05 noviembre 2018
Ezenarro pide memoria crítica de la violencia para los
jóvenes
La directora de Gogora dice que los testimonios de las
víctimas ayudan a “no olvidar” lo ocurrido
La directora del Instituto vasco de la Memoria , Convivencia y los
Derechos Humanos (Gogora), Aintzane Ezenarro, incidió ayer en la necesidad de
transmitir “una reflexión crítica” de la violencia a los más jóvenes por ser
“un derecho” de estos y “un deber” de las instituciones.
El rector de la Universidad de Deusto, José María Guibert, y la
directora de Gogora inauguraron a mediodía el espacio de la Plaza de la Memoria en la Universidad de Deusto
en Bilbao, cita que contó con representantes de la propia universidad,
Confebask, así como del Ayuntamiento de Bilbao.
Ezenarro defendió la necesidad de transmitir la memoria y
consideró que las instituciones deben “generar espacios donde encontrar
distintas memorias, donde puedan establecer diálogos entre ellas y se pueda
conocer, sobre todo, la memoria de las víctimas que más han sufrido estos
años”. A su juicio, los más jóvenes reclaman su “derecho” a conocer lo que ha
ocurrido en las últimas décadas y, por eso, “cobra especial interés que este
tipo de espacios de diálogo y reflexión se sitúen en el ámbito universitario,
el espacio principal de transmisión de conocimiento a las futuras
generaciones”.
La directora de Gogora subrayó la voluntad de las víctimas
de participar en el proyecto pese a no ser fácil para ellas. “Saben que con su
participación contribuyen a que no se olvide lo ocurrido y poner las bases para
un futuro en paz”, ha expresado, al tiempo que apostó por que “toda la
sociedad” se lo agradezca.
Opinión:
Una nueva iniciativa destinada a preservar la memoria de “las” víctimas
del terrorismo aunque vuelven a repetirse algunos errores… seamos sinceros ¿se
va a recordar también a las víctimas del terrorismo causado en otros puntos del
país? ¿Sólo a las de atentados de diferentes “signos” en el País Vasco y quizás
Navarra? ¿Se atreverán a llevar la magnífica exposición presentada al cumplirse
los 30 años del atentado en Hipercor? ¿Quizás no interese escuchar los relatos
de víctimas anónimas que han sufrido dignamente todo el dolor sin levantar la
voz ni manifestarse políticamente? ¿Serviría eso para desenmascarar a algunos
impostores?
La invitación queda hecha, ahora falta que los que tanto hablan de
memoria decidan aceptarla…
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