17 enero 2014
Asalto por el flanco derecho
El nuevo partido de Ortega Lara amenaza con poner fin al monopolio del PP en todo el espectro conservador
La mano dura contra ETA y el fin de las autonomías son sus banderas políticas
Cuando abandonó el PP, en mayo del 2008, José Antonio Ortega Lara desató una operación de acoso y derribo al líder del partido, Mariano Rajoy. El exfuncionario de prisiones, todo un símbolo de la lucha antiterrorista tras ser secuestrado por ETA durante casi un año y medio, dejó claro que se marchaba por discrepancias sobre la línea en Euskadi, un gesto que fue aprovechado por insignes críticos del actual presidente del Gobierno, como José María Aznar y Esparanza Aguirre, para decir que «no» se estaban «haciendo las cosas bien». Ortega Lara ha vuelto ahora a la arena política, pero no al redil de los conservadores. Ayer, junto a Santiago Abascal, otro antiguo miembro del PP, presentó un nuevo partido político. Se llama Vox y sus banderas son el fin de las autonomías y la mano dura contra ETA.
La irrupción de Vox llega en un momento muy delicado para Rajoy. El Gobierno lleva meses intentando reconciliarse con sus votantes más de derechas con leyes como la del aborto y la de seguridad ciudadana. Mientras estas medidas empiezan a alejar a sus votantes moderados, aparecen unas nuevas siglas que amenazan con poner fin al monopolio del PP en todo el espectro conservador. Hay inquietud en las filas populares. Al conocerse el retorno de Ortega Lara, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, llamó a «reforzar todavía más los mensajes». El portavoz económico en el Congreso, Vicente Martínez-Pujalte, abundó en esa idea. «Lo que el PP está defendiendo», señaló, es lo «mismo» que Vox. Y la alcaldesa de la capital, Ana Botella, esposa de Aznar, dijo que la creación de este partido político era una noticia que ella lamentaba «profundamente».Un Gobierno, un ParlamentoEn la presentación del partido, Abascal, presidente de la Fundación para la Defensa de la Nación Española (Denaes) y dirigente del PP próximo a Aguirre hasta el año pasado, abogó por «un solo Gobierno, un solo Parlamento y un solo Tribunal Supremo». Es decir, por desmantelar el sistema autonómico, calificado de «auténtico disparate» por otro de los fundadores, el filósofo y excolaborador de Aznar José Luis González de Quirós. Ortega Lara se centró en la política antiterrorista del Gobierno, al que acusó de «poner la alfombra roja para que [los terroristas] desfilen como estrellas del celuloide».
Hubo guiños a Ciutadans y UPD (los dos partidos que en Catalunya y el resto de España quitan votos a Rajoy) y al vicepresidente del Parlamento Europeo, Aleix Vidal-Quadras, muy crítico con la dirección. Ya se especula con que este se sumará en breve a Vox, que quiere presentarse a las elecciones europeas, autonómicas, municipales y generales. Mala noticia para el PP.
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