domingo, 11 de octubre de 2020

09 octubre 2020 La Vanguardia (opinión)

09 octubre 2020 

 


 

Iturgaiz, la cara de la resistencia del PP ante el terrorismo de ETA

Carlos Iturgaiz es la cara de la resistencia del Partido Popular del País Vasco ante el terrorismo de ETA, el presidente que enterró a cinco concejales entre 1997 y 2000, cuando la banda "socializó el sufrimiento" atentando contra socialistas y populares, que tuvieron que vivir escoltados.

El político vizcaíno, él mismo objetivo de ETA, fue el encargado de consolar y acompañar a las familias de Manuel Indiano, Jesús Mari Pedrosa, Manuel Zamarreño, José Ignacio Iruretagoyena, José Luis Caso y Miguel Ángel Blanco, con quienes estuvo en Ermua durante los tres días de secuestro hasta su asesinato.

Ese papel jugado y la cercanía demostrada le han convertido en una figura querida y respetada entre los populares vascos, y del resto de España, más allá de sus cualidades políticas o de afinidades ideológicas.

Iturgaiz (Santurtzi, 1966) comenzó muy joven en política y, tras ser concejal en su pueblo, a los 25 años, en 1991, ya era el portavoz en el Ayuntamiento de Bilbao y a los 27 el secretario general del PP vasco tras ser nombrado por su mentor y entonces presidente regional, Jaime Mayor Oreja.

A los 30 años, en 1996, sucedió en la presidencia a Mayor Oreja, cuando éste se fue al Gobierno de Aznar como ministro de Interior, y se mantuvo en el cargo hasta 2005.

Durante su presidencia se produjo la mayor ofensiva de ETA contra el PP y el PSOE y la relación con el PNV vivió su máxima tensión, hasta la ruptura total, con la firma del acuerdo de Estella entre partidos y organizaciones nacionalistas y posteriormente con el Plan Ibarretxe.

En esa época de polarización el PP consiguió sus mejores resultados en Euskadi, tanto con el propio Iturgaiz de candidato en 1998 como en 2001 cuando la lista la encabezó de nuevo Mayor Oreja y en ambos casos quedó en segundo lugar tras el PNV.

En 2005 dejó la presidencia a María San Gil, con la que comparte línea política dentro del PP, y pasó de la política vasca al Parlamento europeo, donde estuvo entre 2004 y 2019, aunque en 2014 no consiguió el escaño y entró en la Cámara unos meses después, cuando Miguel Arias Cañete la abandonó para ser comisario europeo.

En 2019 dejó la política al verse relegado a puestos de no salida en las listas del PP al Parlamento europeo hasta que sorprendentemente el mismo Pablo Casado le llamó en febrero de 2020 para ser candidato a lehendakari por PP+Cs tras la renuncia de Alfonso Alonso.

Ahora ha vuelto al Parlamento vasco, donde ya tuvo escaño entre 1994 y 2004, aunque con un grupo más reducido, de solo seis miembros, de los que cuatro son del PP y dos de Ciudadanos.

Iturgaiz, casado y con dos hijos (el segundo se llama Mikel en recuerdo de Miguel Ángel Blanco), representa a la línea más dura del PP vasco ante el nacionalismo, junto Mayor Oreja y San Gil, y es un político cercano en el trato y más dado a los titulares efectistas que al contenido del discurso.

Profesor de acordeón, inició estudios de Filología Clásica que abandonó, Iturgaiz en su día destacó en el PP por hablar en euskera en sus intervenciones, algo inusual entonces entre los dirigentes y representantes populares. 

Opinión:

Ciertamente el señor Iturgaiz tuvo una labor muy intensa en el País Vasco que, por lo visto, ahora hay que reconocerle. Aunque confieso que no sé la razón para que ahora se hable de este señor, espero que sea por una razón positiva.

Y también me gustaría que se hablara de su actitud preparando la pancarta para la manifestación (junto a otros miembros del Partido Popular) la noche del asesinato de José Luis Ruiz Casado, concejal popular de Sant Adriá de Besós en septiembre de 2000… la noche posterior al asesinato en el Ajuntament. Pero de eso ya hablaré en su momento…

 

 

 

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