13 marzo 2019 (12.03.19)
El 11M y la
manipulación
El regreso del aznarismo reflota la teoría de la
conspiración en el PP y en el periodismo amarillo
Esta semana, se han cumplido quince
años del mayor atentado de la historia de España. Un atentado que dejó casi 200 víctimas mortales y un periodismo herido en su ética y
credibilidad, por la falta
de escrúpulos de
quienes hicieron el juego a un Gobierno que estaba dispuesto a todo, para no
perder las inminentes elecciones.
El tiempo parecía haber apaciguado a los que alentaban la teoría de la
conspiración, pero en estos días hemos comprobado que estamos lejos de esa
realidad. Quizá habría que achacar ese renacimiento a la vuelta del aznarismo a la cúpula del Partido Popular.
Aznarismo que, al parecer, ha regresado con todas sus consecuencias. Pablo Casado no se ha sonrojado al reflotar las
dudas sobre la autoría del atentado, y los medios afines han bajado la cabeza y
arremetido contra todo y contra todos.
Ni siquiera el dolor de una víctima como Eulogio Paz, que
perdió a su hijo Daniel, de 20 años, en los atentados, mereció el respeto de José Luis Martínez-Almeida,
candidato del PP a la alcaldía de Madrid. El portavoz decidió abandonar el homenaje de
Atocha, acusando a Paz de estar haciendo un mitin, cuando la
verdad es que se quejaba amargamente de que un Gobierno mintiera, pisoteando a
su hijo, para ganar unas elecciones.
Este es el PP que ha resucitado Casado. El PP de los ex ministros Acebes y Zaplana,
caras visibles de la ignominia, que hoy, curiosamente, o no tanto, están
imputados por corrupción.
Los periodistas y medios que apoyaron aquella infamia, en lugar de
pedir perdón, siguen enrocados en su posición. Así es que hemos podido
escucharles y leerles en intervenciones que provocan indignación. Hermann Tertsch,
desde las páginas del ABC, no solo defiende la teoría de la conspiración, sino
que en un totum revolutum,
critica al antifranquismo. Pero quien no podía faltar, por supuesto, era Pedro J. Ramírez.
Ahora, desde su propio periódico, El Español, lanza un vídeo en el que, una vez
más, insiste en afirmaciones inverosímiles. Para ratificar su teoría, se apoya,
por ejemplo, en que el condenado Jamal
Zougam reitera,
año tras año, que es inocente. Como prueba parece bastante endeble.
Y si Pilar Manjón, madre de Daniel, víctima de los atentados, ha
logrado ser fuerte ante los insultos y las burlas de los inmorales, otras no
han podido. La mentira mata. Magdalena, la mujer del ex comisario de Vallecas, Rodolfo Ruiz, no
soportó la persecución a la que estaba siendo sometido su marido, acusado por los conspiranoicos, y se suicidó en 2008. Es
una víctima más del atentado. Cada uno sabrá si lleva o no alguna muerte en su
conciencia.
Opinión:
Sobre la actitud de
los señores Acebes, Zaplana o incluso Aznar tras los atentados del 11M ya opiné
en su momento, hace 15 años. No lo repetiré ahora.
Pero sí quiero opinar
sobre el señor José
Luis Martínez-Almeida. Seguramente este señor no tiene ni idea de lo que hizo
su “igual”, el candidato a la alcaldía en Barcelona: presentar su acto de
candidatura junto al monumento a las víctimas del terrorismo que se encuentra
en la Avinguda Meridiana de Barcelona.
Eso, señor José
Luis Martínez-Almeida, sí es utilizar al colectivo de víctimas para hacer un
mitin político. Eso sí es, señor José Luis Martínez-Almeida, utilizar la
representación del dolor ajeno para hacer política partidista.
A mi no me
utilicen. Ni a mi ni a muchísimas otras víctimas del terrorismo. Y a aquellos
políticos que solo quieren la foto, les digo que hablen menos y hagan más…
Mi dolor es mío y de mi entorno.
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