10 abril 2021 La Razón (opinión)

10 abril 2021 

 

Castilla y León refuerza el compromiso “firme” con las víctimas del terrorismo

El consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, traslada al nuevo presidente de la Asociación, Sebastián Nogales, las acciones que van a llevar a cabo durante este año

Castilla y León ha sido uno de los territorios más castigados por el terrorismo, principalmente de ETA. Por este motivo, el Gobierno regional siempre ha estado al lado de las víctimas y de sus familias, y lo van a seguir estando. Así se lo ha asegurado el consejero de la Presidencia, Ángel Ibáñez, al nuevo presidente de la Asociación, Sebastián Nogales, en un encuentro, celebrado en Valladolid para tomar contacto tras su reciente nombramiento.

Al respecto, el consejero ha reiterado el “compromiso tanto en el reconocimiento y protección de las víctimas de la violencia terrorista, para velar por su amparo, bienestar, reparación y asistencia en aquellas necesidades que se hayan agravado por su condición de víctimas, así como para recordar y homenajear a todos aquellos que sufrieron la acción terrorista”.

Más acción pública

Ibáñez ha explicado al presidente de la Asociación que el Gobierno regional tiene como objetivo consolidar la acción pública en favor de las víctimas en la Comunidad, para lo que será necesario potenciar la coordinación entre los distintos órganos de la Administración y de otras administraciones públicas, como ya adelantó en la comparecencia de inicio de legislatura.

 

Opinión:

Me alegra ver que mi buen amigo Sebastián ha sido elegido para presidir la asociación de Castilla-León.

Sin duda, un muy buen fichaje de alguien con criterio y que, estoy convencido de que al contrario que otros presidentes de algunas asociaciones autonómicas, sabrá anteponer el beneficio del colectivo a los criterios personales… además, el SI es víctima confirmada de un atentado terrorista. Y me consta su interes en el resto de víctimas porque durante años ha estado en la sombra y hemos colaborado en diferentes ocasiones sin esperar ni reconocimientos ni las consabidas fotografías por las que otros son capaces de mentir durante décadas.