16 agosto 2018
Las víctimas del 17-A
denuncian que el 'procés' las dejó "en segundo plano"
Exigen
hoy una «tregua política» y denuncian su «abandono»
La conmoción por el atentado que el 17 de
agosto de 2017 mató a 16 personas y unos 150 heridos en Cataluña volverá a
encarnarse hoy en el centro de Barcelona, epicentro de los
homenajes un año después del ataque yihadista. Antes de que las
autoridades se concentren este viernes en el homenaje oficial a escasos metros
de donde una furgoneta se arrojó por medio de La Rambla arrollando a los
transeúntes, víctimas del atentado denunciaron que la tensión política que se
desató en Cataluña al calor del referéndum ilegal de autodeterminación del 1 de
octubre escasas semanas después
de la acción terrorista los relegó a un «segundo plano».
Aun más, algunos afectados se declararon
«engañados, agotados, abandonados por las autoridades, incomprendidos y
tristes», y dirigieron sus críticas sobre todo al Ministerio del Interior y a la Generalitat , a las que pidieron
que «se pongan las pilas» para atender a
los damnificados.
«Los atentados del 17 de agosto fueron
importantes hasta que, desgraciadamente y por la situación política que se
empezó a vivir poco más de un mes después de los atentados, todo quedó en un
segundo plano», observó Robert Manrique, víctima del atentado de ETA contra el
Hipercor de Barcelona en 1987 y asesor de la Unidad de Atención y Valoración a Víctimas por
Terrorismo (UAVAT), creada el febrero pasado y a la que han acudido hasta ahora 150
afectados por los crímenes del 17-A en Barcelona y Cambrils (Tarragona).
A su vez, Manrique afirmó que Barcelona no ha
completado su proceso de duelo por los muertos porque «ha habido otras cosas
que lo han tapado», en referencia a que el debate en torno al 1-O y el
independentismo en Cataluña desplazaron por completo el interés sobre qué había
ocurrido para que los atentados llegaran a cometerse y en qué estado se
hallaban los perjudicados. «¿Y se ha hecho la atención que las
víctimas se merecen? No», cuestionó Manrique, «incluso una vez
que empezó el lío político en Cataluña y fuera de Cataluña, todo eran noticias
sobre el procés y no encontrábamos ni una sola reseña de una sola víctima que
dijera si estaba bien cuidada o no».
A la conmemoración organizada por el
Ayuntamiento de Barcelona en la plaza de Cataluña no acudirán algunas
organizaciones independentistas, como la CUP y la Assemblea Nacional
(ANC), que protestarán así por la presencia del Rey en la capital catalana; la ANC y Òmnium Cultural
han contraprogramado con un acto propio de reconocimiento a los
dirigentes que dirigían la
Generalitat cuando el 17-A, incluido el ex conseller de
Interior Joaquim Forn, en prisión provisional en la cárcel de Lledoners
(Barcelona) a consecuencia de la causa por presunta rebelión por el 1-O.
Frente a la polémica que ha planeado en los
últimos días, la UAVAT reclamó que la
discusión política no se entrometa en los actos de recuerdo. «En
nombre de las víctimas que atendemos, pedimos a la clase política que haga una
tregua mañana y no use el dolor ajeno para hacer política», rogó Manrique,
flanqueado por tres víctimas con secuelas físicas y psicológicas por los
ataques del año pasado.
Una de ellas era Ana Cortés. Acababa de salir
de la boca de metro y esperaba a una amiga en la parte alta de La Rambla cuando el terrorista
Younes Abouyaaqoub se coló en medio del paseo y aceleró para embestir a los
viandantes. Fue testigo de cómo la gente «volaba como si fueran
muñecos rotos». Recibe tratamiento psicológico y, desde entonces,
no ha vuelto a la popular arteria barcelonesa. El 43% de los atendidos por la UAVAT tampoco han regresado
al lugar del atentado.
«Ningún partido político, ni asociaciones, ni
organizaciones se han interesado en saber quiénes éramos, cómo estábamos, dónde
estábamos, cuáles eran nuestras necesidades... Ésos que ahora se pelean por
hacerse la foto con nosotros y somos su prioridad en todas sus campañas»,
reprocha Cortés en una carta escrita de puño y letra que ayer leyó ante decenas
de periodistas. En la misma misiva, aplaudida por otras víctimas presentes,
Cortés resalta que la única ayuda la han recibido de cuerpos de seguridad y
emergencias, además de los psicólogos y abogados de la UAVAT «que se están dejando
la piel». Cortés instó a los políticos «de todos los colores, lados e ideales»
a que trabajen para que «esto no se repita, que sólo se digan verdades, que no
se manipule el dolor de toda víctima y que no se politice el dolor».
También dieron la cara dos supervivientes del
ataque en Cambrils. Rubén Guiñazú y Núria Figueras son pareja y uno de los
terroristas se les abalanzó en el paseo marítimo de la población tarraconense. Guiñazú protegió a su
mujer, que se arrojó al suelo, pero uno de los atacantes le clavó un cuchillo
en el rostro. Lo dejó gravemente herido. «Me apuñalaron en la
cara por estar en el lugar equivocado», apuntó el hombre, que logró arrancarse
el puñal y fue atendido en un chiringuito y por los Bomberos antes de ser
hospitalizado.
Su pareja dijo que se han sentido «víctimas de
segunda» y focalizó sus críticas tanto en el Ayuntamiento de Cambrils como en
el Ministerio del Interior. La UAVAT cree que desde el
Gobierno central ha faltado «empatía, solidaridad y sensibilidad» con
los afectados, apuntó Manrique, que afeó que Interior no haya mantenido abierta
hasta ahora una oficina de atención a las víctimas que funcionó en Barcelona
del 22 al 29 de agosto del año pasado, «cuando las víctimas mortales estaban
siendo enterradas, los heridos intentaban sobrevivir en los hospitales y los testigos
presenciales estaban encerrados seguramente en casa». «Estamos supliendo las
carencias de la administración», añadió.
Además, la UAVAT urgió al ministro Fernando Grande-Marlaska
a derogar el plazo de un año para presentar las peticiones de reconocimiento de
víctima, resaltando que aún está recibiendo a afectados. El ministerio ha
prometido que, aunque el periodo vence hoy, examinará las solicitudes aunque se
presenten fuera de término. Interior ha informado esta semana que ha tramitado
hasta el momento 130 expedientes, ha reconocido a 70 víctimas y ha destinado
9,8 millones de euros en ayudas.
Opinión:
Solo un par de aclaraciones a
la información. Cuando se presenta la frase
"denunciaron
que la tensión política que se desató en Cataluña al calor del referéndum
ilegal de autodeterminación” debo aclarar que, en ningún momento se usaron
tales palabras sino que hablamos del “proces” o del “lío político”… al contrario
que otros personajes, no entramos a valorar si lo que ocurre es legal o ilegal,
del mismo modo que tampoco mentimos cuando hablamos de cifras o de personas
asistidas.
Y
también hay que aclarar que asistimos y mantenemos contacto con personas
afectadas por las otras dos acciones terroristas: la de Alcanar y la del
asesinato de Pau Perez, además de los “crímenes del 17-A en Barcelona y
Cambrils (Tarragona)”.
Para terminar, solo una pregunta a la que espero que los responsables de la organización aporten una respuesta: ¿Alguien se ha preguntado cuántas víctimas de los atentados del 17 de agosto estaban presentes en la concentración del jueves?
Para terminar, solo una pregunta a la que espero que los responsables de la organización aporten una respuesta: ¿Alguien se ha preguntado cuántas víctimas de los atentados del 17 de agosto estaban presentes en la concentración del jueves?
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