30 marzo 2011 La Vanguardia

30 març 2011

També el company Francesc Bracero va aportar la seva visió sobre el succeït a Vic, tan amb la informació sobre el documental com en les conseqüències del mateix.

Ho va publicar el dimecres 30 de març a “La Vanguardia”

TV3 revive el atentado de ETA en Vic en su vigésimo aniversario

‘ETA a la ciutat dels sants” analiza la acción terrorista y las consecuencias poíticas que ha tenido en el tiempo

El 29 de mayo de 1991 ETA asesinó a nueve personas en Vic, cinco de ellas niños, en un atentado con bomba contra el Cuartel de la Guardia Civil en esa localidad, que sacudió a una población que nunca se había sentido amenazada por los terroristas. El atentado, sus consecuencias, el análisis político y los silencios –el homenaje a las víctimas tardó 18 años- forman parte de un ‘Sense ficció’ especial, ‘ETA a la ciutat dels sants’, que TV3 emite esta noche (21.50 h).

Aquel atentado se identifica con la imagen del Guardia Civil José Gálvez Barragán que, con su cara ensangrentada, llevó en brazos a una niña herida, hija de uno de los compañeros. El agente es uno de los testimonios del documental, dirigido por Albert Om, que aquel día era subdirector del ‘El 9 Nou’, un diario que tenía su sede a apenas 150 metros del lugar de la explosión.

El programa contiene varias reflexiones. Entre ellas, intenta romper de forma intencionada “el silencio de una ciudad que, después de volcarse en la ayuda a als víctimas, guardó los hechos en el cajón de la memoria”. En esa línea, intenta profundizar en las consecuencias políticas que tuvo “y el largo silencio que le siguió”.

Entre los personajes que ofrecen su testimonio en el programa está Jordi Pujol, presidente de la Generalitat, que mostró la idea equivocada que existía en Catalunya sobre ETA: “De toda esta idea de que nos respetarían porque somos nacionalistas, porque Catalunya tiene un hecho nacional, nada de nada”.

Otro de los políticos clave de la época es Narcís Serra, que en aquel momento era vicepresidente del Gobierno, cree que ETA decidió atentar en Vic “porque era Catalunya, porque eran los Juegos Olímpicos y porque tenía menos riesgo que hacerlo en Bareclona, Badalona o L’Hospitalet·”.

En el ‘Sense ficció’ hablan el alcalde actual de Vic, Josep María Vila d’Abadal y el que había en aquel momento, Pere Girbau. Este último considera que “en 1991 en Vic no se hizo una manifestación contra ETA. Y esto fue un error.”. En el mismo sentido, Robert Manrique, que en ese momento presidía la Associació Catalana de Víctimes d’Organitzacions Terroristes señala que ese silencio fue para él “una cuestión muy dura”. Hizo gestiones sin éxito ante el ayuntamiento para organizar un reconocimiento a las víctimas. “Las respuestas que recibí no se entendían”, señala.

En el documental habla la máxima autoridad del cuartel de la época, Francisco Sánchez Solís, que pregunta a los terroristas: “¿Qué les habían hecho aquellas criaturitas?”.