04 enero 2024
Miedo al terrorismo yihadista
José Manuel Estevez-Saá
La nueva situación de inestabilidad que vive Oriente Medio desde el pasado 7 de octubre aumenta el miedo y las alertas frente al terrorismo yihadista. Nuestro país no es ajeno a este temor. No en vano, el ataque terrorista de Hamás a Israel, así como la dura respuesta del ejército israelí en la Franja de Gaza y Cisjordania, parecen constituir los detonantes de la reactivación de ciertos grupos radicalizados a lo largo de Europa. Sólo en España entre octubre y diciembre la policía detuvo a 16 menores por captación yihadista a través de las redes sociales, o por poseer material para preparar atentados, lo cual demuestra el aumento del radicalismo entre menores. Pero también varios adultos fueron arrestados, precisamente por causas de adoctrinamiento relacionadas con los sectores más jóvenes de la sociedad. Esto demuestra que el inicio del conflicto entre Hamás e Israel constituye un referente temporal incuestionable.
En España preocupan, y mucho, las detenciones realizadas a lo largo del pasado año (78); una cifra peligrosamente alta, ya que supone un 70% más que el año anterior, y la mayor en dos décadas, sólo superada por las 131 detenciones realizadas en 2004, y los 92 arrestos registrados en 2005. La mayoría de aquellos fueron fruto de las operaciones antiterroristas llevadas a cabo tras los atentados del 11-M contra cuatro trenes de la Comunidad de Madrid, en los que fallecieron 192 personas y unas 1.900 resultaron heridas. Ahora las autoridades políticas y altos cargos de Inteligencia e Interior se sorprenden por la juventud de los nuevos encausados, lo que ha puesto en alerta a nuestras fuerzas y cuerpos de Seguridad, que ya redoblan sus esfuerzos para monitorizar a quienes en el pasado o en la actualidad han mostrado en privado o en público, y a través de las redes sociales, actitudes y declaraciones susceptibles de ser consideradas temerarias desde el punto de vista terrorista.
Hoy sabemos que los métodos de captación y de transmisión de propaganda yihadista son cada vez más variados. Grabaciones, videojuegos, llamamientos al enaltecimiento del terrorismo, y quedadas en zonas para intercambiar criterios y practicar supuestos juegos de estrategia y entrenamiento, o compartir manuales de manipulación de explosivos, son cada vez más frecuentes. Incluso Francia, a partir de este 1 de enero, no acepta a imanes separatistas financiados por países extranjeros o que escapen a su control. Pues bien, el pasado jueves la situación de alerta aumentó, tras distribuirse un comunicado del Estado Islámico atribuyéndose la autoría del doble atentado que en Kermán causó 84 muertos durante un homenaje a Qasem Soleimani, abatido por drones estadounidenses en enero de 2020. El Daesh anima en su audio a atentar en Europa y EE.UU. con explosivos, disparos, armas blancas, e incluso atropellos.
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