04 mayo 2015
DyJ pide a Posada que impida el encuentro en el Congreso de víctimas y
un expreso de ETA
Dignidad y Justicia (DYJ) ha solicitado hoy al
presidente del Congreso, Jesús Posada, que impida la celebración en la Cámara Baja de un encuentro
entre familiares de víctimas de ETA y de un miembro de la banda, como el
expreso Josean Fernandez.
En una carta remitida hoy a Posada, la asociación no
se explica cómo el Congreso va a dar "cobijo" a esta iniciativa, la
segunda promovida por la parroquia San Carlos Borromeo del barrio madrileño de
Entrevías, pues supone equiparar a víctimas del terrorismo con etarras y
miembros de la banda fallecidos.
"Resulta espeluznante que el Congreso se haya
prestado a un encuentro en el que participa un miembro de ETA, Josean
Fernandez, que en el primer encuentro de 11 de abril de 2014 en la propia
parroquia San Carlos Borromeo, llegó a justificar la matanza de Hipercor y a
hacer cómplice al Estado", considera Dignidad y Justicia.
Palabras "vergonzosas" e "intolerables"
que pueden volver a repetirse a finales de mayo en la sala del congreso Ernest
LLuch, socialista asesinado por ETA.
Se trata, añade la asociación que preside Daniel
Portero, de una broma "de muy mal gusto" que el Congreso pueda dar la
palabra a personas que vienen a hablar de un "territorio ficticio"
llamado "Euskal Herria" y de "paz".
"Lo único que ha existido es un exterminio
mediante el asesinato de casi mil personas en toda España y de más de 10.000
desplazados internos desde País Vasco y Navarra a otras regiones de España por
la persecución, amenaza y extorsión de ETA", recuerda DyJ, que tilda de
"bochornoso" que el exalcalde de San Sebastián Odon Elorza apoye este
encuentro.
Opinión:
Desde el respeto que le tengo a
mi amigo Daniel Portero, con el cual a veces no coincido demasiado y quizás por
ello nos respetamos, me gustaría presentar mi opinión.
Las cifras oficiales sobre la
representatividad en el mundo de “las” víctimas de la entidad Dignidad y
Justicia le otorgan un 0’45 %, y ello dando por confirmado que los miembros de
tal asociación sean víctimas de terrorismo reconocido como tal, es decir, con
el derecho a recibir o solicitar la Encomienda o la
Gran Cruz.
Pero hay otra cuestión que no me
cuadra. Entiendo que pueda molestar el hecho de que un exmiembro de la banda
terrorista ETA pueda participar en tal jornada, pero entonces me asalta una
duda: cuando Mayor Oreja dijo textualmente “estaría dispuesto a sentarme con
ETA”, ¿dónde estaban entonces los que ahora se quejan?
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