-M como alejado en la historia. Una encuesta del Instituto de Derechos Humanos Pedro Arrupe de la Universidad de Deusto ya recogía hace unos años que sólo el 53% de los alumnos declaraba conocer la identidad y la historia de Miguel Ángel Blanco. El 7% admitió desconocerla. Y el 40% marcó la casilla 'No Sabe/No Contesta'. Las víctimas necesitan que su memoria no se olvide, sobre todo cuando todavía quedan 374 asesinatos sin resolver, es decir, impunes. Suponen más del 40% de todos los que cometió la banda criminal.

Venía de un partido

Y en esta memoria, el niño José María Piris Carballo tiene un lugar destacado que no se conoce como debiera. El pequeño se había marchado con 7 años desde Extremadura al País Vasco, porque sus padres, como otros muchos, querían un futuro mejor para él y sus tres hermanos. El estudio 'Los menores de edad víctimas mortales de ETA', realizado por Pablo García Varela en el marco de la Universidad del País Vasco, recuerda que el 29 de marzo de 1980 (este sábado hizo 45 años), José María viajaba en el coche del padre de su amigo Fernando García, con él y otro niño más, después de haber jugado un partido de fútbol. Tenía ya 13 años y vivía en Azcoitia (Guipúzcoa).

"Al poco de bajarse del vehículo, mientras esperaban que el padre de Fernando aparcase, José María golpeó un paquete que estaba en el suelo. Era una bomba de un comando de ETA que se había caído del coche de un guardia civil". Le llamó la atención porque de la bolsa sobresalían unos imanes. "La explosión mató al niño en el acto e hirió gravemente a Fernando, quién en una entrevista para 'El Correo' en 2016 explicó las secuelas físicas y psicológicas causadas por el atentado", recoge el estudio. De hecho, Fernando García, herido con traumatismo facial y torácico, pasó 22 días en la UCI.

Al funeral de José María en la parroquia de Azcoitia acudieron centenares de personas.La noticia del primer niño muerto a manos de la banda indignó a la población, que organizó una manifestación en contra de la violencia en la que participaron más de 4.000 asistentes. La familia no pudo seguir en el entorno y regresó a San Vicente de Alcántara, donde reposan los restos de José María. El año pasado se inauguró el monumento que le honra en el parque de Joaquín Sama, muy próximo al domicilio de la familia. “Falleció a los 13 años a consecuencia de la sinrazón de la violencia terrorista… Mientras no se entiendan, los unos y los otros, no podremos vivir en paz”, exclama el mensaje de su madre en el memorial.

La carta de ETA a la familia

El estudio 'Los menores de edad víctimas mortales de ETA' desvela que cuatro meses después del asesinato, al buzón del domicilio familiar de San Vicente de Alcántara (Badajoz) llegó una carta de ETA dirigida a nombre de José María. En el interior, la banda terrorista afirmaba que el joven había muerto por error, que la bomba no era para él. En el 2002 en una entrevista con 'El Mundo', su madre, Carmen Carballo, aportó más detalles sobre carta. Los etarras en ningún momento se arrepintieron de la acción y no se sintieron culpables por lo ocurrido.

Se sabe que el autor del atentado contra José María Píriz, Jon Aguirre Agiriano, observó toda la escena desde un balcón próximo. Entró en 1981 en prisión por tres asesinatos, uno de ellos el del niño extremeño. Salió el 3 de mayo de 2011 tras cumplir el máximo permitido en la legislación entonces vigente de treinta años de condena. Nunca se arrepintió públicamente de sus asesinatos. Al dejar la cárcel, se convirtió en uno de los representantes del Colectivo de Presos Políticos Vascos en firmar el Acuerdo de Guernica, que dirigía peticiones para el cese de la violencia política. Murió en octubre de 2022 a los 69 años.

La información de Covite recoge que, además, fueron culpables del atentado que sesgó la vida del niño los terroristas Francisco Fernando Martín Robles, Jesús María Zabarte Arregui y José Gabriel Urizar Murgoitio.

Opinión:

Excelente información que recuerda las bestialidades cometidas por la banda terrorista ETA a lo largo de su macabra historia.

Queda muy poco más que añadir, excepto una cuestión que poca gente conoce: la familia del pequeño José María tuvo que litigar durante mucho tiempo con la Consejería de Presidencia de Extremadura, que negó el año pasado la indemnización por no acreditar los requisitos exigidos.

La noticia, que recogía el diario ABC, decía lo siguiente: La Sala de lo Contencioso-Administrativo ha estimado los recursos de los progenitores de Carballo contra la resolución de la Consejería de Presidencia. “Condena a la Junta de Extremadura al pago de una indemnización de 13.118,14 euros más el interés legal desde la fecha de petición hasta su pago además de las costas, un total que oscila a más de 26.000 euros como consecuencias del acto terrorista al amparo de la Ley 2/2020, de 4 de marzo, de apoyo, asistencia y reconocimiento a Víctimas del Terrorismo de la Comunidad Autónoma de Extremadura”.

No todo han sido ayudas y reconocimientos… primero hay que pelear incluso con aquellos que se llenan la boca hablando de respeto a “LAS” víctimas del terrorismo.

31 marzo 2025 La Razón (opinión)

 

31 marzo 2025



«Careo» entre peritos en el juicio a dos españolas casadas con yihadistas

Habrá una pericial caligráfica "conjunta" sobre la «carta de despedida» atribuida a una de ellas. El juicio empieza el 28 de abril

Yolanda Martínez Cobos y Luna Fernández se sentarán en el banquillo de la Audiencia Nacional a partir del próximo 28 de abril acusadas de terrorismo. Ambas se enfrentan a una petición de condena de seis años de prisión de la Fiscalía -dos más reclama la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT)- por su supuesta integración en Daesh. Casadas, respectivamente, con un integrante de un tribunal yihadista, Omar el Harchi el Fertakh, y un combatiente del Daesh, Mohamed el Amin Aabou (ya fallecido) según el Ministerio Público, se desplazaron junto a sus maridos a la zona de conflicto sirio-iraquí después de que, en 2014, el entonces líder de la organización terrorista, Abu Bakr al-Baghdadi, proclamara el pseudocalifato universal.

Permanecieron allí con sus hijos menores hasta que cayó el último reducto yihadista, la ciudad siria de Baguz, y fueron a parar al campo de acogida de Al Hawl, donde solicitaron se repatriadas a España. Según dijeron al juez, viajaron a Siria voluntariamente porque sus maridos encontraron allí trabajo, pero no se integraron en la organización terrorista y se limitaron a cuidar de sus hijos (cuatro en el caso de Yolanda, mientras su compañera tenía a su cargo a ocho menores, cuatro de ellos de los que había asumido su custodia tras morir sus padres en combate). La Fiscalía, sin embargo, sostiene que se desplazaron a Siria con la “plena voluntad” de formar parte de Daesh asumiendo el rol reservado para ellas en la tareas domésticas y la educación de sus hijos en una visión “radical y extremista” del islam.

Opinión:

Aporto, para empezar, el link de la noticia para que se pueda observar un detalle de la fotografía

Link:

https://www.larazon.es/espana/careo-peritos-juicio-dos-espanolas-casadas-yihadistas-repatriadas-siria_2025033167ddb47e310a4800019da0f1.html

Cuando me refiero a un detalle, es el siguiente: ¿podría usted entrar en un centro comercial, una entidad bancaria, una escuela o universidad con un casco de moto puesto en la cabeza? ¿O con un pasamontañas?

La respuesta es obvia: NO

Creo que no tengo nada más que añadir.

Por otro lado, una reflexión: me alegra leer que la Asociación Víctimas del Terrorismo se ha personado en esta causa. Es una buena noticia que los recursos que reciben para área jurídica se destinen, precisamente, a esas labores.

Pero ahora una pregunta: ¿a cuántas víctimas de los atentados de agosto2017 representaron en el juicio? Leyendo las páginas 2 a 7 de la sentencia de mayo 2021, puedo leer que se personaron como acusación popular pero ¿a cuántas víctimas asistieron, a cuántas víctimas conocen, con cuántas han contactado?

30 marzo 2025 (28.03.25) (2) RTVE

 

30 marzo 2025 (28.03.25) 



Condenado a dos años de prisión un 'influencer' yihadista que justificaba atentados terroristas en TikTok

Además de exaltar el terrorismo yihadista, Said Bengag realizaba comentarios antisemitas y homófobos

Llamaba a los usuarios a morir como "mártires" para recuperar el dominio árabe en España

La Audiencia Nacional ha condenado a dos años y seis meses de cárcel a un hombre de 26 años que subía vídeos en los que justificaba y glorificaba las acciones terroristas yihadistas con el objetivo de castigar a las sociedades occidentales. Lo hacía a través de sus redes sociales, principalmente TikTok, donde acumulaba casi 400.000 seguidores. Entre otros atentados, ensalzó el asesinato de un sacristán en Algeciras, Cádiz, en enero de 2023.

En la sentencia, dictada por la Sección Cuarta de la Sala Penal de conformidad entre las partes, los magistrados imponen a Said Bengag una pena de dos años de cárcel por un delito de enaltecimiento del terrorismo y otra de seis meses por un delito de falsificación de documento oficial.

El acusado, según los hechos probados de la resolución, difundió a través de las redes sociales Facebook, Instagram y TikTok vídeos en los que realizaba comentarios con los que incitaba a realizar la yihad en territorios en conflicto.

Además, Said Bengag amenazaba con cometer atentados contra instituciones y llamaba públicamente al combate, al tiempo que se mostraba partidario de la realización de la yihad por los musulmanes en Europa y en países musulmanes moderados, con el fin de imponer la sharia o la ley islámica.

Comentarios antisemitas y homófobos

Además de exaltar el terrorismo yihadista, el condenado realizaba manifestaciones continuadas contra los colectivos judíos y LGTB, profiriendo comentarios cargados de amenazas contra otros usuarios de redes sociales que no compartían sus opiniones.

Según ha indicado la sentencia, también manifestó su predisposición a emprender él mismo una acción yihadista violenta, aunque no llegó a materializarla en acciones concretas.

Quería recuperar el dominio árabe en España

En los vídeos que publicaba diariamente, donde aparecía grabándose a sí mismo, justificaba y glorificaba la yihad y alentaba a los usuarios a llevar a cabo acciones violentas e incluso a morir como "mártires" en nombre del islam para conseguir la recuperación del dominio árabe en España con Al-Andalus. Junto a esto, realizaba 'nashedds' o cánticos yihadistas.

A través de su perfil de TikTok, el acusado ensalzó ataques como el cometido en Algeciras por el terrorista Yassine Kanjaa, que acabó con la vida de un sacristán y que todavía está pendiente de juicio.

Realizaba búsquedas de armamento en Internet

Durante la entrada y registro de su domicilio en Tarrasa a finales de 2023, fueron hallados doce teléfonos móviles, un ordenador portátil, una tablet y una tarjeta de memoria, entre otros efectos.

En estos dispositivos, las autoridades encontraron 2.500 vídeos y evidencias de una búsqueda sistemática de armas blancas y prohibidas y de armas de fuego como postilas y fusiles de asalto.

También había búsquedas de chalecos antibalas con protección para munición de guerra y otros elementos susceptibles de ser utilizados para una acción terrorista.

30 marzo 2025 El Periodico de Catalunya

 

30 marzo 2025 



Los asesinatos nunca aclarados de la RAF en Alemania planean sobre el juicio a la presunta terrorista Daniela Klette

La antigua militante de la Fracción del Ejército Rojo (RAF) se sienta en el banquillo por los 13 atracos a mano armada que presuntamente cometió entre 1999 y 2016

"Soy consciente de mi situación. Será un juicio con mucha carga política aunque se sostenga lo contrario", afirmaba la presunta terrorista de la extinta RAF Daniela Klette, cuando finalmente tomó la palabra, cinco horas después de iniciarse su juicio. No se la juzga por su supuesta implicación en los atentados de la Fracción del Ejército Rojo (RAF), sino por 13 atracos a mano armada, cometidos según la acusación entre 1999 y 2016 por el trío que formó con los prófugos Burkhard Garweg y Ernst-Volker Staub. Pero sobre su proceso planean los asesinatos de autoría nunca aclarada, entre el total de las 34 víctimas mortales y 200 heridos que dejó la autoproclamada banda anticapitalista y marxista alemana hasta su disolución en 1998.

El asesinato no prescribe, es la máxima del sistema judicial alemán que se aplica tanto a los juicios tardíos contra nonagenarios o incluso centenarios cómplices del nazismo como contra ex terroristas como Klette, de 66 años. Se la considera miembro de la tercera generación de la banda que fundaron a mediados de la década de los 70 Andreas Baader y Ulrike Meinhof. Los atracos que se atribuyen al trío de Klette corresponden a su ‘segunda vida’, la que se labró como ‘Claudia’, bajo diferentes apellidos falsos. Llevaba 30 años buscada por la policía hasta que en febrero del año pasado la policía llamó a su puerta. Para sus vecinos, era la amable mujer de un piso de la quinta planta en la Sebastianstrasse, 73, en el multiétnico distrito de Kreuzberg. Sacaba a pasear al perro, daba clases de recuperación de matemáticas y bailaba capoeira en un grupo del barrio.

Un grupo de investigación periodística reconoció en Facebook su rostro entre los danzantes de un desfile de carnaval del barrio. Se reveló así su auténtica identidad como pieza clave del trío de ‘jubilados de la RAF’, como se les llama por la edad, que perpetró sus atracos a mano armada en distintos puntos del país, con un botín total de 2,7 millones de euros. En su modesto piso de dos habitaciones guardaba armas automáticas, munición, un kilo en oro y 250.000 euros en metálico. Se entregó sin oponer resistencia, pero tuvo tiempo de enviar un mensaje a uno de sus compañeros prófugos: ‘me han pillado’.

Solidaridad residual

“Todo esto es exagerado”, comentaba uno de los periodistas acreditados para seguir el proceso, en primera fila de la treintena de puestos asignados a los medios de la Audiencia de Celle, la ciudad de Baja Sajonia donde se abrió el juicio, el martes pasado. Se refería a los enormes dispositivos de seguridad que envuelven el juicio. La procesada y sus tres abogados están aislados en su ‘vitrina’ de cristales blindados. El público corriente, como la treintena de representantes de la prensa y un par de medios extranjeros, entre ellos EL PERIÓDICO, está tras una segunda muralla de cristal blindado. Llamó la atención que el teórico periodista al que las medidas de seguridad le parecen exageradas cruzara un amistoso saludo con Klette. La procesada había entrado en su vitrina entre abrazos solidarios con sus abogados, más el saludo cómplice al ‘periodista’.

Se trata de Karl-Heinz Dellwo, como le identificó el semanario ‘Der Spiegel’. Un ex terroristata de la RAF juzgado y condenado por el atentado y toma de rehenes con dos muertos en la embajada alemana de Estocolmo, en 1975, en libertad desde 1995. Que lograra acreditarse como periodista, cuando supuestamente hay enormes medidas de seguridad, es uno de los enigmas del proceso. Antes de superar los controles de acceso, Dellwo y la enviada del diario de la izquierda radical ‘Junge Welt’ Ariane Müller, se habían sumado a la concentración de solidaridad con Klette.

Eran apenas una treintena de simpatizantes los que se han acercado a Celle, una ciudad de 78.000 habitantes de Baja Sajonia y a 150 kilómetros de la cárcel de mujeres donde está recluida la procesada. Exhiben sus pancartas pidiendo ‘solidaridad internacional’ y corean canciones de bandas punk extintas como la RAF, donde se califica de ‘asesina’ a la policía. Es una protesta tan ruidosa como residual.

“Tuvieron acceso a las armas de la RAF, estaban entrenados en su manejo, amenazaron con ellas e hicieron temer por sus vidas a empleados o cajeros, inclusive una embarazada. Al menos en una ocasión dispararon a matar sobre uno de ellos”, explica en un aparte con los medios Stefen Hörnig, parte de la acusación particular. Representa al conductor de un transporte de dinero contra los que se dirigieron los tiros del trío en uno de sus atracos. Supuestamente Klette estaba al volante del auto utilizado por el grupo.

La tapadera de la autoría colectiva

Para el juicio de Celle se prevén una cincuentena de vistas todo este año. A ese proceso deberá seguir otro, el relacionado con su existencia anterior como miembro de la RAF. Ahí deberá responder por un atentado contra el Deutsche Bank en 1990, contra la embajada de Estados Unidos en Bonn de 1991 y contra una cárcel, en 1993. Son casos menores, como todos los de la ya agónica tercera generación de la RAF. “Es una vergüenza para el Estado de Derecho que se siga sin esclarecer la autoría de los asesinatos del ‘otoño alemán’”, opina el columista del diario conservador ‘Frankfurter Allgemeine Zeitung’, Reinhard Müller. Se refiere a los asesinatos de la etapa más mortífera de la banda terrorista, entre octubre y noviembre de 1977.

 

 

 

 

29 marzo 2025 (11.03.25) Asociación 11-M (opinión)

 

29 marzo 2025 (11.03.25) 


Fernando Reinares

Lo que el 11-M nos sigue enseñando sobre la incesante amenaza del terrorismo yihadista en Occidente

Tres factores, presentes en el caso de los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid, prefiguraron qué células y redes yihadistas tienden a preparar y ejecutar con más eficacia y con mayor letalidad actos de terrorismo. Las que establecen conexión con alguna organización yihadista matriz, las que cuentan con al menos un combatiente terrorista extranjero y las que incorporan yihadistas con pasado como delincuentes violentos. Esa combinación de factores, que se repitió en el caso de los atentados del 13 de noviembre de 2015 en París, es de nuevo verosímil en la amenaza que el terrorismo yihadista supone actualmente para las sociedades occidentales en general y las europeas en particular.

Resumen

El acervo de conocimiento resultante de la investigación académica sobre la amenaza del terrorismo yihadista en las sociedades occidentales permite identificar tres factores cuya presencia explica cuándo las células o las redes operativas son mucho más eficaces en su voluntad de materializar dicha amenaza en forma de atentados innovadores y con elevadas cotas de letalidad.

Esos factores son los siguientes: en primer lugar, la conexión con alguna organización yihadista matriz. En segundo lugar, contar con al menos un combatiente terrorista extranjero. En tercer lugar, incorporar yihadistas con pasado como delincuentes violentos. Esos tres factores estaban presentes en los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid y continúan advirtiéndonos de que su combinación se asocia con las expresiones más cruentas e impactantes de la amenaza del terrorismo yihadista, como pudo constatarse asimismo en los atentados del 13 de noviembre de 2015 en París. Pero en la actualidad existe de nuevo un considerable potencial de que se combinen esos tres factores de la amenaza que para el mundo occidental suponen células y redes yihadistas. En Europa occidental se han desbaratado recientemente complots terroristas que así lo corroboran.

Análisis

A lo largo de las últimas dos décadas, la investigación académica sobre la amenaza que supone el terrorismo yihadista para las sociedades occidentales ha acumulado un vasto conjunto de evidencia. Hablar hoy de la amenaza del terrorismo yihadista es hacerlo de un amplio rango de expresiones, desde la que es propia de los denominados actores solitarios hasta la que suponen células o redes constituidas por hasta incluso varias docenas de integrantes. Pero contamos con hallazgos suficientes como para saber bajo qué circunstancias es mucho más verosímil que estas células y redes sean eficaces en su voluntad de materializar dicha amenaza en forma de atentados innovadores y con cotas de letalidad comparativamente mayores.

En este sentido, los atentados perpetrados el 11 de marzo de 2004 en Madrid, es decir los atentados del 11-M, no sólo corroboran esos hallazgos que ha producido la investigación empírica sobre el terrorismo en el ámbito de las Ciencias Sociales. También continúan advirtiéndonos acerca de algunos factores que tienden a encontrarse presentes cuando el terrorismo yihadista se consuma adquiriendo las características inherentes a sus manifestaciones más cruentas y consiguiendo de este modo un impacto social muy superior al de otras expresiones menos severas de la amenaza. Pero ¿cuáles son esos factores? ¿En qué medida se prefiguraron en el caso del 11-M?

1. Conexión con alguna organización yihadista matriz

Las células o redes yihadistas que se movilizan para preparar y ejecutar atentados dentro de las sociedades occidentales tienen una mayor probabilidad de completar sus planes, es decir, de alcanzar el blanco o los blancos ambicionados con las tácticas previstas y producir víctimas, si los desarrollan en contacto de uno u otro tipo con alguna organización matriz. Alguna organización yihadista asentada por lo común en una zona de conflicto o territorio sobre el cual ejerce su influencia, en especial si el vínculo incluye recibir instrucciones, entrenamiento y hasta recursos. Así lo observó hace más de una década Javier Jordán en un estudio sobre incidentes de terrorismo yihadista en Europa occidental en los 10 años posteriores al 11-S.[1]

Además de registrar más eficacia operativa, las células y redes enlazadas de una u otra manera con el mando central de una organización matriz suelen ser más extensas y típicamente llevan a cabo atentados de mayor envergadura, a menudo coordinados y complejos, asimismo con niveles de letalidad mucho más elevados. Así lo constató una temprana investigación exploratoria de Scott Helfstein y Dominick Wright sobre planes terroristas desarrollados por células o redes yihadistas enlazadas con el núcleo de liderazgo de al-Qaeda.[2] Si bien son células o redes que suelen desenvolverse bajo constreñimientos más intensos de seguridad y vigilancia, por lo que sus planes puedan ser desbaratados incluso más a menudo que los de células o redes con vínculos más débiles.

Los atentados del 11-M pusieron de manifiesto la importancia que en términos de eficacia y de letalidad tiene este primer factor, relativo a esos vínculos organizativos, en concreto con respecto al mando central de una organización matriz como al-Qaeda. La red terrorista que preparó y ejecutó la matanza en los trenes de Cercanías empezó a configurarse en Madrid en marzo de 2002, siguiendo instrucciones de Amer Azizi, el destacado miembro de la célula de Abu Dahdah que no pudo ser detenido en la Operación Dátil por hallarse en Irán camino de Afganistán y huyó a Pakistán integrándose en las filas de al-Qaeda.[3] Pero hacia mediados de 2003, cuando ocupaba un puesto de responsabilidad como adjunto al jefe de operaciones externas de al-Qaeda, consiguió que los líderes de esta última apoyasen y facilitasen su plan para atentar en España.

Una de las conclusiones del esclarecedor informe “The Case for Al-Qai’da Links to the 2004 Madrid Bombings”, del National Counter Terrorism Center de Estados Unidos (EEUU), fechado en agosto de 2008, que recoge una serie de datos y hechos fundamentales para conocer cómo se planificó y preparó la matanza en los trenes de Cercanías, es la siguiente: “Azizi estaba bien situado en 2003 –cuando estarían desarrollándose los preparativos de los atentados con bomba en Madrid– para actuar de conducto entre el jefe de operaciones externas Hamza Rabia y otros líderes de al-Qaeda y los activistas en Madrid. A través de Azizi, al-Qaeda contaba con un vehículo para transmitir la aprobación de la operación en Madrid o para proporcionar instrucciones detalladas”.[4]

Además, la red del 11-M estuvo al mismo tiempo conectada con el directorio del Grupo Islámico Combatiente Marroquí (GICM), que entonces se encontraba establecido entre Bélgica y Francia. En la práctica, dos de sus más notables miembros, como eran Hassan el Haski y Youssef Belhadj, estuvieron de hecho entre los seis integrantes del componente que introdujo en dicha red esa organización yihadista magrebí. El GICM, entidad asociada con al-Qaeda, se había reorientado operativamente después de perder sus bases en Afganistán tras el 11-S, optando en aquellas circunstancias por priorizar la práctica de la yihad allí donde residieran sus miembros y partidarios, como en Marruecos y en España.

2. Presencia de combatientes terroristas extranjeros

Si los integrantes de una célula o red yihadista activa en cualquier país occidental se preparan para atentar, la presencia entre ellos de al menos un individuo que cuente con experiencia como combatiente terrorista extranjero o que haya recibido entrenamiento terrorista en el exterior es un segundo factor capaz de incrementar considerablemente la eficacia de esos preparativos, es decir, que se completen según lo previsto. Además, esa presencia de al menos un individuo con experiencia combatiente o entrenado en el exterior hace que la probabilidad de que el atentado o atentados a los cuales den lugar sean letales tienda a duplicarse. Este es el denominado efecto del yihadista veterano al cual se refirió Thomas Hegghammer en un importantísimo estudio pionero sobre el tema.[5]

En los países occidentales ha recalado una muy pequeña parte de los yihadistas con experiencia de entrenamiento o combate en zonas de conflicto. Incluso sólo una limitada proporción de los combatientes terroristas extranjeros partidos de esos países retorna y lo hace con un compromiso militante acentuado. Pero, si optan por implicarse en elaborados actos de terrorismo y finalmente lo hacen, su contribución a la movilización con fines terroristas de células o redes puede ser decisiva. No sólo por las destrezas con que cuentan para la preparación y ejecución de atentados. También porque su experiencia les confiere un carisma gracias al cual radicalizar, reclutar y agrupar individuos que bien pueden permanecer largo tiempo en estado durmiente bien pueden activarse en poco tiempo. También están en condiciones de aprovechar lazos existentes entre yihadistas residentes en un mismo escenario local, aunque pertenezcan a organizaciones u colectivos diferentes.

El caso del 11-M continúa siendo un buen recordatorio de la importancia que sobre la eficacia y letalidad de la amenaza terrorista supone el concurso de esos individuos con experiencia como combatientes en zonas de conflicto o entrenados como operadores en campos de organizaciones yihadistas. Entre quienes prepararon y ejecutaron la matanza en los trenes de Cercanías, el marroquí Said Berraj había recibido adiestramiento en tácticas de terrorismo, incluyendo capacitación especializada en la manufactura y uso de artefactos explosivos como los que estallaron en los vagones de esos trenes. En septiembre de 2000, poco después de haberlo captado para su célula en Madrid, Abu Dahdah envió a Berraj a un campo de entrenamiento de al-Qaeda en Afganistán, al cual se desplazó en compañía de Azizi y de donde regresó a Madrid en febrero de 2001.[6]

Allekema Lamari, exmiembro de una célula de la organización yihadista Grupo Islámico Armado (GIA) desarticulada en Valencia en 1997 como resultado de la Operación Appreciate, condenado en 2001 a 14 años de prisión, pero excarcelado en junio de 2002 debido a un desajuste judicial, fue otro de los terroristas del 11-M y con anterioridad a su llegada a España había sido combatiente yihadista en Afganistán.[7] El propio Azizi, inductor de la movilización de la red del 11-M y a la postre conducto entre ésta y el mando de operaciones externas de al-Qaeda, había recibido entrenamiento en el uso de armas y explosivos, primero en un campo yihadista de Zenica, en Bosnia, y, unos años después, en otras instalaciones en Afganistán, concretamente los campos al Faruk, de al-Qaeda, y Mártir Abu Yahya, perteneciente al Grupo Islámico Combatiente Libio (GICL), a los cuales acudió en 2000.[8]

A la red del 11-M pertenecieron además otros individuos de los que se sabe que estuvieron en Afganistán, como parte de sus actividades yihadistas, aunque se desconoce si recibieron entrenamiento o estuvieron implicados en combate. Tal es el caso de Rabei Osman Es Sayed Ahmed, es decir Mohamed el Egipcio.[9] Al nodo principal del componente del GICM en dicho entramado terrorista, el ya aludido Youssef Belhadj, que muy probablemente estuvo en Afganistán al menos en 2001, se le atribuye de hecho el apodo de Abu Dujan al Afgani, sobrenombre de alguien que había estado en Afganistán o tenía relación con este país.[10]

3. Yihadistas con pasado como delincuentes violentos

Un tercer factor de los que incrementa significativamente las capacidades con que una célula o red yihadista cuenta para completar con eficacia y letalidad sus planes para ejecutar atentados en países occidentales es la participación de individuos con trayectoria previa como delincuentes violentos. Aunque esto no es algo novedoso, ha sido especialmente observado en relación con la amenaza de Estado Islámico, a partir de su emergencia en 2014 como organización rival de al-Qaeda, en investigaciones como la desarrollada, respecto a la movilización yihadista en países de Europa occidental, por Rajan Basra, Peter R. Neumann y Claudia Brunner.[11]

La presencia progresivamente más visible y pronunciada de este tipo de yihadistas en el seno de células y redes inmersas en la preparación de atentados terroristas, tal y como han corroborado ese y otros trabajos posteriores, ha permitido a esos elencos disponer de importantes habilidades derivadas de su experiencia delincuencial previa. Entre estas habilidades se incluyen una particular facilidad para adquirir armas de fuego y explosivos con los que fabricar bombas, una familiaridad con la violencia que rebaja su umbral psicológico para implicarse en actos de terrorismo y una especial destreza para conducirse eludiendo actuaciones policiales de seguimiento y control.

Otras habilidades prácticas y logísticas muy valiosas, de entre las transferibles por yihadistas con pasado como delincuentes, son las de acceder a documentos falsificados a través de entornos delincuenciales conocidos, procurar domicilios seguros en los que ocultarse y obtener, precisamente mediante actividades criminales, los recursos financieros necesarios. Todo lo cual aumenta sobremanera las posibilidades de que los planes terroristas que esté preparando una célula o red yihadista se materialicen en atentados.

Una vez más, el caso del 11-M prefigura la trascendencia de este factor. Uno de los tres componentes que tuvo la red a que pertenecieron los yihadistas que atentaron en los trenes de Cercanías –y el último en ensamblarse, pues lo hizo en el verano de 2003– procedió de una banda de delincuentes violentos radicalizados en el yihadismo cuyos integrantes contaban con amplia y prolongada trayectoria en el tráfico ilícito de drogas y otras manifestaciones de delincuencia violenta como el robo en viviendas, el comercio ilícito con bienes sustraídos o la falsificación de documentos. Hasta 10 miembros de la red del 11-M, gran parte de ellos con antecedentes penales, provenían de esa banda. Eran todos marroquíes, residentes –legalmente o no– en España y entre ellos se encontraba su cabecilla, Jamal Ahmidan, conocido como El Chino.[12]

A través de los estos yihadistas con trayectoria previa en la criminalidad violenta y de las relaciones que tenían con otros círculos criminales es como la red del 11-M consiguió contar con un inusual número de individuos dispuestos a participar en actos de terrorismo espectaculares y altamente cruentos. También acumular una gran capacidad financiera, aproximadamente millón y medio de euros, más de 14 veces el coste estimado de la matanza en los trenes de Cercanía.[13] Además, infraestructura, vehículos y documentos falsos. Y, por último, acceder ilícitamente a explosivos industriales, sustraídos de una explotación minera asturiana por delincuentes españoles nativos que la intercambiaron por droga y probablemente algún otro incentivo económico ofrecido por esos integrantes de la red del 11-M con pasado como delincuentes violentos.

Conclusiones

Más de 20 años después de haber ocurrido, los atentados del 11-M nos sigue enseñando mucho sobre las peores expresiones que puede adoptar la incesante amenaza del terrorismo yihadista en los países occidentales. En la red terrorista que los llevó a cabo se dieron los tres factores que hacen de una conspiración terrorista más eficaz y letal. En la década durante la cual ocurrieron, la amenaza del yihadismo global para las sociedades abiertas estaba relacionada con al-Qaeda. En la década posterior se sumó la relacionada con Estado Islámico. Durante este periodo, los mismos tres factores coincidieron también en la red que perpetró los atentados del 13 de noviembre de 2015 en París.[14] No en vano, los atentados de Madrid y París son los actos de terrorismo yihadista más letales acontecidos en Europa occidental. Tanto al-Qaeda como Estado Islámico son hoy fuentes de amenaza terrorista en Occidente, incluyendo sus expresiones más letales como producto de células o redes en las que se combinen los tres factores.

En lo que atañe a al-Qaeda, ni ha desaparecido ni ha dejado de proyectar su amenaza terrorista sobre Europa. Sus dirigentes están priorizando una estrategia de expansión de las ramas territoriales, tres de las cuales –Al Shabab en Somalia, el Grupo de Apoyo al Islam y los Musulmanes en el Sahel, al igual que al-Qaeda en la península Arábiga– destacan en la actualidad por el dominio espacial y la influencia social que han logrado en sus zonas de operación, además de por su potencial de financiación y el desarrollo tecnológico de herramientas para practicar el terrorismo. Puede que el mando central de la estructura yihadista global se encuentre aún constreñido para planear grandes atentados terroristas en esa región. Pero en el contexto favorable de su retorno a Afganistán es verosímil que haya dado ya instrucciones de iniciar la activación de células terroristas para operar en Europa occidental, un escenario considerado más propicio que los de otras sociedades occidentales.

Pero las principales tentativas de ejecutar atentados espectaculares y altamente letales que han tenido lugar en los últimos cinco años en las sociedades europeas corresponden a células o redes que mantenían algún tipo de vínculo con Estado Islámico, posiblemente anticipando una inflexión al alza –también cualitativamente– en la amenaza del terrorismo yihadista dentro de la región tras su relativo y breve estancamiento posterior al colapso del califato. Para ser precisos, el principal vínculo de esas células o redes lo viene siendo con la rama –o provincia— de Estado Islámico en Jorasán, extendido en Asia central y el Cáucaso septentrional, ocasionalmente a través de intermediarios entre los que se incluyen mandos intermedios que actúan desde Oriente Medio y que ocasionalmente lo hacen online. Aunque en las conexiones de algunas de esas células o redes operativas han aparecido igualmente lazos con provincias de Estado Islámico activas en África.

El entorno antiterrorista en que se han desenvuelto recientemente y van a seguir desenvolviéndose células y redes yihadistas con planes para atentar en Occidente ha cambiado mucho a lo largo del último cuarto de siglo. Esto hace que les resulte más difícil preparar atentados complejos y altamente cruentos sin ser desbaratados por los servicios de lucha contra el terrorismo, incluso si se dan los factores que hasta ahora han estado asociados a una mayor probabilidad de que esos planes culminen con matanzas terroristas. Al tiempo, sin embargo, tanto al-Qaeda como, de manera más inmediata, Estado Islámico, vienen generando en la actualidad, como consecuencia de sus actividades en zonas de conflicto, las condiciones gracias a las cuales recuperar su potencial para promover y facilitar operaciones de elevada letalidad en el mundo occidental, en particular en las sociedades europeas.

Opinión:

Sobre las opiniones de Fernando Reinares, aprovecho a recordar su comparecencia del pasado martes 25 de marzo en la Comisión de Investigación por klos atentados de agosto2017 en Catalunya.

Aquí está el link:

https://www.youtube.com/watch?v=2-CjVvtkveI

Comisión de Investigación sobre el derecho a saber la verdad y las implicaciones derivadas de los atentados de Barcelona y Cambrils del 17 de agosto de 2017

XV Legislatura

Nº Sesion: 14

martes 25 de marzo de 2025 a las 11:00

1º. D. Fernando Reinares Nestares, investigador y exdirector del Programa sobre radicalización violenta y terrorismo global en el Real Instituto Elcano.

Comisión de Investigación sobre el derecho a saber la verdad y las implicaciones derivadas de los atentados de Barcelona y Cambrils del 17 de agosto de 2017

12:30 horas

2º. D. Ali Yassine, expresidente de la Mezquita Annour de Ripoll.

Comisión de Investigación sobre el derecho a saber la verdad y las implicaciones derivadas de los atentados de Barcelona y Cambrils del 17 de agosto de 2017

29 marzo 2025 El Correo Español (opinión)

 

29 marzo 2025



«Espero que los que hicieron desaparecer a 'Pertur' digan algún día dónde están sus restos»

El exdirigente de Euskadiko Ezkerra, abogado y escritor narra en una novela el final del jefe político de ETA pm en 1976

Iñaki Martínez (Guatemala, 1957) ha recreado en la novela 'Manto de silencio' la desaparición del dirigente de ETA pm Eduardo Moreno Bergareche, 'Pertur', en 1976. Martínez es abogado pero también se define como «aventurero». Como novelista ha publicado varias obras vinculadas al mundo del espionaje pero su biografía vital pasa por la política y la acción. Fue miembro de la dirección política de Euskadiko Ezkerra, colaboró con la guerrilla salvadoreña en los años 80 y, entre otras cosas, fue delegado del Gobierno vasco para Colombia, Venezuela, Ecuador y América Central entre 2009 y 2013. En 'Manto de silencio' se ha introducido en la historia de uno de los 'cadáveres exquisitos' de Euskadi, la eliminación de 'Pertur', el dirigente de ETA que en los 70 apostaba por la transición a la política.

– ¿Conoció usted a 'Pertur?'

– No. Yo no estaba en ETA pm, sino en la parte política. Franco llevaba muriéndose un año, pero sabíamos que tras su fallecimiento vendría una democracia. Al sector político nos llegaban en esos días notas que estaban escritas por un compañero al que llamaban 'Pertur' que eran muy interesantes. Él empezó a diseñar lo que habría de ser el futuro político y lo que serían las organizaciones de masas.

– Los últimos días de 'Pertur' fueron dramáticos.

– Hay dos momentos muy importantes. El primero es el secuestro de Ángel Berazadi, un industrial guipuzcoano que luego fue asesinado. 'Pertur' y otros rechazaban esa acción. Y, más tarde, el propio 'Pertur' fue secuestrado por otros miembros de la organización para que no participase en la reunión en la que se iba a hablar de la creación del partido político. 'Pertur' escribió una carta, que envió a su compañera sentimental, en la que los definía como bestias. La división era ya evidente entre quienes querían seguir a toda costa con la lucha armada y quienes defendían la creación del partido político para dejar la lucha armada en un momento posterior.

– ¿Quién mató a 'Pertur?'

– La verdad jurídica yo no la tengo y no la han podido tener los jueces. Hubo una primera investigación judicial en Francia, porque estos hechos ocurrieron en San Juan de Luz el 23 de julio de 1976. Pero la actuación de la policía francesa fue pésima, entre otras cosas porque consideraron que aquel era un asunto entre miembros de ETA y les interesaba muy poco. Se sabe que dos de los sospechosos trasladaron a 'Pertur' desde San Juan de Luz a otro punto, pero el coche no fue verificado, ni se tomaron huellas, ni se buscaron evidencias... En 2008, a petición de la familia, se abrió una investigación en la Audiencia Nacional y concluyó en el 2012. Se establecieron una serie de indicios importantes, pero sin poder determinar una acusación de asesinato ni quiénes podrían haber sido los intervinientes. De todo lo ocurrido van a cumplirse 50 años y sobrevuela la sospecha de que los autores de la desaparición de 'Pertur' fueron los miembros de los 'comandos especiales' de la propia ETA. Todos los que, de una u otra manera, nos hemos acercado a esta historia creemos esa versión, que está apoyada precisamente en las secuencias de hechos y los episodios que narro en la novela. Pero no son más que sospechosos, grandes sospechosos, diría yo.

– La izquierda abertzale esgrimió en su día la tesis de la 'guerra sucia'.

– Hay que tener en cuenta el contexto. ETA estaba dividida en dos grandes grupos, los de la apuesta política y los de los 'comandos especiales', que no querían un partido político. Los compañeros de 'Pertur' comenzaron a investigar y preguntaron a sus rivales, que se limitaron a decir que no sabían nada. Según su versión, dos de los 'especiales' se limitaron a trasladar en coche a 'Pertur' a un punto cercano a la frontera y lo dejaron ahí. El otro sector les presionó. Ellos se preguntaban: ¿con los antecedentes que han ocurrido –el secuestro, la tensión evidente...–, cómo es posible que 'Pertur' viajase con vosotros? Al final, se encontraron con una situación compleja porque tenían sospechas, pero no una prueba directa, de que los 'especiales' habían hecho desaparecer a 'Pertur'. Entonces, los mismos sospechosos lanzaron una campaña para acusar al Estado y a la extrema derecha, etc... El sector político tuvo sus dudas pero no reaccionó. Pero aquí hay un hecho muy importante y es que las personas de ETA pm que participaron en una rueda de prensa en Francia acusando a la 'guerra sucia' de la desaparición de 'Pertur' viven y han reconocido que aquello fue una farsa.

– ¿Se sabrá algún día la verdad sobre 'Pertur'?

– Bueno, yo confío mucho en algo que parece una cosa religiosa, pero no creo que lo sea tanto, que es el remordimiento de conciencia. Es decir, yo creo que en algún momento, alguno o algunos de los que participaron en la desaparición de 'Pertur' contarán que ocurrió y ojalá que también digan dónde están los restos. Aunque sea de una manera anónima, sin implicación personal ni penal.

– Pero nadie ha dado jamás ese paso en ETA. La prueba es el caso de los tres jóvenes gallegos a los que la banda secuestró, torturó, asesinó y luego hizo desaparecer. Fue en 1973 y nadie de la banda ha colaborado para recuperar los cuerpos.

– Estamos en un momento de la historia vasca en el que todos, o casi todos, estamos por la reconciliación y por restañar las heridas. Y creo que esos procesos empiezan por no ocultar el pasado. Aún más, cuando son casos que ya no tienen trascendencia penal porque están prescritos. Yo creo que la izquierda abertzale tendría que hacer un esfuerzo, y no me refiero a su actual secretario general, Peio Otxandiano, porque es un hombre muy joven y que seguramente no había nacido cuando sucedieron los hechos, sino al corpus histórico de la izquierda abertzale. Llevamos demasiado tiempo pensando, sobre todo desde 2010, que el precio que hay que pagar por la paz es el silencio. Y eso no conduce a nada bueno.

Opinión:

Es importante conocer las realidades paralelas durante la existencia de la banda terrorista ETA y poder obtener información que vaya acreditando que siendo una banda de asesinos también podía ser una excelente muestra de mafia económica.

A lo que se pueda explicar en el libro habría que compensar, para más datos, la información que publicaron hace muchos años y en diferentes libros sobre la trama económica y civil de ETA víctimas como Daniel Portero o abogados como José María Fuster-Fabra.

De ese modo se puede entrever lo que fue realmente la banda terrorista ETA.

Sobre el hecho de si algún día se sabrá la verdad sobre la muerte de 'Pertur', mi opinión ni es tan positiva como la que presenta Iñaki Martínez. Sinceramente, creo que ha habido acciones que jamás se conocerán.

Y estaría encantado de equivocarme.

 

 

 

28 marzo 2025 Diario Noticias de Salamanca (opinión)

 

28 marzo 2025 



El grupo yihadista creado en Salamanca suponía “una potencial amenaza para la Seguridad Nacional”

Los agentes detectaron dinámicas de entrenamiento físico, indumentaria usada habitualmente por terroristas yihadistas y propaganda de sheiks yihadistas, Al Qaeda, DAESH y organizaciones terroristas de origen palestino

La Guardia Civil ha hecho público este viernes el resultado de la operación contra el terrorismo yihadista llevada a cabo en Salamanca, información que fue adelantada por Salamanca24horas.com.

Los agentes, bajo la dirección del Juzgado Central de Instrucción Número 1 de la Audiencia Nacional, así como la Fiscalía, detuvieron a tres personas con residencia en Salamanca como autores de presuntos delitos de terrorismo yihadista.

Aunque solo uno de ellos fue arrestado en esa operación cuando se encontraba en la ciudad de Salamanca, en concreto en el barrio de Capuchinos (tal y como se puede ver en el vídeo que acompaña esta noticia), mientras que otro fue detenido en Huelva y el tercero en Burgos, todos ellos formaban parte de un grupo con origen en la ciudad de Salamanca y en municipios de área metropolitana.

Estas tres personas constituyeron el grupo originalmente en la provincia de Salamanca, alineados, tal y como informa la Guardia Civil, con la “Tesis del movimiento yihadista global”.

En ese sentido, los agentes, dentro de la operación, registraron inmuebles en Salamanca y en otros municipios del alfoz, como Villares de la Reina, encontrando material para autoadoctrinamiento y autocapacitación a través de múltiples fuentes. Del mismo modo, los agentes pudieron detectar diferente material relacionado con sheiks yihadistas, Al Qaeda, DAESH y organizaciones terroristas de origen palestino.

En ese sentido, la Guardia Civil destaca que en la investigación se detectaron dinámicas de entrenamiento físico, así como el uso de pasamontañas o simulación de chalecos de combate, indumentaria que se emplea habitualmente por terroristas yihadistas y que usaban para realizar vídeos o fotografías para distribuir a terceros. En esos registros también pudieron incautar armas blancas de grandes dimensiones.

Además de la incautación de material físico, los agentes también detectaron juramentos de fidelidad, búsquedas en internet sobre armas, explosivos y ataques suicidas; algo que hace identificar al grupo como “una potencial amenaza para la Seguridad Nacional”, tal y como ha catalogado Guardia Civil.

Estos hechos propiciaron la detención inmediata de los miembros de la célula yihadista y por ello, a pesar de la relación y la residencia habitual en Salamanca, dos de los miembros tuvieron que ser arrestados cuando se encontraban en ese momento en Huelva y Burgos.

Tal y como prosigue la información facilitada desde el Ministerio del Interior, la operación ha contado con el despliegue de una Oficina Móvil de la Agencia de la Unión Europea para la Cooperación Policial, EUROPOL, que “in situ y sobre el terreno ha colaborado en el análisis y valoración de los hallazgos realizados durante la fase de explotación policial, especialmente en el ámbito de las vinculaciones a nivel internacional”.

Por todos estos hechos, y como ya informó este medio, dos de los presuntos yihadistas han ingresado en prisión, mientras que un tercero ha quedado en libertad provisional.

Esta operación supone la primera en la historia contra el terrorismo yihadista en la provincia de Salamanca.

Opinión:

Importante noticia por dos motivos.

Primero, por la detención que nos aporta la prevención del delito y, por lo tanto, el haber evitado las más que probables actividades terroristas que pudieran estar preparando.

Segundo, porque han sido detenciones en lugares en los que, hasta ahora, no se esperaba que existieran especímenes de este tipo. Obviamente, de tener intenciones de atentar, podrían haberlo hecho en su lugar de residencia o en cualquier otro punto.

Hay que seguir con la prevención ofreciendo los máximos recursos para alcanzar el máximo nivel.

 

viernes, 28 de marzo de 2025

27 marzo 2025 (9) Noticias de Gipuzkoa (opinión)

 

27 marzo 2025 



Vox pide en la Cámara vasca incluir el terrorismo de ETA en los currículos educativos de 3º y 4º de ESO

El PP apoya la iniciativa y defiende que "las nuevas generaciones tienen derecho a conocer la verdad de lo ocurrido, sin manipulaciones"

Vox, con el apoyo de PP, ha pedido este jueves en el Parlamento Vasco que el Gobierno Vasco incluya el terrorismo de ETA "y su impacto social y político" en los currículos educativos vascos, especialmente en 3° y 4° de la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), y que colabore con el Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo de Vitoria-Gasteiz para la formación del profesorado de colegios públicos y concertados para "un correcto abordaje del fenómeno del terrorismo de ETA en 2° de Bachillerato".

La parlamentaria de Vox, Amaia Martínez, ha llevado al pleno de la Cámara vasca esta proposición no de ley, que también insta al Gobierno Vasco a fomentar que alumnos de cuarto de la ESO de colegios públicos y concertados vascos visiten el Memorial de Víctimas del Terrorismo de Vitoria-Gasteiz, "propiciando que estas visitas formen parte del programa escolar de dichos centros". El texto ha sido rechazado por todos los grupos de la Cámara, salvo el PP que lo ha apoyado.

Revisión de los currículos educativos

Martínez ha explicado que "hasta 2023, año de la última revisión de los currículos educativos, aún figuraba como objetivo en la educación de alumnos de tercero y cuarto de secundaria la solidaridad con las víctimas del terrorismo y la violencia, la necesidad de una memoria crítica en relación con el terrorismo de ETA". "Era poco, pero hasta eso ha desaparecido de los currículos educativos vascos. Estamos con más desmemoria", ha denunciado.

Según ha criticado, "por debajo de los 25 años de edad son franca minoría quienes saben siquiera que ETA existió, asesinó y condicionó para mal la vida de miles y miles de personas" y ha defendido que su propuesta es "razonable, responsable y necesaria", ya que considera "importante que el terrorismo de ETA y sus consecuencias sean parte explícita de los currículos educativos a modificar tras la aprobación de la Ley Vasca de Educación". "No deberíamos dejar pasar esta oportunidad", ha insistido.

Además, ha propuesto que "el profesorado reciba formación solvente para abordar este reto de forma razonable, ajustando la materia a la realidad vivida" y ha puesto en valor el trabajo que realiza el Centro Memorial Víctimas del Terrorismo, "un agente que ha venido a aportar oxígeno para la difusión de lo vivido, para contrarrestar el relato 'fake' del conflicto, la imagen aberrante de una ETA revolucionaria".

El turno de intervención de grupos solo ha sido utilizado por la parlamentaria del PP Muriel Larrea, que también ha defendido "la importancia y necesidad de incluir la historia de ETA en el currículum de Historia del País Vasco", ya que "la historia de ETA forma parte innegable del pasado reciente del País Vasco y negar su existencia o minimizar su impacto es una falta de respeto a las víctimas, a sus familias y a la sociedad en su conjunto, sociedad vasca que sufrió la socialización del terror".

"Las nuevas generaciones tienen derecho a conocer la verdad de lo que ocurrió, sin edulcorantes ni manipulaciones", ha señalado, antes de reprochar al resto de formaciones políticas de la Cámara vasca que no hayan participado en el debate propuesto por Vox.

Opinión:

Cuando en los últimos años leo o escucho información en la que aparecen las palabras “terrorismo” y “educación” en la misma frase, empiezo a temblar. Y lo digo con el derecho que me aporta el haber impartido charlas y conferencias en centros educativos desde mediados de los años 90, con lo que ya son 30 años de experiencia.

En aquellos años, hablar de terrorismo no implicaba, en modo alguno, el proselitismo y la inculcación de ciertas ideologías partidistas que sí suceden en la inmensa mayoría de actividades actuales. He acudido a algunas charlas de supuestos especialistas en la materia o incluso de alguna supuesta “víctima” y, ciertamente, fue lo más parecido a un mitin político que he podido escuchar.

Digo todo esto porque si hay quien quiere incluir el terrorismo de la banda asesina ETA en los currículos educativos de 3º y 4º de ESO, me parece una idea magnífica… de hecho, es la banda terrorista que me quemó vivo en Hipercor por una cuestión que a mí, sincera y llanamente, no me importaba lo más mínimo: lo que llamaban “independencia de Euskal Herria”.

Obviamente hay que hablar del terrorismo de ETA, pero no estaría de más que también de hablara del terrorismo de otras bandas terroristas que han atentado en España o también en el extranjero. Y ello deberá hacerse sin incluir mensajes ideológicos o que nada tienen que ver con el problema, ya grave de por sí, como es el terrorismo.

Por ello me gustaría saber si los que piden “en la Cámara vasca incluir el terrorismo de ETA en los currículos educativos de 3º y 4º de ESO” también pide incluir el terrorismo de otros significados e incluso de aquel terrorismo del que conocer el significado es harto complicado.

Y, evidentemente, espero que quien imparta esas charlas, esos “conocimientos”, pueda demostrar fehacientemente que ha vivido realmente lo que pueda explicar o, incluso yendo un poco más allá, pueda demostrar que no tiene vínculo alguno con alguna banda terrorista en su pasado personal.

Como por ejemplo… esto que sigue a continuación: