martes, 25 de enero de 2022

22 enero 2022 (2) Deia (opinión)

22 enero 2022 

 


“No encontraron respaldo ni en las instituciones ni en la sociedad”

Los autores del informe constatan que durante tres décadas estas víctimas sufrieron una “soledad total”

Dos de los tres autores del informe, José Ramón Intxaurbe y Gorka Urrutia, intervinieron en el acto de ayer y pusieron el foco en el olvido que sufrieron durante años los agentes de los cuerpos del Estado víctimas de ETA. “Estos colectivos no encontraron respaldo ni en las instituciones ni en la sociedad. En las décadas de los 70, 80 y 90 vivieron en una soledad total y fue injusto”, resumió Intxaurbe.

Asimismo, el profesor de Derecho de Deusto alertó de la “revictimización” a la que se enfrentan en este colectivo a la hora de emprender los complejos procesos burocráticos para ser acreditados como damnificados por el terrorismo y recibir ayudas por ello.

Por otro lado, los autores del informe reclamaron en el acto de ayer el fin de los homenajes a presos de ETA y, más allá, consideran vital el que se lleven los “discursos de deslegitimación” de la violencia a la sociedad y a los jóvenes en las aulas.

A este respecto, el informe recoge la necesidad de “continuar y potenciar los programas de testimonios de víctimas del terrorismo en el ámbito educativo”, tales como Adi-Adian que realiza el Gobierno vasco. Por su parte, Gorka Urrutia explicó que una de las claves del estudio –que se encargó a principios de 2020– era “poner el énfasis en los derechos afectados” de estas víctimas.

“No solo quedarnos en el ámbito cuantitativo sino entrar también en la parte cuantitativa con entrevistas a personas de este colectivo”, añadió, destacando también que el estudio contiene elementos importantes “para reflexionar en clave colectiva”.

Urrutia se pronunció asimismo sobre el exilio que vivieron la mayoría de las víctimas después de los atentados, ya que se vieron obligadas a abandonar la CAV ante el aislamiento que padecían. “Sufrían el atentado y se tenían que ir, volvían donde sus familias fuera de Euskadi”, expresó sobre lo que fue un doble sufrimiento para los damnificados: “Algunos lo vivieron con especial tristeza porque tenían raíces aquí y les hubiera gustado quedarse”. Pero no pudieron hacerlo por la falta de apoyo social.

Opinión:

Bueeeeeno, parece que los comentarios y opiniones que unas pocas víctimas llevamos años denunciando (sin importar quien gobierne o quien esté en la oposición) están llegando a ciertos oídos.

Sorprende leer que ahora hay quien descubre que existen “complejos procesos burocráticos para ser acreditados como damnificados por el terrorismo y recibir ayudas por ello”. Y digo que sorprende por dos razones.

La primera, porque hay varios personajes y “personajas” que dicen ser víctimas de atentados simplemente basados en la denuncia que presentaron días o meses después de sufrir el supuesto atentado, mientras habían ido recopilando información en los medios de comunicación posteriores al mismo para hacer mas verosímil su relato. Algunos incluso presiden o han presidido entidades relacionadas con la victimología terrorista.

La segunda, porque esos mismos “complejos procesos burocráticos” siguen ocurriendo en la actualidad… por ejemplo con decenas de víctimas de los atentados de agosto de 2017 en Catalunya. Y, desgraciadamente, eso ya se le comentó en su momento al Ministro de Interior quien, a saber por qué, aún no ha ordenado ningún tipo de criba o estudio cotejado al respecto.

Por cierto, si los miembros de las FCSE no encontraron el respaldo ¿se imaginan lo que ocurría con las víctimas civiles, las que no pertenecemos a ningún tipo de cuerpo uniformado?

 

 

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