21 noviembre 2015
Se cumplen 15 años del asesinato por ETA del político socialista catalán, amigo de Euskadi y Defensor del diálogo
Dos tiros en la cabeza disparados a bocajarro por un miembro de ETA acabaron con la vida de Ernest Lluch, profesor, catedrático, intelectual comprometido, político, exministro socialista, ensayista, escritor, catalán amigo de los vascos y que ejercía de embajador de Euskadi allá donde fuese, ferviente defensor del diálogo y múltiples facetas más, aquella noche del 21 de noviembre de 2000, hace hoy quince años.
Lluch, un hombre confiado que pocos días antes había
expresado, medio en broma, su deseo de cumplir “104 años”, no llevaba escolta
ni disponía de protección alguna. En su libro Qué
piensa Ernest Lluch, basado en una larga entrevista del periodista Marçal
Sintes, el autor le preguntó cuatro años antes del asesinato si estaba
amenazado por ETA. “Me han estado siguiendo, me han hecho todo este tipo de
cosas. No quiero entrar en detalles porque es una cuestión que los que por
ahora hemos salido bien librados del asunto no debemos aprovechar para hacernos
los mártires. Y ahora, desde luego, tengo miedo a veces”, respondió.
Objetivo fácil, ETA no lo dudó y lo abatió en el
aparcamiento de su domicilio cuando regresaba de dar clases en la Universidad. Su
asesinato causó una gran conmoción, en Catalunya -donde un millón de personas
se manifestaron en repulsa por el atentado-, en Euskadi y en España. Nadie
entendió que la banda matara a quien no solo defendía el diálogo, sino que lo
practicaba con todo el mundo y que buscaba una solución para el problema vasco.
Durante el juicio por el crimen, los autores José Ignacio Krutxaga, Lierni
Armendariz y Fernando García Jodrá -que fueron condenados en 2002 a 33 años cada uno-
justificaron el crimen aludiendo a que Ernest Lluch, como ministro de Sanidad
en la etapa de Felipe González, fue “el ministro de los GAL” y “miembro del
Gobierno español que financió a los GAL e instigó y apoyó la tortura y la
dispersión”.
“Era un practicante del diálogo, creía en el
diálogo, en el entendimiento, desde el respeto a la diversidad, de abriese a la
opinión de otros aunque no la compartiera”, afirma Odón Elorza, exalcalde de Donostia
y gran amigo de Lluch, con quien compartía muchos momentos en sus constantes
estancias en la capital guipuzcoana. “Cuando venía a Euskadi le gustaba lo que
a cualquier ciudadano vasco, era uno más, le gustaba hacer contactos y juntarse
con gente de ideologías muy diferentes y buscar puntos en común para, sobre
todo, poner fin al terrorismo”, añade Elorza, quien le define como “muy
entrañable” y “un excelente amigo”, además de “tutor político” y
“socialdemócrata a carta cabal”.
De similar opinión es Jonan Fernández, por entonces
coordinador de Elkarri, organización de la que Lluch era socio, así como de
Gesto por la Paz.
“No era un político cómodo para nadie, porque tenía un discurso diferente. Eran
tiempos en los que la defensa del diálogo era un poco sospechosa y propugnar el
diálogo estaba fuera de la doctrina oficial y no todo el mundo lo veía con
buenos ojos”, afirma.
Apasionado de Euskadi y comprometido como estaba con
su realidad, tanto Elorza como Fernández coinciden, también, en que hoy Lluch disfrutaría
de una sociedad en paz tras el fin de la violencia de ETA. “Habría sido feliz,
habría disfrutado un montón. Hubiéramos entrado los dos a la parte vieja, como
lo pude hacer yo, con toda tranquilidad, sin miedo a nada, sin aspavientos, sin
malas caras. Hubiera sido inmensamente feliz porque es lo que él perseguía
desde hacía mucho tiempo”, insiste el excalcalde socialista.
Para Fernández, “Lluch hubiera disfrutado estos
cuatro años, hubiera sido un activo impulsor de la convivencia y de la consolidación
de la paz”.
ETA truncó esa posibilidad, pero la memoria de Lluch
y su apuesta por el diálogo siguen vigente.
21 novembre 2015 catradio
Eulalia Lluch: “no me he plantejat
mai la venjança però tampoc el perdó”
Hem conversat
amb la filla d’Ernest Lluch, el dia que es compleixen 15 anys de la mort del
seu pare a mans d’ETA
Un cop escoltada l’entrevista amb l’Eulalia Lluch
només puc dir que estic absolutament d’acord amb ella. I mes quan me han fet
esment en una entrevista de les declaracions que a continuació presento feta al
diari “El País” el 21 d’octubre de 2011, un día després de l’anunci de “final
de la actividad armada de ETA”.
Es adient recuperar aquesta informació perque el pas
del temps ha mostrat fins a quin punt hi ha gent que, pensant que parla en nom
de “les” víctimes del terrorisme, no ha aconseguit res mes que dividir al
col·lectiu, especialment al opinar de coses que ni coneixen, ni han patit ni
han sofert, inventant-se experiéncies.
Es evident que segons quines declataracions mostren
un enorme desconeixement i, el que es pitjor, un enorme desinterés en el
benestar general de la població al impossar criteris polítics propis i mai
consensuats amb la gent a quin diuen representar.
21
octubre 2011
La familia de
Ernest Lluch reclama a las víctimas de ETA que no intervengan
Alegría y prudencia en Cataluña por
el comunicado de la banda
Con alegría pero con prudencia. Así han reaccionado
los partidos catalanes al anuncio de “cese definitivo de la actividad armada” que ayer hizo ETA. El mismo
sentimiento comparte la familia de Ernest Lluch, exministro socialista
asesinado en 2000 por la banda terrorista que sobresalió como un gran defensor
del diálogo con ETA. Eulàlia Lluch, hija del político, recibió la noticia con
“mucha calma y tranquilidad” y ha pedido esta mañana al resto de víctimas de la
banda que no intervengan en el proceso que se abre ahora: “Las víctimas no
somos objetivas. Se nos debe de tener en cuenta en el momento en que se tiene
que reconocer que hay víctimas, pero nosotros no podemos intervenir en este
proceso”, ha reclamado Lluch en declaraciones a Catalunya Ràdio.
Se ha sumado a esta petición el sobrino del
exministro socialista y presidente de la Fundación Ernest
Lluch, Enric Lluch. En declaraciones a Com Ràdio, Lluch ha considerado que las
víctimas no pueden participar en el proceso porque tienen los sentimientos “muy
a flor de piel” y ha dudado de su capacidad para “tener la cabeza fría para
poder articular discursos más allá de lo que uno siente interiormente”. El
sobrino del político socialista ha considerado que todavía falta tiempo para
ver el final de ETA: “Esto no es una cuestión ni de meses ni de años, son más
de 800 víctimas en más de 40 años, es un proceso largo, con esto llega el
momento del renacimiento del País Vasco”.
El presidente de la Generalitat , Artur
Mas, ha celebrado que el comunicado de la banda “dibuja un panorama
esperanzador en el horizonte”. “Parece que va en serio”, ha dijo sobre el
proceso que se abre tras la decisión de ETA. El expresidente de la Generalitat Pasqual
Maragall cree que el comunicado “llega 829 muertos tarde”, y ha pedido unidad y
generosidad a los demócratas para alcanzar la paz definitiva. Carme Chacón,
candidata del PSC y ministra de Defensa, ha recordado las víctimas y se ha
felicitado por la actuación del Gobierno. Su rival en el PP catalán, Jorge
Fernández, se ha aliado con la tesis de Mariano Rajoy y ha pedido “no
menospreciar” el comunicado de la banda. Los partidos independentistas,
Esquerra Republicana y Solidaritat, han visto una oportunidad en el comunicado
para avanzar hacia la independencia, mientras que Iniciativa per Catalunya ha
reclamado “pruedencia, responsabilidad, generosidad, e inteligencia”, para
alcanzar la paz definitiva.
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