07
septiembre 2017
ETA expulsa al preso que criticó su
deriva “liquidacionista” al acatar la legalidad
Patxi Ruiz había censurado al EPPK
por permitir acogerse a los beneficios penitenciarios
Se suma así a otros presos críticos con la izquierda abertzale como Jon Kepa Preciado y Daniel Pastor
Se suma así a otros presos críticos con la izquierda abertzale como Jon Kepa Preciado y Daniel Pastor
ETA
ha expulsado al preso Patxi Ruiz Romero por las críticas que ha venido
vertiendo contra lo que ha calificado de “estrategia liquidacionista” del
Colectivo de Presos (EPPK), al haber apostado por las vías legales y la
reinserción, y haber permitido a sus miembros acogerse a beneficios
penitenciarios. Ruiz Romero ha aireado públicamente su posición contraria a la
actual línea política de la izquierda abertzale en diversas cartas, y ayer
anunció su expulsión de la organización terrorista en otro escrito publicado en
el portal del Movimiento Pro Amnistía y Contra la Represión , también
conocido como ATA.
El
recluso, que cumple una condena de 30 años en la prisión de Murcia II por el
asesinato a tiros del concejal de UPN en el Ayuntamiento de Iruñea Tomás
Caballero, perpetrado en 1998, se alinea con los postulados de esta escisión de
Sortu, muy crítica con la línea oficial de la izquierda abertzale y que reclama
la amnistía total. Sigue así el camino seguido por otros presos como Jon Kepa
Preciado, Daniel Pastor e Iñaki Bilbao, que se han alejado de la disciplina del
EPPK.
En
la carta conocida ayer, Patxi Ruiz explica que en julio de 2016 publicó un
artículo también en el portal de ATA y en el diario Berria, bajo el título No todo vale, en el que acusaba
a la “izquierda abertzale oficial” de llevar a cabo una campaña de “acoso y
persecución política” contra el Movimiento Pro Amnistía. Denunciaba además que
estaba “imponiendo” a los presos su “adhesión forzosa” a determinadas
decisiones adoptadas a través de “un debate interno injusto y fraudulento en
sus foros y contenidos”.
Según
su relato de ayer, como consecuencia de este posicionamiento público “la
organización de la que hasta ahora he sido militante, es decir ETA”, le
comunicó que dejaba su militancia en “suspenso temporal”. A juicio de la
dirección de la banda, había vulnerado tres normas internas del grupo, en
concreto “expresar públicamente una posición contraria a la línea de la
izquierda abertzale; apoyar y alimentar los intentos de escisión; y quebrantar
las normas de la Erakunde
(organización) y de la disciplina interna”, por lo que le pidieron
explicaciones.
“Les
di las explicaciones e igualmente les dije que yo también quedaba a la espera
de su respuesta”, prosigue. Como la misma no llegó, publicó otro artículo el
pasado 23 de abril en el que exponía toda esta situación, incumpliendo de nuevo
la petición de ETA de no hacerla pública. En ese mismo escrito, censuraba la
apuesta por las vías pacíficas de dirigentes de Sortu como Arnaldo Otegi, Tasio
Erkizia o Arkaitz Rodríguez, “saltando por encima de todos los caminos,
canales, normas y disciplinas”. Les acusó de llevar a cabo un “auténtico golpe
de Estado” que ha sumido a la izquierda aber-tzale en “una confusión tremenda”
y la ha subordinado al PNV.
Aseguraba
además que no tenía intención de abandonar el EPPK por voluntad propia, ya que
consideraba que no había roto la disciplina. “Yo no soy ningún escindido ni
acepto marcharme de lo que considero también mi casa”, describió. Demandó por
ello al Colectivo de Presos “un debate justo” donde se aborden “todas las
posibilidades que existen en el marco poslucha armada”. Finalmente, Ruiz Romero
desveló ayer que “recientemente el Comité de Dirección de la Erakunde me ha informado
de que he sido definitivamente expulsado”.
En mi nombre no
Lo
sucedido con Patxi Ruiz está en la línea de los casos de Daniel Pastor, que en
diciembre de 2015 anunció en la carta En
mi nombre no!! su ruptura con
el EPPK. Pastor, condenado a 31 años por el asesinato de Eduardo Puelles y a
otros 485 años por el asesinato de Luis Conde, expresó además su adhesión al
Movimiento Pro Amnistía, que “está siendo vilipendiado en estos tiempos
confusos”.
En
abril de 2016, Jon Kepa Preciado, que cumple condena en la prisión de Córdoba,
se hizo eco del escrito de Pastor y, con el título Tampoco en mi nombre, difundió
otro comunicado en el que rechazaba “que se potencie solamente la lucha
institucional”, debido a sus “límites e ineficacia”. Criticaba a su vez que “se
ignore la fuerza, aportación, compromiso, sangre y valentía de los hombres y
mujeres de nuestra tierra en las últimas décadas para convertirnos en aceptables por nuestros perseguidores”.
Opinión:
Aparte de lo que este asesino piense, me quedo con la noticia de que
los que piensan así son una ínfima minoría, de lo cual me alegro.
Por otro lado, aprovecho la noticia para recordar que al haber atentado
después de 1995 (en 1998 concretamente) se la aplica el Código Penal de 1995
con lo que deberá cumplir 30 años sin beneficios penitenciaros. Si quería estar
menos tiempo en prisión, tenía que haber atentado ante de 1995… seguro que eso
no se lo explicaron ni sus ideólogos ni sus abogados.
a'>Opinión:
Solo agradecer la excelente labor de los CFSE para evitar nuevas
masacres… y también esperar que se depuren las mínimas responsabilidades exigibles
a los que han permitido según qué militancias….
No hay comentarios:
Publicar un comentario