26 enero 2014 (24.01.14)
La furia contra el obispo Uriarte genera odio y no paz
Da un profundo asco leer o escuchar a la oleada cavernaria periodística, lapidando al obispo Juan María Uriarte. 19 de mayo del año 1999. En Zúrich (Suiza) los representantes de ETA y los del Gobierno de José María Aznar se encuentran para dialogar, lo cual luego ha sido cínicamente desmentido -una y otra vez- por el líder de la derecha y sus voceros
¿Qué coño, si no, hicieron los asistentes?
¿Pero si no dialogaron, qué coño hicieron los asistentes? ¿Hablaron quizá de la Real Sociedad , del Atlético de Bilbao o del Deportivo Alavés? Cuatro etarras, con nombre y apellidos, se vieron y conversaron con cuatro popularesde alto relieve.
Avalado por Mayor Oreja
Estaba en la reunión, además, el obispo Uriarte, entonces obispo de Zamora. Su presencia en el diálogo mencionado fue sugerida por el ministro del Interior de aquel tiempo, Jaime Mayor Oreja. Las relaciones del actual Mayor Oreja -convertido en la actualidad en halcón de la extrema derecha- con el prelado Uriarte es sabido que fueron magníficas.
Lo que dijo Martí Fuxá
Más aún, Aznar lo apadrinó para que moderara la sesión y actuara de mediador en un proceso para la paz. Incluso uno de los hombres de Aznar, Ricardo Martí Fuxá, llegó a decir públicamente que el final de ETA debiera conseguir que se llevara a cabo sin vencedores ni vencidos.
Periodista de gran recorrido
Nuestro apreciado compañero José María Garrido, periodista de gran recorrido, como todos/as los/as periodistas de ELPLURAL.COM, ha publicado todo cuanto la prensa popular, ultramontana o de la Tea Party -que viene a ser lo mismo- ha vomitado sobre el obispo emérito Uriarte. Le acusan de “simpatizar” con los terroristas y piden a la cúpula de la Iglesia su “excomunión”. Lo maltratan afirmando que “asume las tesis de ETA”. La furia de estos desalmados busca el odio y no la paz.
Aznar y su cuadrilla mediática
No serán nunca capaces de asumir que Felipe González, José Luis Rodríguez Zapatero y Alfredo Rubalcaba contribuyeron racionalmente a terminar con ETA. Eso ciertamente les duele a Mariano Rajoy y a José María Aznar. Y a su cuadrilla mediática.
Opinión:
Podrá molestar mas o podrá molestar menos pero los hechos son los que son. Y digo esto, no porque Enric Sopena lo haya publicado (que también) sino porque llevo años advirtiendo de todos estos datos como bien puede probarse consultando los años anteriores en este mismo blog.
Otra cosa es que a alguien no le guste que aparezca esta información pero las hemerotecas están ahí.
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