23 marzo
2018
El atentado de Hipercor, tratado con austeridad y
sin morbo
La arriesgada
incursión de 'Cuéntame' en el mayor crimen de la historia de ETA ha sido
superada por su tratamiento austero, sensible y su huida del morbo
Luis R. Aizpeolea
La arriesgada incursión de la serie "Cuéntame" de la pasada noche en el mayor crimen de la historia de
ETA, el atentado del Hipercor de Barcelona del 19 de junio de 1987, que dejó 21 muertos y 45 heridos, ha sido superada por su tratamiento austero,
sensible y su huida del morbo televisivo tan socorrido en estos tiempos. Esta
impresión la corroboraba anoche Roberto Manrique, portavoz de las víctimas y
uno de los dos empleados de Hipercor heridos en el atentado. Un tercero murió.
El episodio apenas cuenta con imágenes de la época. Pero
homenajea a dos de los cuatro niños muertos en el atentado. Los hermanos Jordi
y Silvia Manzanares, de 9 y 12 años, murieron con su tía Mercedes cuando
compraban un bañador. En la ficción, a Jordi, el hijo de Irene Alcántara, le
sorprende el atentado mientras compraba un bañador y se salva. Los guionistas
han escuchado a las víctimas y han evitado la recurrente imagen de la mujer con
vestido de cuadros muerta. Su hija se enteró del asesinato de su madre cuando
vio esa imagen en la televisión.
El guión ha seguido fielmente la sentencia del tribunal. La
polémica sobre si las Fuerzas de Seguridad actuaron diligentemente o no tras el
aviso de bomba de ETA no se elude. Se trata austeramente. Unos periodistas
afirman que el diario Avui y la Guardia Urbana han
recibido un aviso de bomba. Luego, un policía responde a Irene Alcántara cuando
pregunta por los inusitados movimientos policiales en torno al Hipercor que
"es rutina".
El ministro del Interior, José Barrionuevo, quiso dimitir
por no exigir el desalojo del Hipercor y Felipe González se empleó a fondo para
disuadirle. La sentencia judicial obligó al Estado a indemnizar a las víctimas.
El programa no lo dice. Pero anoche, el portavoz de las víctimas, Roberto
Manrique, recordó que cuando se entrevistó en la cárcel con Rafael Caride, uno
de los terroristas que puso la bomba, le reconoció que la única responsabilidad
era suya. ETA no precisó la ubicación de la bomba y despistó a la policía. El
episodio no aborda cómo el atentado de Hipercor conmocionó tanto a la sociedad
que marcó un hito en la lucha contra ETA. Pero esa es otra historia.
Opinión:
Para empezar, agradecer a Luis la llamada para conocer mi
opinión sobre la emisión del capítulo de “Cuéntame cómo pasó”… y también agradecerle
que todavía me considere como “portavoz”, aunque desde septiembre de 2009 ya
cesé en mis actividades asociativas.
Aún y así, mantengo contacto con una enorme cantidad de
víctimas y todas con las que he hablado en las últimas horas (víctimas de ETA y también de otras bandas terroristas) destacan la enorme sensibilidad y el tacto
mostrado por los creadores, guionistas, productores y demás personal
responsables del episodio emitido ayer.
Como bien dice Luis, el guión sigue fielmente lo que
recogen las dos sentencias (1989 y 2003) y, evidentemente, no dan ni un ápice
de credibilidad a quien habla de heridas
y secuelas inventadas o de “mantos virginales”…
Por mi parte, ha sido un privilegio poder colaborar en todo
lo que se me ha solicitado con la gente de Ganga Producciones y muy
especialmente con Carmen y Cristina, ejemplos de sensibilidad, solidaridad y
empatía.
No hay comentarios:
Publicar un comentario