03 junio 2021 Crónica Global (opinión)

03 junio 2021 

 

7A: Interior indemniza ahora como víctima al mosso que abatió a los yihadistas de Cambrils

El ministerio deniega el reconocimiento a otros dos agentes que neutralizaron al conductor de la furgoneta de las Ramblas en un camino de Subirats

El Ministerio del Interior ya ha indemnizado al agente de los Mossos d’Esquadra que abatió a los terroristas de Cambrils durante los atentados del 17A. El policía está de baja desde febrero de 2018, y un forense le ha reconocido la incapacidad total permanente, pero no ha sido hasta tres años después, el mismo mes de este año, cuando le ha llegado la resolución firmada por Grande-Marlaska para abonarle la cantidad correspondiente por la incapacidad, pero solo parcial, que cobró la semana pasada. No así a otros dos agentes que abatieron a Youness Abouyaaqoub, el conductor de la furgoneta de las Ramblas, en un camino de Subirats, a quienes no han reconocido la condición de víctimas.

Es una ley [la 29/2011], aprobada tras los ataques del 11M, la que fija las indemnizaciones, pero los criterios para reconocerlas o no parten de Interior. Un forense, tal y como consta en el fallo de la Audiencia Nacional, avaló que el agente 11.888, que no ha vuelto a ejercer como tal desde hace más de tres años,  sufre “trastorno de estrés postraumático grave y una incapacidad permanente total para el ejercicio de sus ocupaciones habituales.”. También que hasta aquel momento, cuando prestó declaración, no había percibido “indemnización alguna”.

Héroe y víctima del 17ª

Durante el juicio, el policía relató cómo había cambiado su vida desde el ataque en Cambrils, donde abatió a cuatro terroristas. “Tengo miedo, estoy hiperalerta cada vez que salgo a la calle, inseguridad y mucho miedo a que se me reconozca”. El mosso formaba parte de una unidad de seguridad ciudadana, y la madrugada del 18 de agosto de 2017 vio un vehículo "a gran velocidad" encarar la rotonda del paseo marítimo del municipio y acelerar hacia la patrulla. En el coche viajaban cinco miembros de la célula yihadista que no murieron en la explosión de Alcanar. Atropellaron a una mujer —que murió—, y luego embistieron a la compañera del agente. Tras volcar, los individuos salieron del vehículo y se aproximaron hacia él.

"Llevaban chalecos adosados al cuerpo con cinta americana que parecían chalecos bomba”, rememoró ante la Sala. Uno de los terroristas corrió hacia el mosso "a gran velocidad", con un hacha en la mano, y gritó: "¡Allahu-Akbar [Dios es el más grande]!. No me dio tiempo a nada más, disparé hasta abatirlo", relató. A este con un subfusil y, tras quedarse sin munición, neutralizó a los tres restantes con su arma reglamentaria.

Mossos ‘olvidados’ por Interior

Ahora ha sido indemnizado, pero Interior ha denegado la condición de víctima a otros dos agentes de seguridad ciudadana —el 11992 y el 11359—que abatieron en un camino de Subirats a Younes Abouyaaqoub, el conductor de la furgoneta de las Ramblas. Fue después de que este avanzase hacia ellos abriéndose la camisa y mostrando así “unos tubos metálicos con cables adheridos al pecho a modo de chaleco bomba, con la mano izquierda a modo de escudo y portando un objeto en la mano, también gritando ¡Allahu Akbar!”.

A consecuencia de la actuación, uno de los mossos —el 11992—, de 42 años, “presentó un cuadro de estrés agudo y luego un trastorno de estrés postraumático con expresión retardada, que requirió tratamiento médico y psicológico permaneciendo 21 y 54 días respectivamente de baja laboral”. No fue reconocido como víctima, recuerda el fallo. Su compañero —el 11359— “también sufrió un trastorno de estrés postraumático, que requirió tratamiento médico. Curó a los 180 días, 39 impeditivos, sin secuelas”. Tampoco ha sido reconocido como víctima de terrorismo.

Sin “nexo causal” entre lesiones y atentado

El abogado de los agentes, José Antonio Bitos, ha presentado sendos recursos ante la Sala de lo Contecioso-Administrativo, para lograr el reconocimiento como víctimas de los agentes y la pertinente indemnización. El ministerio las rechazó al considerar que no existía “nexo causal” entre las afectaciones acreditadas y el atentado, en el caso de uno, y por solicitarlo “fuera de plazo” en el del segundo, al rechazar la baja por una recaída en su afectación.

Esta denegación no es algo excepcional, muchas otras víctimas, ahora reconocidas por la sentencia —pese a que esta solo condena a los tres acusados por Alcanar—, han visto denegadas sus solicitudes por este motivo, sobre todo en el caso de daños psicológicos, como estrés postraumático. El letrado también ha recurrido la indemnización por incapacidad parcial del mosso que neutralizó a los yihadistas de Cambrils, para solicitar la total, tal y como le ha reconocido el forense y así lo recoge el fallo de la Audiencia Nacional.

Opinión:

Desde la Unitat de Atenció i Valoració a Afectats pel Terrorisme (UAVAT) hemos terminado el estudio pormenorizado y detallado de la sentencia sobre los atentados de agosto de 2017 en Catalunya, especialmente lo relacionado con las 315 víctimas que aparecen.

En este estudio, que enviaremos inmediatamente a los compañeros del equipo jurídico de la Asociación 11-M para un más que probable recurso, aparece una extensa relación de víctimas a las que se aplican unos criterios que nos cuesta mucho entender.

Las valoraciones que se realizan tanto a los Mossos d’Esquadra como al resto de víctimas hay que revisarlas detenidamente porque, en algunos casos, son la confirmación a lo que llevamos denunciando desde la UAVAT.

Incluso a lo que algunas víctimas, muy pocas pero acompañadas de excelentes profesionales de la abogacía y la psicología forense, llevamos muchos años denunciando, reclamando y demostrando si que, hasta este momento, ninguna sentencia lo recogiera como veraz.

Esta sentencia cambiará muchas cosas.