16 agosto 2014 (11.08.14)
Víctimas catalanas del terrorismo
Unidas contra ETA, divididas por la independencia
Un grupo de socios de la AVT en Cataluña quieren darse
de baja. Pasan por una incómoda situación desde que su presidenta, Angeles
Pedraza, suscribió en nombre de la entidad un manifiesto contra la consulta por
la independencia. Algunas víctimas son secesionistas, otras no, pero muchas se
quejan de que la asociación se posicione políticamente, cuando sus estatutos lo
prohiben.
Margarita Labad, tarraconense de
50 años, lleva dos semanas dándole vueltas, y no se la pasa el enfado: “¿Qué
tienen que ver las víctimas del terrorismo con la independencia de Cataluña?
Absolutamente nada”. Su madre, Luisa Ramírez, falleció en el atentado de
Hipercor, el 19 de junio de 1987. ETA mató a 21 personas en hirió a 45 en una matanza
con coche bomba en aquel supermercado de Barcelona. Antes del atentado del 11-M
en Madrid, Cataluña era la comunidad con más víctimas civiles por terrorismo de
España, 110; una cifra elevada, que sin embargo parece que no ha pesado en la decisión
de Angeles Pedraza: la presidenta de la Asociación Víctimas
del Terrorismo (AVT) ha suscrito el manifiesto de la plataforma Libres e
Iguales, que critica el secesionismo y el nacionalismo catalanes y rechaza
cualquier negociación entre el Ejecutivo central y el Gobierno catalán.
Ese manifiesto político, que
pretende movilizar a los españoles contra el independentismo de Cataluña, está
firmado por escritores, como Mario Vargas Llosa; cineastas, como José Luis
Garci; y juristas, como Nicolás Redondo Terreros. Está impulsado por la diputada
del PP Cayetana Alvarez de Toledo. Angeles Pedraza suscribe el manifiesto rodeada
de nombres de intelectuales; y no lo hace como víctima particular del
terrorismo (su hija murió el 11-M), sino como presidenta de la
AVT. Y sin haber pedido opinión a las casi trescientas víctimas catalanas que
son socias de la AVT. Entre
ellas hay defensores de la consulta por la independencia. Varios de los indignados
aseguran a esta revista que solicitarán su baja como socios de la AVT.
Neutralidad
Es el caso de Margarita Labad: “La
presidenta no ha pedido la opinión a las víctimas catalanas antes de
posicionarse políticamente contra el nacionalismo catalán. Además, los
estatutos de la AVT
lo prohíben expresamente. Tiene que dimitir cuanto antes”, opina Labad. El artículo
3 de los citados estatutos indica que la
AVT es “suprapartidista y expresamente manifiesta su voluntad
de imparcialidad ante cualquier organización de tipo político, sindical,
asociativa, corporativa, federativa, filosófica o religiosa”. Angeles Pedraza
no ha querido explicar en esta revista sus motivos para involucrar en la
plataforma Libres e Iguales a la
AVT , con sede en Madrid y unos 4.000 socios.
Otra víctima del terrorismo que reprocha
a Pedraza su proceder es la catalana Rosa María Cabré, quien también perdió a
su madre en el atentado de Hipercor. “Voy a darme de baja de la
AVT. Esto ha sido la gota que ha colmado el
vaso. Está representándome a mí y yo estoy a favor de la consulta. Su opinión
política divide a las víctimas. La
AVT es apolítica, en teoría, porque en la práctica ya vemos
de qué pie cojea”, afirma Cabré.
Luchar desde dentro
Para el escultor catalán Jesús
Fructuoso, que perdió a su hermano Juan el 2 de abril de 1987, cuando ETA
explosionó un coche bomba en la Avenida
Meridiana de Barcelona, el posicionamiento de Pedraza podría
tener consecuencias nefastas para las víctimas catalanas del terrorismo: “La
gente puede pensar que todas las víctimas somos así, antinacionalistas o
intolerantes; y eso es incierto. Yo estoy a favor de que se vote todo, de que
nos pregunten a los catalanes”.
El barcelonés Antonio Egea perdió
a su padre en el atentado de la sala Scala de Barcelona, el 15 de enero de
1978, en un incendio provocado por cuatro anarquistas y un policía infiltrado.
Antonio creció sin padre y con una sólida creencia en la democracia que su
progenitor no pudo conocer: “No consiento por mas tiempo el muso político que
nos han dado siempre a las víctimas. Es insoportable, porque no contribuye a la
visión distorsionada que tiene la sociedad de nosotros. Incluso hay gente que
nos desprecia, y eso es en parte por lo que hacen los dirigentes de la AVT ”, señala Egea.
Algunas de las víctimas catalanas
consultadas por Interviú opinan que
irse de la AVT no
es la solución. “Ellos no son los propietarios de la asociación. Irnos no
serviría de nada. Hay que luchar desde dentro para que se cumpla la neutralidad
política de la AVT ”,
dice Teo Lucas, funcionario de 54 años, cuya esposa, Gracia Gómez, resultó
gravemente herida en la explosión de la bomba que ETA colocó en un restaurante
del Puerto Olímpico de Barcelona el 15 de agosto de 1993. Gracia estaba
embarazada y perdió el bebe. “Estamos cansados de que nos politicen. Siempre lo
han hecho los dirigentes de la AVT ,
y la cuestión de la independencia de Cataluña no iba a ser la excepción”, opina
Teo.
Roberto Manrique, víctima del
atentado de Hipercor, recuerda los años en los que fue delegado en Cataluña de la AVT. “por entonces, finales
de los noventa, la prioridad era conocer las necesidades de las víctimas y
atenderlas. He visitado a centenares de afectados en sus domicilios y he visto
detalles, como fotografías, banderas, recuerdos, medallas, que mostraban la
ideología de esas personas. Las víctimas votan q quien les da la gana. Pero
otra cosa es el colectivo, que bastante ha sufrido como para que se les use con
fines bastardos”, sostiene Manrique.
Setenta bajas fallidas
José vargas, presidente de la Asociación Catalana
de Víctimas de Organizaciones Terroristas (Acvot), con 287 socios, recrimina a
Pedraza su declaración de intenciones contra el nacionalismo catalán: “Es
inadmisible que no haya tenido en cuenta que la inmensa mayoría de nuestros
socios lo son también de la AVT. Una
vez mas, las víctimas utilizadas políticamente”. Santos Santamaría, anterior
presidente de Acvot, recuerda que en 2008 unas setenta víctimas catalanas
quisieron darse de baja de la AVT ,
por la inoperancia de la entidad en Cataluña, pero “la junta directiva de la AVT no quiso tramitar aquellas
solicitudes. Ahora creo que la estrategia no es irse, sino presentar una
candidatura en Madrid a través de la Federación de Asociaciones Autonómicas y
desbancar a Pedraza”. Parece que una nueva guerra se aproxima.
Pies de fotografías
Margarita Labad, de 50 años, es
idéntica a su madre Luisa Ramírez, fallecida en el atentado de Hipercor, en
1987. Labad aun arrastra las secuelas de la pérdida. Propone que la AVT se deje de política y se
dedique solo a ayudar a las víctimas que atraviesan penurias, como ella misma.
“ETA mató a mi madre. No es incompatible con mi apoyo a la consulta”
Jesús Fructuoso, escultor
catalán, perdió a su hermano Juan en abril de 1987, en un atentado etarra en la Avenida Meridiana
de Barcelona. Jesús asegura que hace un año y medio solicitó ayuda a la AVT para reclamar una
indemnización y no obtuvo respuesta.
“La AVT
no me ha ayudado en nada”
El barcelonés Antonio Egea, que
perdió a su padre a los 14 años, en 1978, en un atentado en la sala Scala, cree
que incluir a las víctimas del terrorismo en la cuestión catalana es un “error
que separará definitivamente a los afectados catalanes del resto”.
“Hay gente que desprecia a las víctimas por su politización”
Rosa Cabré:
“Pediré la baja como socia de la AVT.
La opinión política de Pedraza separa a las víctimas”
Teo Lucas salió ileso del
atentado de ETA en la Villa Olímpica
de Barcelona, en 1993, pero su esposa resultó gravemente herida y perdió el
bebe que esperaba. Teo trabaja en un proyecto de asociación que aglutina música
y reflexión sobre la paz. “Hay que trabajar de otra manera por la paz y las víctimas”,
asegura
“Las asociaciones solo buscan subvenciones”
Opinión:
Aunque pueda parecer extraño,
cada día que pasa estoy más convencido de haber acertado en la decisión tomada
en septiembre de 2009 al cesar voluntariamente de todos mis contactos y mi
labor relacionada con las asociaciones de víctimas del terrorismo. Ya en 2002
descubrí lo que ahora, trece años y medio después, vuelve a confirmarse… hasta
qué punto ciertos “representantes” presentan objetivos y opciones personales a
través de unas siglas que deberían ser ejemplo de solidaridad y de pluralidad.
En cuanto al reportaje como tal,
poco puedo añadir al conocer desde hace muchos años a las cuatro víctimas que
presentan sus opiniones. Pero el reportaje confirma lo que llevo muchos años
advirtiendo: esa extraña situación en la que se encuentran un gran número de víctimas
del terrorismo en España, cuyos datos están en diferentes listados de
diferentes asociaciones… asociaciones que parecen tener diferentes opiniones
sobre diferentes temas y que, en consecuencia, presentan amplias dudas en
cuanto a su supuesta “representatividad”.
Diferentes, diferentes,
diferentes… la palabra que se repite constantemente pero que, por un extraño
interés ideológico, algunos se empeñan en desterrar del mundo de víctimas del
terrorismo, como si todas pensáramos lo mismo. Lo cual es, a todas luces,
imposible como muy bien refleja el reportaje.
Después de tantos años de labor
en este campo no me extraña lo más mínimo que algunos de quienes dicen ser “representante”
de “las” víctimas del terrorismo puedan tomar decisiones personales que,
desgraciadamente, vayan en contra de la imagen del colectivo. Hace ahora un
año, otra de las “representantes” dijo que deseaba la muerte de un terrorista,
por lo que algunas víctimas (asociadas o no) levantamos nuestra voz para
protestar por tal opinión por ser contrarios a la muerte de nadie. Tampoco me
extraña que otros se inventen lesiones porque así creen tener más credibilidad ante
quien quiere escuchar sus cuentos… O que, directamente, se apropien de las
lesiones y de las secuelas de otros. Y después pasa lo que pasa…
Para terminar y una vez leído el
reportaje, creo conveniente añadir unos pequeños datos. De cada una de las víctimas
que aparecemos se presenta un pequeño resumen de cada caso, excepto en los tres
últimos. Para que cada uno de los lectores tenga clara la situación, copio
literalmente la información que se puede encontrar en las sentencias correspondientes
o en información publicada en prensa de fuentes totalmente fiables.
Roberto Manrique Ripoll
(sentencias Audiencia Nacional 49/1989 y 32/2003)… “quien curó de sus lesiones
a los 174 días, quedándole graves secuelas consistentes en cicatrices hipertróficas
en ambos miembros superiores con necesidad de reconstrucción cutánea y zona
hipercrómica en muslo derecho”.
Intervenciones quirúrgicas en años posteriores.
Incapacidad permanente en grado de
total a partir de 1994
José Vargas Rincón (sentencias Audiencia Nacional 49/1989 y 32/2003)... “quien curó de sus lesiones a los
2 días, sin secuelas”
Santos Santamaría sufrió el
asesinato de su hijo (de mismo nombre y apellido).
El mosso d´Esquadra Santos Santamaría estaba
libre de servicio y se presentó de forma voluntaria a sus superiores para
trabajar en el acordonamiento del lugar, evacuación de posibles víctimas,
coordinación de desalojos y en todo aquello que se juzgara necesario para
preservar la seguridad de los ciudadanos de Rosas.
https://mapadelolvido.wordpress.com/category/juan-antonio-olarra-guridi-eta/
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