miércoles, 3 de marzo de 2021

02 marzo 2021 Deia (opinión)

02 marzo 2021

 


El Parlamento navarro se une para exigir que se investigue la muerte de Zabalza

Todas las fuerzas, de Navara Suma a EH Bildu, acuerdan una declaración institucional

El Parlamento de Nafarroa unió el lunes a todas las fuerzas que lo componen para pedir una investigación "a fondo" en torno a la muerte en 1985 del navarro Mikel Zabalza, cuyo caso ha vuelto a la primera línea de la escena política a raíz de la publicación de unos audios en los que un mando de la Guardia Civil explica a un excoronel del CESID –el actual CNI- que Zabalza fue torturado hasta la muerte  durante un interrogatorio en el cuartel de Intxaurrondo.

Se trata de un paso simbólico, por dos motivos. Primero, porque desde la última reforma del reglamento, el Parlamento precisa del sí de todos los grupos para sacar adelante declaraciones institucionales, el posicionamiento oficial de la Cámara para el que ya no vale con tener mayoría, sino que exige que todos los grupos se pongan de acuerdo. Y, en segundo lugar, porque desde el punto de vista político es significativo que, desde Navarra Suma a EH Bildu, todo el arco parlamentario coincida aunque sea en una declaración de mínimos.

Porque, para salir adelante, el texto tuvo que ser de mínimos. EH Bildu, Podemos e I-E plantearon una declaración de un único punto que dice así: "El Parlamento exige que, tras la aparición de unos audios en los que intervienen el capitán de la Guardia Civil Gómez Nieto y el entonces coronel jefe del Cesid Juan Alberto Perote, se investigue a fondo el contenido de los mismos, con el fin de saber la verdad en torno a la muerte del joven navarro Mikel Zabalza". Probablemente, haber hecho más consideraciones hubiese dificultado una postura unánime, algo complicadísimo en el Parlamento navarro aunque se trate de un caso absolutamente sangrante.

Prueba de esos recelos dejó Carlos Pérez-Nievas, portavoz el lunes de Navarra Suma en sustitución de Javier Esparza. El recién elegido coordinador de Ciudadanos se encargó de dejar claro tras la Mesa y Junta que la derecha siempre tiene que apostillar cualquier declaración sobre violencia.

"Hemos pedido que se investigue, como no puede ser de otra manera: el poder judicial tiene sus competencias para hacerlo", arrancó, para poco después tratar de opacar la condena de las torturas con críticas a EH Bildu. "Resulta crítico escuchar cómo la portavoz de EH Bildu habla de que es un episodio espeluznante cuando siguen sin condenar ni querer aclarar el terrorismo de ETA", trajo a coalición, sin tener mucho que ver con el caso. "Ese criterio es reprobable, inadmisible en democracia", zanjó Pérez-Nievas, en lo que ya se ha conevrtido en habitual:  la derecha no es capaz de condenar ningún tipo de violencia sin sacar a colación la de ETA y utilizarla contra otros grupos.

Algo que no hizo el resto. Ainhoa Unzu, coportavoz del PSN, simplemente se quedó con que "hay que posibilitar la investigación y aclaración de los hechos sucedidos".

Maria Solana, de Geroa Bai, destacó la importancia de la unanimidad lograda ya que "habla bien de este Parlamento en representación de la sociedad navarra que quiere verdad, justicia y reparación", al tiempo que pidió el traslado a Iruñea de distintos expedientes, el cambio de la ley de secretos oficiales y el fin de la impunidad y los secretos para conocer la verdad y recuperar la memoria.

Por su parte, Bakartxo Ruiz, de EH Bildu, cree que estos "espeluznantes" audios "sugieren que la tortura se utilizó con fines políticos y de manera sistemática, y se ocultó de manera sistemática con absoluta impunidad", por lo que apeló a la responsabilidad del Estado "en esta práctica y en aclarar lo sucedido" y del Ejecutivo foral "para implementar políticas activas en la prevención de la tortura y elaborar informes oficiales".

Opinión:

Me preguntaban hace tiempo si una víctima de la banda terrorista ETA podía estar de acuerdo en que se investigaran las actividades del llamado “terrorismo de Estado”. Mi respuesta fue: ¿y por qué no? El terrorismo es terrorismo, sea de ETA o de cualquier otra banda terrorista. Y si desde el Estado se cometieron acciones que se han catalogado como terroristas ¿quién soy yo para decir lo contrario?”

Lo recuerdo para los que ahora vuelven a preguntarme lo mismo.

 

 

 

 

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