sábado, 5 de noviembre de 2016

04 noviembre 2016 Expansión (opinión)

04 noviembre 2016



El principal reto para interior esta en el terrorismo yihadista


Juan Antonio Zoido recibirá la cartera de Interior de manos de Jorge Fernandez Díaz con varios desafíos candentes. Los dos objetivos principales y prioritarios son la lucha contra el terrorismo yihadista y el control de la inmigración ilegal.
Tras el anuncio por parte de ETA del cese definitivo de la violencia, el 20 de octubre de 2011, durante la pasada legislatura la lucha antiterrorista se ha centrado casi exclusivamente en el seguimiento y desarticulación de ls grupos relacionados con la Yihad, de cualquiera de sus facetas (Estado Islámico, Al Qaeda, etc). Muy especialmente durante el último año, y tras confirmarse que Europa se ha convertido  en el principal objetivo del terrorismo islamista.
Según datos del Ministerio del Interior, el año pasado se detuvo en suelo español a 26 presuntos terroristas yihadistas, en toda la legislatura, la cifra se eleva a 139, un número que supera ampliamente al de los 95 presuntos miembros de ETA arrestados desde diciembre de 2011.
El último año ha sido especialmente intenso para las Fuerzas de seguridad del Estado. Los atentados llevados a cabo en Túnez, Kuwait y Somalia en verano de 2015 provocaron que el Gobierno elevara a cuatro la alerta antiterrorista. Hay cinco niveles, el nivel cuatro es riesgo alto de atentado y, el cinco, muy alto.
La masacre de Paría, acaecida el 13 de noviembre del año pasado, obligó a intensificar aún más las tareas de prevención e información por parte del Ministerio del Interior. Otro de los desafíos para el nuevo ministro del Interior será seguir combatiendo la inmigración ilegal. En 2015, el número de inmigrantes ilegales que arribaron a las costas españolas aumentó un 16'7 %, mientras que, en 2014, se elevó un 40'6 %. Por el contrario, las repatriaciones disminuyeron levemente: el año pasado se contabilizaron 20.091, mientras que un año antes se registraron 20.993.
El nuevo ministro llega a su puesto en plena polémica por el trato que se les da a los inmigrantes ilegales en los centros de Internamiento de Extranjeros, los denominados CIE, donde se retiene de manera cautelar a los extranjeros sometidos a expediente de expulsión del territorio nacional.
Junto a todo ello, Juan Antonio Zoido tendrá la misión de hacer olvidar el ultimo año de Fernández Díaz y su oscuro episodio de intentar fabricar -presuntamente- escándalos para desprestigiar a los independentistas catalanes.

Opinión:

Para empezar, reiterarme en lo que ya he comentado en las últimas horas: en conjunto y por mucho que se esfuerce no creo que el nuevo ministro de Interior lo pueda hacer peor que el anterior. Si demuestra coherencia entre sus actos y sus palabras, excelente. Pero si hace lo contrario de lo que diga, habrá que explicarlo.
Y no se por qué pero tengo la impresión de que en poco tiempo se encontrará con problemas.

Y una reflexión que podrá mosquear a ciertos personajes pero que debo plantear para que se conozca lo que está ocurriendo: ¿le aconsejará a la presidenta de la Fundación de Víctimas del Terrorismo, compañera de su propio partido, que elija entre el cargo o ser diputada en el congreso? Es que compaginar ambos temas no parece muy ético ¿verdad?

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