30 enero 2016
Currin recomienda a ETA que el desarme sea "visible" y al nuevo Gobierno que lo permita
El mediador sudafricano participa
en el Foro Social que se ha celebrado en Gernika
La entrega y "destrucción" de
armas por parte de ETA debe ser "visible". Así se lo ha recomendado
el abogado sudafricano Brian Currin a la banda terrorista durante la
celebración, hoy en Gernika, del tercer Foro Social, que impulsa la asociación
Bake Bidea. Durante más de cuatro horas, diferentes expertos han tomado parte
en una jornada en la que se han abordado las claves de diferentes procesos de desarme,
como el emprendido en Colombia por las FARC o los llevados a cabo en Irlanda
del Norte. Currin, que a su vez dirige el Grupo Internacional de Contacto y
tuvo un destacado papel en el anuncio por parte de ETA del "cese
definitivo" de su actividad terrorista en 2011, ha pedido pasos por
parte tanto de la organización armada como por los gobiernos de España y
Francia.
Ante un auditorio en el
que estaban acreditadas más de 150 personas, incluidos representantes de PNV,
Podemos y EH Bildu, el mediador sudafricano ha advertido a ETA que el proceso
de desarme no puede llevarse a cabo como hasta ahora, de espaldas a la
sociedad. Considera que la ciudadanía vasca debe ser "testigo" de los
movimientos que se lleven a cabo. En este sentido, ha sugerido a la Comisión Internacional
de Verificación (CIV), que dirige Ram Manikkalingam, que sea más
"transparente" y ponga en conocimiento de la sociedad de Euskadi los
avances que se hayan llevado a cabo. La
CIV lleva casi dos años sin realizar un viaje oficial al País
Vasco -sus responsables sí que realizan visitas frecuentes aunque sin que
trasciendan en los medios de comunicación-.
Su mensaje tampoco ha
eludido ciertas exigencias a los gobiernos español y francés. Ha criticado los
impedimentos que ambos ejecutivos han puesto a los intentos de la banda
terrorista por poner fuera de circulación sus arsenales, con operaciones
policiales que han llegado a descabezar la cúpula de la organización armada,
como sucedió con la detención de David Pla e Iratxe Sorzabal en septiembre del
año pasado. De tal manera que, según Currin, el proceso para poner fuera de
circulación las armas se ha visto "ralentizado" en los últimos doce
meses. El máximo responsable del GIC ha instado al nuevo Ejecutivo español, aún
sin conformar, que configure un "entorno de seguridad" por el que
tanto los terroristas como los mediadores internacionales sepan que no va a
haber más arrestos mientras se esté llevando a cabo el proceso de desarme. En
este sentido, Currin ha pedido a ETA que haga en los próximos meses un gesto al
nuevo Ejecutivo con el que se subraye de que ETA "va a entregar"
todas sus armas.
Opinión:
Pues está muy bien la propuesta...
de hecho, también la comenté en junio pasado en París. Sería lo más lógico. Si
la banda terrorista ETA hiciera pública la desaparición y eliminación de las
armas con un protocolo que acreditara la no existencia de otras armas
susceptibles de ser utilizadas, se avanzaría muchísimo en el tema y al mismo
tiempo se terminaría con la cerrazón de otros que parecen no estar demasiado
interesados en el fin definitivo de la historia de esas tres dramáticas siglas.
Por otra parte, cabe recordar que
muchos de los esfuerzos (reales o de cara a la galería) que se están llevando a
cabo para terminar con lo que algunos llaman “conflicto” podrían destinarse a
ayudar en serio a tantas víctimas anónimas cuyo único objetivo es conseguir que
nadie mas pase por lo que ya hemos pasado otros.
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