martes, 16 de noviembre de 2021

15 noviembre 2021 (3) La Vanguardia

15 noviembre 2021 

 


Baltasar Garzón: “España sigue en el punto de mira del islamismo radical”

El juez que dirigió la desarticulación de la primera célula de Al Qaeda en España sostiene que no se tomó en serio la amenaza que se estaba fraguando ni después del 11-S 

Incluso hasta después de los atentados del 11-S, el yihadismo en España no se tenía en cuenta. Y sin embargo, el peligro aún existe. Estas son las reflexiones de Baltasar Garzón, hoy abogado, pero entonces el juez que dirigió la primera operación contra una célula de Al Qaeda en España, hace ahora veinte años. El líder de aquel grupo se llamaba Abu Dadah, y su nombre y el de sus cómplices se vinculan tanto con los hechos ocurridos en EE.UU. como con el 11-M.

¿Cuál fue la trascendencia de la detención de Abu Dadah?

Fue muy importante. Recordemos el contexto. La detención de Abu Dadah fue en noviembre del 2001. La década precedente se caracterizó por la negación del fenómeno del yihadismo. En España se centraba la atención en el terrorismo autóctono, en especial ETA, y lo demás prácticamente ni se tomaba en cuenta. La Unidad de Información Exterior de la Comisaría General de Información tenía tres o cuatro funcionarios. No había conciencia ninguna.

¿Quién era Abu Dadah?

En todo este periodo había una figura que siempre emergía en todas las investigaciones, y esta era Abu Dadah. Al principio estaba en un segundo nivel, pero luego Abu Dadah estaba al frente de este grupo que se iba formando, y empiezan a aparecer figuras como la de Mustafá Setmarian o Amer Azizi (ambos fueron jefes de Al Qaeda) y allá por el año 1995 aparece en las investigaciones el nombre de Bin Laden. Se forma un grupo de personas que tendrían gran relevancia. En el 2001 son los atentados de Estados Unidos y en España no se tuvo en cuenta nunca con seriedad en aquella época lo que se estaba fraguando. En la operación contra ellos todos fueron detenidos salvo uno, que era Amer Azizi. La policía y yo tuvimos una gran frustración, porque eludió el cerco policial. Estaba monitorizado por la policía, pero, unos días antes, dos personas llamaron a su puerta preguntando si allí vivía Azizi. Abrió él precisamente y dijo no, no vive aquí. Un par de horas después alguien salió sin barba, con la cabeza rapada y nunca más se le volvió a ver. Parece ser que alguien de un servicio actuó descoordinado con otros y este hombre desapareció. Después se le vinculó con el 11-M y fue muerto por un dron de Estados Unidos.

¿Cuándo cambia la visión que se tenía de este problema?

España era, digamos, la fase previa del atentado del 11-S, pero fue muy importante. Otro de los grandes expertos, el comisario Gómez Menor, sostiene que en España se han evitado multitud de posibles atentados. Tampoco se tenía esa conciencia de que España podía ser objetivo terrorista cuando hubo los atentados de Londres o de Francia. Ideológicamente, los del 11-S se formaron aquí y en Londres, había una interrelación permanente.

¿Estaba España en el centro de la operativa de Al Qaeda?

Todos estuvieron aquí y todos tenían siempre el mismo contacto. Muchos de ellos se formaron aquí, como Mustafá Setmarian, que llegó a ser el jefe del entrenamiento y de explosivos en Al Qaeda.

Usted procesó a Bin Laden

El hecho de procesar a Osama Bin Laden fue tomado por algunos a chanza. Bueno, pues lo cierto es que es el único intento de procesamiento. Es decir, que hubo una vinculación con lo que pasaba aquí. Se instalaron aquí y nadie les molestó porque durante muchos años no se prestó atención a quienes estaban vertebrando la estructura que después se plasmó en acciones concretas. Desde el punto de vista de los yihadistas, España era un enemigo. Y como a los enemigos se les tiene que contestar y no era necesario que hubiera unas órdenes por parte de una estructura piramidal de Al Qaeda. Por eso en más de una ocasión he dicho el fenómeno del terrorismo yihadista no se puede nunca abordar como el terrorismo tradicional conocido aquí en España, sino que tiene unas causas más profundas que se tienen que abordar y que se expanden hacia otros ámbitos mucho más amplios que la mera persecución policial.

 

A raíz de la detención de la célula, ¿se produjo una mayor colaboración de Estados Unidos, incluso contra ETA?

A Estados Unidos, no voy a decir que ETA le importaba poco, pero era como algo que quedaba muy lejos y que no conocía. De hecho, si ven los informes de inteligencia sobre ETA hasta la propia terminología deja mucho que desear. La CIA no tenía ni idea de lo que era ETA. Es verdad que cuando Estados Unidos verdaderamente empieza a cooperar con España en el ámbito terrorista y en muchos ámbitos más es cuando comprueba que España colabora. Sí, hubo algunas operaciones en las que sí había colaborado en la lucha contra ETA, pero más en el ámbito operativo, como Sokoa. En fin, todas esas operaciones en las que efectivamente prestó apoyo logístico y operativo a las acciones que en la época desde España o los franceses llevaron a cabo, pero los norteamericanos siempre dan algo si tú les das algo a ellos primero.

La guerra de Siria ha acabado y Estados Unidos se ha retirado de Afganistán...

Evidentemente, no es la misma situación. Ahora es complicado que se estructuren. Como elementos aislados siempre es posible, pero el grado de conocimiento por parte de los cuerpos y fuerzas de seguridad es muy avanzado y por tanto, eso conlleva que sea más difícil el escenario para ellos. También es más amplia la cooperación internacional, tanto judicial como policial. Es verdad que hemos aprendido mucho, pero eso no obsta para que pueda haber hechos graves en cualquier momento. Lo estamos viendo: si tienen bombas, utilizan bombas; si tienen armas de guerra, utilizan armas de guerra; si tienen cuchillos, utilizan cuchillos; y si no embisten con vehículos como en la Rambla de Barcelona. El nivel de preparación ideológica violenta es tal que ya no hace falta que se utilicen las mezquitas: hay mezquitas virtuales. No quiero decir que la culpa sea de las mezquitas, lo explico como un foro.

¿Y respecto a España?

Si yo tuviera que decir dónde se focaliza ahora mismo el peligro respecto a España, diría que en El Sahel. Eso no quiere decir que vaya a tener un reflejo inmediato, pero no estamos tan lejos físicamente y sobre todo muy próximos en lo que es la comunicación virtual y el mecanismo, insisto, de ideologización y de sometimiento adictivo: es a través de internet. Eso sí, se ha demostrado, eso es en todas las investigaciones que hemos llevado a cabo. El riesgo está aquí y no podemos dejar de atender a esa realidad. España sigue en el punto de mira del islamismo radical.

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario