martes, 13 de enero de 2015

13 enero 2015 (3) El Correo (opinión)

13 enero 2015


El PP organiza el lunes en Bilbao un homenaje a las víctimas para contrarrestar las críticas de la AVT

Cospedal y Sáenz de Santamaría se citan en Euskadi con apenas dos días de diferencia para respaldar la campaña de los populares vascos.




El Partido Popular ha decidido recurrir a la contraprogramación en respuesta a la marcha organizada por la AVT el próximo día 24 en Madrid, en una protesta en la que denunciará “la traición” del Gobierno de Mariano Rajoy en la lucha contra ETA. En un intento por contrarrestar las críticas de los colectivos de víctimas más beligerantes, el PP ha convocado para este lunes en Bilbao un homenaje a los afectados por el terrorismo, en el que remarcará el apoyo que “siempre” les ha ofrecido. El acto, presidido por la secretaria general del partido, Dolores de Cospedal, está organizado por la sede nacional de Génova, con la colaboración de los populares de Euskadi.

La visita de Cospedal se producirá apenas dos días después de que la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría, se traslade a Vitoria para respaldar la campaña de sus compañeros de Álava, la principal plaza electoral del PP en el País Vasco. Sáenz de Santamaría cumplirá así con una reunión que estaba prevista para noviembre, pero que tuvo que cancelar por el viaje de Rajoy a Cataluña. El encuentro, que reunirá a 400 simpatizantes en el Artium, contará también con el ministro de Sanidad, el alavés Alfonso Alonso.

Con apenas 48 horas de diferencia, las dos máximas referencias del PP tras Rajoy se citan en Euskadi en un momento crucial para el partido, volcado en tratar de darle la vuelta a la mayoría de las encuestas que revelan hoy un acusado desgaste. Para ello, se ayudará de uno de los estandartes que tradicionalmente ha abanderado el PP vasco: la defensa de las víctimas y la “resistencia cívica” frente al terrorismo. Este será el mensaje principal del acto que presidirá Cospedal en Bilbao y que incluye la intervención de la líder de los populares en el País Vasco, Arantza Quiroga.

Cuando han transcurrido ya más de tres años del cese “definitivo” de la violencia, el PP parece que no acaba de encajar su discurso con las asociaciones más críticas con su gestión sobre el final de ETA. Las discrepancias en estos colectivos vuelven a estar encabezadas por la AVT, que ha organizado el día 24 una manifestación en Madrid para denunciar los “incumplimientos” del Gobierno y la “salida masiva de terroristas” de la cárcel a raíz de la sentencia sobre la ‘doctrina Parot’.

El asesinato de Ordóñez

Cospedal adelantó ayer la intención de organizar en Euskadi un homenaje a las víctimas, en lo que fue interpretado como un intento de neutralizar las protestas de los grupos más beligerantes. Aunque se llegó a especular con la posibilidad de que Mariano Rajoy visitase Bilbao en febrero, finalmente los populares han montado un acto propio este lunes, no sin ciertas urgencias – anoche se desconocía el emplazamiento y el programa, que podría incluir testimonios de víctimas muy simbólicas–.

De esta forma, se adelantan a la marcha de la AVT, en la que ya ha confirmado su participación la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, y a una fecha rodeada en rojo en el calendario: el asesinato de Gregorio Ordóñez, del que se c umplen veinte años el 23 de enero. Este aniversario llega en plena convención nacional del PP en la capital madrileña.

El homenaje a Ordóñez se saldó el año pasado con polémica al celebrarse por separado. Por un lado, el PP vasco, en un acto en el Kursaal en solidaridad con todas las víctimas. Por otro, su familia, con Consuelo Ordóñez, presidenta de Covite, molesta por la “coincidencia”.

Opinión:

Pues ya ha ocurrido lo que tenía que ocurrir. Hace unos días la Presidenta de la AVT, en un acto organizado por la Alcaldesa de Madrid, convocaba la manifestación. Es decir, aprovechaba un acto que seguramente iría a cargo de la Alcaldía para arremeter contra, precisamente, uno de los responsables de que hayamos llegado a esta situación. Cabe recordar que José María Aznar (esposo de la Sra. Alcaldesa de Madrid Doña Ana Botella) fue presidente del Gobierno español entre 1996 y 2004, con lo que tuvo al menos ocho años para “pensar” en una solución al problema de los presos que estaban cumpliendo condena en Francia. Evidentemente, tampoco se escapan a este olvido el resto de presidentes, fueran del PP o del PSOE. Incluso Mariano Rajoy fue Ministro de Interior y tampoco se planteó encontrar solución a esa circunstancia.

Desde 1989 hasta 2002 fui delegado en Cataluña de la ANTIGUA AVT, aquella asociación que velaba por los intereses de las víctimas que nos mostraron su confianza y que se rebelaba a los numerosos intentos de uso partidista que recibíamos de continuo. En aquellos años recibieron nuestras críticas tanto ministras del gobierno de Felipe González (Matilde Fernández aún debe tener pesadillas con nosotros) como el propio Presidente Aznar cuando desde Lima se le ocurrió aquello de que “yo y los españoles sabremos ser generosos con aquellos que abandonen la violencia” sin preguntar la opinión a las propias víctimas. Sobre Monseñor Setién y otros especimenes mejor ni hablo...

Por ello, aunque desde noviembre de 2002 ya no pertenezco a la AVT, me duele en el alma ver cómo ante la opinión pública la AVT es acusada de ser una herramienta para hacer política, de que haya quienes esperaban recibir cargos políticos a través del PP, de que haya convocado manifestaciones para “que las nosotros las llenáramos de  gente “ (Rajoy dixit) y otros muchos comentarios que no escribo porque son dolorosos para quienes empezamos aquella aventura en los años 80 del siglo pasado.

Pero el summum fue cuando el 30 de diciembre, un diario de tirada nacional publicaba que la AVT había denunciado a través de un comunicado que “las víctimas del terrorismo queremos dejar de ser el instrumento que se utiliza para la obtención de votos y a las que se deja tiradas sin contemplaciones cuando dejamos de ser rentables”. Lo que denuncié públicamente en 2002 y que fue la “razón” para expulsarme de la nueva AVT se ha reconocido por la propia entidad catorce años después...

Al “querer dejar de ser el instrumento que se utiliza para la obtención de votos...” se reconocía, sin ningún tipo de rubor ni autocrítica, que se había sido instrumento para la obtención de votos.
Para terminar y desde el máximo respeto a las decisiones personales, una reflexión mas: si la AVT convoca a una manifestación el sábado 24 de enero y otras asociaciones no secundan tal manifestación... las víctimas que están en varias asociaciones al mismo tiempo ¿por quién se sentirán representadas?


Además, cuando se aprecian posturas tan infantiles entre diferentes sectores ¿alguien se extraña de que hayan víctimas que quieran (queramos) mir absolutamente por libre y no aceptemos la supuesta representatividad de nadie en nuestro nombre?

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