03 mayo 2019
La tecnología 5G
dificultará las investigaciones policiales y terroristas
La complejidad futura
de las comunicaciones futuras obliga a modificar el marco regulatorio de la
interceptación de las comunicaciones
La tecnología 5G permitirá
el desarrollo del coche
autónomo y de la
telemedicina, entre otros avances, pero también será un escudo para delincuentes y terroristas, al menos
tal y como está planteada hoy en día la regulación, alertan los expertos.
Así lo ha reconocido Felix Arteaga, Investigador principal
de Seguridad del Real Instituto Elcano de Estudios Internacionales y
Estratégicos. "Hay un debate que se abre ahora, y sobre el que se va a
centrar el Grupo de Trabajo sobre Ciberpolítica del Real
Instituto Elcano, Tiene que ver con la creciente complejidad
operativa, tecnológica y jurídica a la que tienen que hacer frente las Fuerzas
y Cuerpos de Seguridad del Estado y la Fiscalía
en el curso de las investigaciones policiales y judiciales".
Arteaga hace referencia a la captación,
grabación y localización de imágenes así como el
registro insitu y en remoto
de ordenadores
y equipos informáticos. Acciones imprescindibles en el ámbito
de la investigación de prácticamente cualquier delito, no sólo aquellos
producidos en la esfera digital.
Otro investigador en ciberseguridad del
Instituto, Javier Alonso Lecuit, aseguraba en su día que las nuevas
arquitecturas de información y tecnologías harán más complicada la labor de los
cuerpos y fuerzas de seguridad.
"Hay que actualizar las medidas
regulatorias de la UE y de los
Estados miembros para la interceptación de las comunicaciones. El objetivo es
apoyar las investigaciones de las autoridades policiales y judiciales",
manifiesta.
"Entre los temas a discutir se incluyen las bases
legales que permiten la interceptación individualizada y
masiva de las comunicaciones, el acceso a terminales y
comunicaciones cifradas extremo a extremo, el registro remoto de dispositivos,
la extracción de información, la infiltración, la identificación en tiempo real
de amenazas, el acceso a pruebas electrónicas, el bloqueo o borrado de
contenidos ilegales de servidores o el periodo de retención de datos y metadatos,
entre otros", continúa.
La regulación vigente marca que esa interceptación de las
comunicaciones se aplique de forma selectiva y proporcional a la naturaleza y
gravedad de los delitos
investigados, y
que el tratamiento de los datos personales se realice conforme a derecho.
Complejidad tecnológica
La actualización de esa regulación es necesaria debido a la
evolución de los sistemas con los que trabajan los operadores
de telecomunicaciones (en referencia a los que poseen red
propia, caso de Movistar, Orange y Vodafone)
figuras indispensables en las investigaciones -prácticamente todos los
ciudadanos españoles utilizan el teléfono móvil.
Los teléfonos
móviles permiten
acceder a las comunicaciones de los investigados. Entre la información que se puede
rastrear destaca la hora de las comunicaciones, el contenido de las mismas y
los movimientos geográficos de los investigados a través del GPS.
Esta información es accesible incluso en el pasado. Los operadores están obligados
a almacenar durante un tiempo las comunicaciones de sus clientes.
La tecnología
5G dificultará el acceso a esta información. Hasta no hace
demasiados años las comunicaciones se ceñían casi únicamente al teléfono fijo,
o al móvil y los SMS. Internet lo
cambió todo. El 5G hará mas compleja la red de telecomunicaciones.
"Es necesario actualizar la regulación porque los
servicios tradicionales ofrecidos por los operadores
de telecomunicaciones nacionales han evolucionado hacia un escenario global,
formado por aplicaciones onlineofrecidas por los proveedores
de Internet (OTT)
ya mencionados y disponibles a través del servicio de acceso a Internet
proporcionado por compañías locales a través de redes fijas (fibra y xDSL) y
móviles, a lo que hay que añadir el despliegue de redes móviles 5G y la
virtualización de las infraestructuras de comunicaciones. Un cambio de
escenario que afecta a la interceptación de las comunicaciones", concluye
Lecuit.
Por ello, también la Comisión Europea recomendaba hace tan solo un par de
meses iniciar negociaciones con Estados Unidos y actualizar el Protocolo de
Budapest centrado en la obtención
de pruebas electrónicas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario