15 octubre 2020
Irene Villa: "La actitud positiva también se entrena"
Escalar un ochomil es el complicado sueño de todo alpinista, pero en el día a día no solo estos expertos afrontan retos tan duros. Cualquier persona se enfrenta a un gran número de dificultades que, al igual que sucede con estos picos, en un primer momento parecen insuperables. Irene Villa (Madrid, 1978) es toda una experta en encarar, siempre con una sonrisa y mucho humor, las circunstancias adversas de la vida. De hecho, el confinamiento de este año ha sido un ejemplo más de su fortaleza y de su capacidad de resilencia. Durante esos primeros meses en los que la mayoría de la población se aficionó por la repostería y la panadería, ella optó por escribir 'Los ochomiles de la vida' (Ed. Espasa), un libro que sale a la venta el 15 de octubre.
A lo largo de las páginas, la periodista combina las historias de personajes que le han marcado con la suya propia y comparte consejos prácticos basados en su experiencia personal para que el lector convierta los obstáculos en oportunidades, tal y como ella ha hecho en tantas ocasiones. Este manual del optimismo es la segunda parte de su primera publicación, 'Saber que se puede', que vio la luz hace quince años. "Tenía que esperar a aprender todas las nuevas lecciones que la vida me tenía preparadas", dice Villa. Hablamos con Irene acerca de este nuevo proyecto, del confinamiento y de cómo superar cualquier obstáculo, especialmente en estos tiempos tan difíciles, porque, como ella misma dice, rendirse no es una opción.
¿Cuáles son tus particulares 'ochomiles'?
Unos cuantos. El último ha sido el mismo que el de muchos españoles: asumir la pérdida de un ser querido sin poder despedirle y teniendo que hacer un funeral cuatro meses después de su partida por el virus COVID-19. El año anterior también fue duro por un tema médico, ya que tuve una cuarentena con dolor y sin poder andar. Pero, en la tercera operación me resolvieron el problema, la rotura del tornillo que llevo oseointegrado en el fémur izquierdo, y gracias al cual muevo la prótesis casi como si fuera mi pierna. En 2018 mi separación, en 2017 la pérdida de mi cuarto hijo. En fin,¡ tengo muchas ganas de que llegue el 2021!
¿Cómo afrontas una mala racha?
Sabiendo que lo mejor está por llegar. Siempre miro hacia delante y no me regocijo en lo malo.
¿Ha habido algún momento en tu vida en que pensaras 'tiro la toalla?
Lo más duro ha sido siempre lo que no estaba en mi mano, como los problemas de salud, pero no cuento nunca con rendirme porque la única derrota es el desaliento.
La resiliencia, la actitud positiva.. ¿Hasta qué punto dependen de la genética?
Puede llegar a influir hasta un cuarenta por ciento en nuestra conducta, pero la capacidad de resurgir y encontrar oportunidades tras cualquier situación está en nuestro cerebro, que, como el cuerpo, también se entrena.
¿Cómo podemos hacerlo?
Aprendiendo a ver solo lo positivo, lo que sí podemos hacer y la cantidad de oportunidades que se abren ante nosotros.
Existe también el peligro de caer en el exceso de optimismo. ¿Cómo lo evitamos?
No veo negativo ser demasiado optimista, ya que el optimismo es una de las fuentes principales de la 'automotivación'. Se trata de persistir a pesar de los obstáculos y contratiempos, de no moverse por el miedo sino por la esperanza de éxito. El optimismo nos hace ver oportunidades donde otros ven amenazas, así a los contratiempos les llamamos trampolines para alcanzar algo aún mejor.
¿Cómo les transmites estas enseñanzas a tus hijos?
De pequeños, cuando estaban aprendiendo a andar, les empujaba 'sin querer', porque en la vida se caerán muchas veces y han de aprender a levantarse. No obstante, es un trabajo diario. Hablamos mucho de las emociones, de valores, de lo que ayuda ser útil, ser buen compañero, aprender, estar activo...
A la hora de enfrentarnos a una situación adversa, ¿cuáles son las principales barreras?
Las creencias limitantes, los miedos, prejuicios, las inseguridades, el ego... En definitiva: uno mismo.
¿Qué papel desempeña el sentido del humor?
¡Todo con humor es mucho más fácil! Hay que reírse de uno mismo, atrevernos a mostrar nuestras vulnerabilidad y debilidades, y potenciar todas las fortalezas humanas que tenemos por desarrollar, sin estrés ni presión.
¿Quién es tu mentor en esta filosofía de vida?
Mi madre. Una sabia de la vida.
La pandemia y el confinamiento han sido (y siguen siendo) una experiencia muy dura para toda la sociedad. ¿Cómo has vivido esta época?
Significó un cambio a todos los niveles: de vida, de estructura y de paradigma. Como propuso mi madre cuando era solo una niña, había dos opciones: lamentarte y maldecir a los responsables (en aquel caso fue un atentado), o decidir, con valentía y optimismo, que nuestra vida empezaba de nuevo. Así que lo aproveché para fortalecer el vínculo con mis hijos, ya que entre mis viajes y la custodia compartida les echaba muchísimo de menos, y para escribir este libro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario