01 mayo 2021
Ortega Smith enarbola el sindicalismo “patriótico” en Euskadi junto al monumento a las víctimas del terrorismo
El partido de derecha radical reúne a medio centenar de afiliados y simpatizantes en un 1 de Mayo que denuncia la “traición” de la izquierda
Javier Ortega Smith, el secretario general de Vox, regresó al País Vasco para enarbolar el sindicalismo “patriótico” español convertido en un elemento de confrontación con los partidos y sindicatos de izquierda. Ortega ha cargado contra los sindicatos de “subvención y mariscada” en un acto celebrado junto al monumento que recuerda a todos los asesinados por ETA y que se ha desarrollado con normalidad bajo un fuerte despliegue de la unidad antidisturbios de la Ertzaintza.
Vox ha celebrado también en el País Vasco uno de los actos programados en un 1 de Mayo muy crítico con los partidos y sindicatos de izquierda. La presencia de Smith -uno de los rostros más reconocibles del partido de Abascal- y la parlamentaria vasca Amaia Martínez ha congregado a medio centenar de militantes de Bizkaia, Gipuzkoa y Álava que portaban banderas de España y de ‘Solidaridad’, el sindicato impulsado por Vox.
La convocatoria de Vox no ha contado en esta ocasión de ninguna contraconvocatoria de grupos de izquierda y se ha desarrollado sin ningún incidente. Ortega ha intervenido antes de la lectura del manifiesto realizado por ‘Solidaridad’ para denunciar que el Gobierno de Pedro Sánchez “ha abandonado a los trabajadores” y advertir de la “ruina” en la que se encuentran “familias, empresas, barrios y ciudades” tras la gestión de los efectos de la pandemia.
El ‘número dos’ de Vox ha reclamado el derecho al trabajo de los españoles y de los inmigrantes legales y defendido el “producto nacional” frente a la “competencia desleal” antes de gritar vivas a España secundado por sus simpatizantes.
Opinión:
Me gustaría saber las razones por las que se manifiestan en el monumento a “las” víctimas de ETA cuando es sabido que hay muchas víctimas de la banda terrorista ETA que no compartimos sus postulados… por no hablar de lo triste que parece ver cómo se anda por encima de los nombres de algunas de las víctimas. La imagen no es del todo agradable.
Es una lástima que haya quien se apropie de un monumento para realizar actividad política. Y hay que recordar que en otras ciudades ya han ocurrido usos semejantes. En Barcelona, sin ir más lejos…
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