26 octubre 2017
Sale de prisión uno
de los condenados por el 11-M
El marroquí Saed el
Harrak, condenado a 12 años de cárcel, abandona este miércoles la cárcel de
León y será expulsado a su país de origen
Saed el Harrak, uno de los nueve
condenados por los atentados del 11 de marzo de 2004 en Madrid que aún
permanecía encarcelado, saldrá este miércoles de la prisión de León, donde ha
permanecido recluido buena parte de los 12 años de prisión que le impuso el
Tribunal Supremo. La puesta en libertad tras cumplir íntegra la pena supondrá
también su expulsión a su país de origen, Marruecos. Agentes de la Policía Nacional
esperarán a El Harrak a la puerta del centro penitenciario para proceder
inmediatamente a su traslado al país magrebí como ya se ha hecho anteriormente
con otros condenados por el 11-M tras sus excarcelaciones.
Saed el Harrak fue detenido en Parla
(Madrid) en mayo de 2004 tras descubrir la Policía su vinculación con varios de los
integrantes de la célula yihadista que se suicidaron en un piso de Leganés.
Tras dos años en esa situación, un error judicial permitió que recobrara la
libertad. Volvió a ingresar en prisión en octubre de 2007. Desde entonces, y
hasta este miércoles, ha permanecido durante toda su estancia en prisión
clasificado en primer grado penitenciario, que incluye un duro régimen de vida
que le obliga a permanecer en aislamiento en su celda con tan solo 4 ó 5 horas
diarias de salida al patio.
La investigación de los atentados reveló que Saed el Harrak
llamó por teléfono a varios de los integrantes de la célula antes del 11-M.
Además su número de teléfono apareció entre los escombros del edificio. Tras su
arresto, sólo admitió conocer a uno de los terrorista, Kounja Akcha, porque era
el jefe de la cuadrilla de albañiles donde trabaja. Sin embargo, sus
explicaciones no convencieron al tribunal, que consideró como prueba inculpatoria
de su vinculación con la célula una carta de despedida de Kounja que la Policía encontró en una
bolsa de trabajo que le pertenecía. En esa carta, el yihadista suicida
aseguraba que partía al martirio. El acusado defendió durante el juicio que no
conocía la existencia de la misiva. Finalmente, fue condenado a 12 años de
cárcel por pertenencia a banda armada.
Ocho aún en prisión
Con su puesta en libertad, ya sólo quedarán en prisión ocho
de los condenados por el 11-M. La siguiente excarcelación se producirá el 3 de
junio de 2019. Ese día está prevista la salida de Hassan El Haski, quien en la
actualidad está recluido en primer grado en la prisión alicantina de Villena.
Tres años después, en 2022, será el turno de otros tres. El primero será Rachid
Aglif, alias ‘El Conejo’, condenado a 18 años de cárcel y que saldrá en abril
de ese año. Está recluido en primer grado en la prisión de Castellón.
Le seguirá Antonio Toro, cuñado de Trashorras, quien fue absuelto en la sentencia de la Audiencia Nacional ,
pero al que el Tribunal Supremo le impuso posteriormente una pena de cuatro
años. Aunque ya ha cumplido la misma, permanecerá en prisión hasta el año 2022
después de que en 2009 la
Audiencia Nacional acordara acumular las condenas que ya le
habían impuesto otros tribunales, principalmente por tráfico de drogas.
Finalmente, Mohamed Bouharrat, actualmente en segundo grado en la prisión de
Valladolid, cumplirá su pena el 30 de octubre de ese mismo año.
En 2023, en concreto el 12 de septiembre, será el turno de
Abdemaljid Bouchar, a quien la
Policía bautizó como ‘el Gamo’ tras escapar a la carrera del
cerco policial al piso de Leganés. Detenido en Serbia en 2005 y extraditado a
España, fue condenado a 18 años de prisión. Está recluido en primer grado en la
cárcel coruñesa de Teixeiro.
Los últimos tres presos del 11-M tienen por delante aún una
larga estancia en prisión: hasta el año 2044. Se trata de los que recibieron
las mayores penas, todas ellas de miles de años, aunque la ley solo permite el
cumplimiento de 40 efectivos de prisión. Uno es José Emilio Suárez Trashorras,
el exminero asturiano que facilitó el explosivo a la 'célula'. Fue condenado a
34.715 años. Los otros son Jamal Zougam y Otman El Gnaoui, considerados autores
materiales y a los que se les impuso 42.922 años. El primero está recluido en
la prisión pontevedresa de A Lama en segundo grado. Cumplirá la totalidad de la
condena en marzo de ese año. En esa misma prisión también está El Gnaoui,
aunque en el régimen penitenciario más duro. Jamal Zougam lo está en la
coruñesa de Teixeiro, también en primer grado.
Opinión:
Es cuestión de conocer lo que marca el Código Penal y a qué
delitos estaba condenado este impresentable.
Es duro pero la legislación es la que es… aunque lo
importante es que las víctimas que residen en Parla y alrededores no tendrán
que cruzarse por la calle con este condenado nunca mas.
Las opiniones de muchas víctimas del 11-M con las que he
hablado prefiero guardármelas para mi.
A buen entendedor…
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