27 junio 2013
Un confidente infiltrado en ETA declarará en el juicio del «Faisán»
Pamiés y José María Ballesteros, ex inspector de la Brigada de Información de Álava, se enfrentan a una petición máxima de condena de diez y nueve años de cárcel, respectivamente, defendida por Dignidad y Justicia (la AVT la rebaja a ocho años y medio y ocho) por los delitos de colaboración con organización terrorista y revelación de secretos. Por su parte, el fiscal Carlos Bautista pide dos años de cárcel para Pamiés y uno y medio para Ballesteros por revelación de secretos y, acatando las órdenes del fiscal general del Estado,Eduardo Torres-Dulce, solicita también alternativamente una condena a cinco años de prisión por colaboración con ETA (que la Fiscalía de la Audiencia Nacional había descartado).
La abogada de Pamiés, María Ponte, señala en su escrito que su cliente«no tiene relación alguna con la filtración». Además, denuncia que más de 10.000 llamadas telefónicas no han sido investigadas, al descartarse las recogidas por los repetidores franceses y analizarse únicamente las efectuadas entre las 11:10 y las 11:40 horas y las de una duración inferior a cuatro minutos.
Pamiés sostiene que los datos de la baliza que tenía instalada en su vehículo Joseba Elosua, el dueño del bar Faisán (unas grabaciones que permitieron desvelar la filtración), «han sido modificados un día después de la filtración» y faltan dos pistas de audio grabadas la mañana del soplo antes de las 12:45.Además, recuerda que una de las cintas de vídeo grabadas en el local«tiene dos cortes intencionados y voluntarios» durante un «tiempo suficiente para ocultar a la persona que pudiera haber entregado el teléfono» a Elosua para darle el soplo.
Sinceramente, después del espectáculo que algunas asociaciones de víctimas han hecho estos últimos días en relación al acto en el Congreso de los Diputados pocas cosas me sorprenden. Ver a gente que, sin consultar ni a sus propios compañeros, dice que va pero no va para después organizar el boicot pero luego no para después decir que si y finalmente plegarse al poder partidista y perder la dignidad me habían inducido a pensar que ya había visto todo lo que quedaba por ver de la ignorancia.
Pero leer que, todavía, hay quien “en representación de las víctimas del terrorismo” sigue persiguiendo a dos de los mejores profesionales que las FCSE han tenido en la lucha antiterrorista ya me parece surrealista. En serio. Y mas cuando cientos de compañeros de Palies y Ballesteros han caído en esa misma lucha enfrentándose a terroristas de ETA, GRAPO y otras bandas ya olvidadas en el tiempo.
Y para colmo, el abogado al que se enfrentan algunas de estas asociaciones ha sido uno de los baluartes en la defensa de las víctimas.
En serio, cada día estoy mas feliz de haber dicho, pública y privadamente, que esos representantes a mi no me representan. En mi nombre, esto, no..
No hay comentarios:
Publicar un comentario