10 junio 2022
«Las víctimas son incómodas para la sociedad porque recuerdan los límites de la crueldad humana»
Los catedráticos José Luis de la Cuesta y Enrique Echeburúa reflexionan en el Simposium de Victimología en Donostia sobre la justicia restaurativa y la protección y la reparación a la víctima desde el punto de vista jurídico y psicológico
La quinta y última jornada del 17 Simposium Internacional de la Sociedad Mundial de Victimología celebrado en San Sebastián reunió ayer a José Luis de la Cuesta y Enrique Echeburúa en un diálogo en torno «al entendimiento entre jurista y psicólogos obre la víctima». La disertación sobre los derechos de las víctimas del terrorismo y de otros tipos de delitos, sobre su protección, su reparación, la victimización secundaria o la justicia restaurativa, estuvo conducida por Iñaki Subijana, presidente del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco. Echeburúa, catedrático en Psicología Clínica, apuntó que «las víctimas en general son incómodas para la sociedad y lo son para la mayor parte porque les hace recordar la fragilidad del ser humano y los límites de la crueldad humana que ejercen ciertas personas contra otras».
De la Cuesta, catedrático en Derecho Penal y director del Instituto Vasco de Criminología, remarcó que la construcción del sistema de justicia penal moderno «se ha hecho a costa de neutralizar e invisibilizar a la víctima». Coincidieron en que estas personas «necesitan ser reconocidas, acompañadas y por supuesto reparadas». Echeburúa citó que «se trata de ayudar a estas víctimas a vivir y no a sobrevivir», por lo que es «importante» ofrecer servicios de atención a su medida. En relación a la reparación a las víctimas, remarcaron que la sociedad «debe ser solidaria». El profesor Echeburúa explicó que reparar a las víctimas significa «mitigar» el daño causado y que puedan asumir un proyecto de vida presente y futuro. «Lo que piden las víctimas no es venganza sino reconocimiento de que lo que les pasó sucedió, fue injusto, hubo una mala respuesta y no volverá a suceder. La regla de oro es no añadir dolor ni sombras a la incertidumbre», remarcó. Sobre la justicia restaurativa, De la Cuesta dijo que «ha venido para quedarse».
Gema Varona, doctora en Derecho Penal y artífice de que haya sido posible la celebración del simposium, se mostró «satisfecha» de haber podido reunir a más de 450 participantes de 50 países que han presentado en Donostia los resultados de investigaciones en temas muy diversos. Sobre la justicia restaurativa, que ha sido un tema central, destacó que Euskadi es «pionera».
Opinión:
Tengo en altísima estima a Enrique Echeburúa, a quien conozco desde hace muchísimos años y me consta su extenso conocimiento en la materia. Pero como víctima de la banda terrorista ETA y llevando mas de treinta años de contacto diario y constante con otras muchas víctimas del terrorismo, me gustaría añadir algo mas a lo que refleja la noticia.
Para empezar, decir bien alto y bien claro que el colectivo de víctimas anónimas del terrorismo somos todavía más molestas para las administraciones que deberían velar por nosotros y asistirnos, tal y como diferentes legislaciones recogen desde hace años. En ese nutrido y heterogéneo grupo no incluyo a aquellas víctimas, pseudovíctimas o minivictimas que se han creado un futuro político y partidista haciendo del uso del dolor ajeno. Alguien tenía que decirlo.
Por otro lado, un estudio detallado de los 1.018 folios de la sentencia o los más de 13.000 del sumario por los atentados de agosto de 2017 en Catalunya muestra que, en cuanto a atención psicológica, queda, mucho, muchísimo por aceptar, por entender y por poner en práctica.
Y ello se constata al ver que en esta temática la administración competente… en este caso, el Ministerio de Interior, sigue repitiendo los mismos errores que ya se cometían hace 35 años (por ejemplo, en el atentado de Hipercor).
Por mucho que el Doctor Echeburúa y sus excelentes compañeros lo expliquen, quien debe escuchar y encontrar soluciones ni lo hace ni lo intenta ni le importa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario