17 diciembre 2024
La
Jefa de Mossos reconoce tardanza en unir la explosión de Alcanar con el 17-A
Reconoce
que la policía catalana en 2017 "no tenía mucho conocimiento" sobre
el explosivo 'madre de Satán' usado por los yihadistas
La
intendente Rocío Rubio Mojarro, jefa de la Policía Científica de los Mossos
d'Esquadra en 2017, ha reconocido este martes que no se relacionó la explosión
de la casa de Alcanar con un atentado yihadista de la célula dirigida por el
imán de Ripoll, Abdelbaki Es Satty, hasta que se produjeron los atropellos
mortales en Las Ramblas un día después, el 17 de agosto (17-A).
"Hacemos
la conexión en el momento del atropello", ha señalado antes de reconocer
que en 2017 "no tenían mucho conocimiento del TATP", el explosivo de
peróxido de acetona conocido como 'madre de Satán' que almacenaba la célula
yihadista en Alcanar y que confundieron al inicio con un laboratorio de drogas.
"Sacar
conclusiones de mejora es como sacar las vergüenzas aquí, pero bueno, pues no
teníamos mucho conocimiento del TATP en ese momento desde el nivel
científico", ha sostenido, añadiendo que tampoco había una
"maquinaria de identificación rápida" y que, con el objeto de servir
a los ciudadanos, "se está luchando por adquirirla" porque "hay
unos compromisos de mejora"
Hubo
"muy buena colaboración"
En
su comparecencia ante la comisión de investigación en el Congreso de los
Diputados, Rubio Mojarro ha destacado que contaron con la ayuda de las Fuerzas
y Cuerpos de Seguridad "desde el primer momento", apuntando que puede
dar fe de que hubo una "muy buena colaboración" con los TEDAX de la
Guardia Civil y también en su ámbito estrictamente de análisis
científico-forense.
En
este sentido, ha relatado la ayuda que le ofreció el día 18 de agosto la
comisaria principal de Científica de la Policía Nacional, Pillar Allúe, así
como también el 21 de ese mes por parte del coronel de la Guardia Civil José
Antonio Berrocal. "No tengo ninguna duda que todo el mundo hizo su
trabajo", ha señalado.
La
intendente se ha centrado en lo que recuerda desde su ámbito de competencias en
Científica y ha reconocido que fueron los Mossos los que iniciaron la
investigación barajando que la explosión de Alcanar podría ocultar un
laboratorio de drogas, tesis que giró hasta el móvil terrorista "diez
minutos" después de la segunda explosión, cuando ya tenían aviso de los
atropellos con furgonetas en Las Ramblas.
"Le
puedo decir que a nivel de laboratorios forenses siempre ha habido una
colaboración excepcional entre todos los grupos policiales y al día siguiente
la comisaria principal de la Policía me estaba ofreciendo ayuda y el día 21 el
coronel de la Guardia Civil", ha dicho en respuesta a Junts.
"Innumerables
indicios" frente a conjeturas
La
intendente ha rechazado "fabular" o "hacer conjeturas"
sobre un atentado que se juzgó teniendo en cuenta "innumerables
indicios" recabados en Alcanar y en otros lugares como las furgonetas y
vehículos que usaron los terroristas, incluyendo la identificación de Es Satty.
Sobre
el imán de Ripoll ha sostenido que se le identificó tras la explosión en
Alcanar con "muestras atribuidas altamente fiables", como es habitual
en estos casos cuando no se dispone de comparativa de ADN procedente de un
familiar válido.
En
su repaso a lo ocurrido en agosto de 2017, Rubio Mojarro ha reconocido en
respuesta a Vox que ni en la primera ni en la segunda explosión en Alcanar se
contempló por parte de Mossos la posibilidad de que fuera un atentado
terrorista.
También
ha puesto el foco en que en 2017 no existía un control exhaustivo sobre la
adquisición de los precursores de explosivo que usaron los terroristas para
fabricar la 'madre de Satán', apuntando a la posibilidad de que la célula se
informara en internet para su elaboración mezclando sustancias como agua
oxigenada y acetona.
No hay comentarios:
Publicar un comentario