08 julio 2017
Aznar: “Los jóvenes
españoles tienen que conocer la verdad de lo que pasó”
José María Aznar
conversa con Libertad Digital con motivo del 20 aniversario de la liberación de Ortega Lara y el
asesinato de Miguel Ángel Blanco.
El expresidente del Gobierno y
actual Presidente de FAES, José
María Aznar, considera que las víctimas del terrorismo “en este
momento son una molestia, porque son el ejemplo vivo de que se está cometiendo
una gran falsedad y una gran injusticia, ya que se está en el planteamiento de
reescribir la historia, en la que todos seamos iguales y al final no haya
vencedores ni vencidos, víctimas ni verdugos”.
En una entrevista en exclusiva concedida a Libertad Digital, con motivo de cumplirse el XX
aniversario de la liberación de José Antonio Ortega Lara y del asesinato de
Miguel Ángel Blanco, Aznar recuerda cómo vivió aquellos días de julio de 1997
en que ocupaba la
Presidencia del Gobierno. Califica de “absolutamente
ejemplar” el comportamiento de la familia Blanco, dice que Ortega Lara es una
parte de su vida “muy especial y muy importante” y habla sobre otras cuestiones
relacionadas con la lucha antiterrorista como la presencia de marcas de ETA en
las Instituciones, o la petición de acercamiento de los presos de la banda
terrorista a cárceles vascas.
Recordando lo que fueron aquellos
días de julio de 1997, Aznar no duda en afirmar que “fueron días realmente
importantes en la historia de España y en la historia de la lucha contra el
terrorismo. Días que marcaron un antes y un después por distintas
circunstancias. Especialmente, tras el asesinato de Miguel Ángel Blanco, los
silencios se rompieron, muchos apoyos se resquebrajaron, muchas actitudes
indiferentes se volvieron positivas y la
sociedad española decidió de una manera definitiva acabar con el terrorismo.
No es que antes no tuviera ese deseo, pero entonces se puso en marcha todo lo
necesario para hacerlo posible”.
La exigencia de ETA para liberar a Ortega Lara o para
no matar a Miguel Ángel Blanco era la misma: el acercamiento de todos los
presos de la banda terrorista a cárceles del País Vasco. Sobre si en esa
tesitura tuvo algún momento de duda o la tentación de ceder a las pretensiones
de los terroristas, el expresidente del Gobierno contesta tajantemente con un
“No”. “Nosotros estábamos en el Gobierno para hacer muchas cosas y una de ellas
era intentar superar esa idea tan maligna y tan negativa
de que ETA era imbatible, o que ilegalizar a Herri Batasuna era
imposible porque la reacción social y política sería tan grande que la
situación se pondría peor”.
“Todo eso –añade Aznar– se demostró
que era absolutamente falso. La decisión era la de acabar con el terrorismo y,
en consecuencia, no se podía aceptar ningún tipo de chantaje. En este sentido
tenía una confianza plena en el ministro de Interior y en el Cuerpo de
Seguridad más operativo en aquellos momentos en la lucha contra el terrorismo
que era la Guardia Civil ”.
“Inclino mi cabeza ante la familia de Miguel Ángel”
Al conocerse la noticia del
secuestro del joven concejal del PP de Ermua, Miguel Ángel Blanco, y que ETA
daba un plazo de 48 horas al Gobierno para que acercara a los presos de la
banda a cárceles del País Vasco o le mataría, Aznar rememora que habló ese mismo
día, 10 de julio, con los padres de Miguel Ángel: “Les expliqué la situación y
les dije que lo que el Gobierno tenía encima de la mesa era la petición de un
chantaje. Les
comuniqué que la decisión que habíamos tomado era que no lo íbamos a aceptar.
Les dije que íbamos a remover Roma con Santiago para encontrar a Miguel Ángel y
salvar su vida, pero que no íbamos a aceptar el chantaje”.
“Estábamos convencidos –señala– que
la orden del asesinato de Miguel Ángel estaba dada en el mismo momento en que
se dio la orden del secuestro. Por tanto, cualquier otro tipo de circunstancia
era añadir al asesinato una humillación que hubiera sido la humillación de toda
España delante de una organización terrorista y yo no estaba dispuesto a eso”.
Al recordar el comportamiento en
aquellos días y después de la familia de Miguel Ángel Blanco, que no expresaron
ninguna queja, ni hicieron ningún reproche a la actuación del Gobierno, el
expresidente del ejecutivo lo califica de “absolutamente ejemplar”. “Tanto en
aquellos días como en estos veinte años, su actitud, su comportamiento, su
entereza, su dignidad ha sido realmente de admiración y tengo que decir con
toda humildad que uno puede inclinar su cabeza ante determinadas personas, ante
determinadas familias. Yo, desde luego, ante la
familia Blanco inclino mi cabeza porque es difícil tener un comportamiento tan
ejemplar“.
La excarcelación de Bolinaga fue un error
De Ortega Lara,
Aznar afirma con un punto de emoción que “es una parte de mi vida
muy especial y muy importante. Desde que llegamos al Gobierno teníamos el objetivo fundamental de
su liberación –había sido secuestrado en enero de 1996 gobernando todavía el
PSOE–, y cuando se consiguió fue para mí un momento inolvidable. He mantenido
con Ortega Lara una relación como mantengo con todas las víctimas del
terrorismo”
Al hilo de estas palabras y al
preguntarle qué sintió, que pensó en el verano del 2012 cuando se conoció que
el Gobierno de Rajoy había comenzado a dar los pasos que llevarían a la puesta en libertad de Josu Uribetxeberría
Bolinaga –uno de
los secuestradores de Ortega Lara que se negó en redondo a reconocer, cuando
fue conducido por la
Guardia Civil a la nave industrial de Mondragón, que allí era
donde estaba el funcionario de prisiones– Aznar es taxativo: “Se han
cometido muchos errores y ese fue uno de ellos“.
“Los terroristas –añade el
expresidente del Gobierno– tienen que pagar sus penas y no hay ninguna razón
para liberar a ese terrorista después de cometer un acto tan cruel como fue
mantener secuestrado durante 532 días a una persona, y después de que este
terrorista hubiera decidido dejar morir de hambre a Ortega Lara. Esos errores
son los que al final envalentonan o intentan dar una razón histórica, política
o moral a una organización terrorista que evidentemente no tienen ni van a
tener nunca”.
Ahondando en la argumentación para
explicar el por qué le pareció un error la puesta en libertad de Bolinaga,
Aznar asegura que “no estoy dispuesto a aceptar, sin que mi voz se
oiga, el que esto ha sido un historia de un grupo contra otro grupo,
de un bando contra otro bando, que en definitiva ha habido un conflicto entre
dos partes, pero que eso hay que olvidarlo, que tanta culpas tienen unos como
otros. No estoy dispuesto a aceptar esa historia ni estoy dispuesto tampoco a
dejar pasar la oportunidad de que aquellos que tienen una responsabilidad en lo
que ha sucedido paguen por ello”.
Cuando en mayo de 2008 Ortega Lara
se dio de baja como militante del PP, Aznar confiesa que sintió “muchísima
pena, porque José Antonio era algo más que un afiliado del PP. Su significado,
su importancia era mucho mayor de lo que algunos podían imaginar. Su pérdida
fue la pérdida de un valor moral en un partido como el PP que ha dado y que ha
padecido tanto en la lucha contra el terrorismo. Por eso la pérdida para el PP
de ese referente moral que era Ortega Lara fue una gran desgracia”.
Reuniones dramáticas con la gente del PP vasco
Recordando aquellos años de la
segunda mitad de la década de los 90 en que ETA, después de aniquilar prácticamente
a la UCD vasca,
intentó hacer lo mismo con el PP –asesinato de Gregorio Ordoñez en enero de
1995, intento de asesinato del propio Aznar en abril de ese año, asesinatos de
concejales y cargos públicos del PP como Miguel Ángel Blanco, José Ignacio Iruretagoyena,
Manuel Zamarreño, Manuel Indiano, Jesús Pedrosa, Alberto Jiménez Becerril y su
mujer, Tomás Caballero, José Javier Múgica, entre otros–, Aznar tiene muy
grabada en la memoria algunas reuniones que en esas circunstancias mantuvo con
los cargos públicos del PP del País Vasco: “Cuando estaba en una reunión con
las gentes de mi partido en el País Vasco, admirables por muchas razones, y tú
sabes que en la próxima reunión algunos de ellos no van a estar aquí y ellos
también lo saben y notas en sus miradas cuando estás hablando que te están
diciendo: ¿será
esta la última vez que nos veamos?, eso es muy duro. Pero tengo
que decir que el PP del País Vasco fue impresionante en su comportamiento y en
su actitud. Y ese valor de fuerza moral del PP quisiera pensar que sigue
existiendo y quisiera
pensar que el PP nunca va a olvidar esa parte de su historia“.
En este sentido, Aznar reconoce que
el atentado terrorista de ETA que sufrió en abril de 1995 cuando era líder de
la oposición y del que salió vivo milagrosamente no le influyó en nada a la
hora de afrontar un año más tarde desde la Presidencia del
Gobierno la lucha antiterrorista: “El
atentado que sufrí sí me sirvió para reforzar mi cercanía a los que sufren el
terrorismo, especialmente a los vascos que lo padecían a
diario, y a los que lo combaten”.
El PNV y el pacto con ETA en Estella
En relación a la actitud que adoptó
el PNV tras el asesinato de Miguel Ángel Blanco y la reacción social que se
produjo, de irse a entenderse con ETA en el conocido como “pacto de Estella”,
el expresidente del Gobierno confiesa que en aquel momento sintió que “la
palabra de algunos vale lo que vale” y recuerda que los dirigentes del PNV
dijeron en aquellos días que se comprometían “a no actuar nunca conjuntamente
con quienes con su silencio, con sus palabras de apoyo son cómplices de este
asesinato”. Para Aznar la explicación de ese cambio de actitud en el partido
que entonces presidía Xabier Arzalluz hay que encontrarla en el hecho de que “el PNV se asustó porque pensó que el espíritu de Ermua y la reacción que se produjo en la
sociedad española tras el asesinato de Miguel Ángel podía trastocar completamente su
posición política. Y entonces decidieron hacer una cosa que
nunca debían haber hecho”.
Sobre el giro de 180º que sufrió la
política antiterrorista cuando él abandonó la Moncloa en abril de 2004 y llegó Zapatero que puso en marcha su
mal llamado “proceso de paz”, Aznar considera que fue “otro gravísimo error
porque en ese momento la
derrota de ETA era total, en términos de su capacidad operativa
y en términos de su influencia política y, por lo tanto, lo que había que haber
hecho era reafirmarse en las políticas que habían llevado a ese éxito, pero
justamente se hizo lo contrario. ¿Qué sentido tiene resucitar a ETA
políticamente? ¿Qué sentido tiene resucitarla con una negociación?
“Políticamente, ETA no está derrotada”
El expresidente del Gobierno, en
contra de lo que se dice tanto desde el actual ejecutivo, como desde el PSOE,
el PNV o desde diferentes estamentos sociales y mediáticos, considera que la
banda terrorista no está derrotada del todo: “En términos de lo que es ETA
ejerciendo el terrorismo, sí está derrotada, pero en términos políticos no lo está.
Se le ha dado unas bazas muy grandes desde el punto de vista de la negociación
y de su influencia en determinados elementos de la política vasca y fuera del
País Vasco”.
Aznar sostiene que no hay que
distinguir entre los fines y los medios de una organización terrorista como
ETA: “La jurisprudencia europea nos ha dicho que tan condenables son los medios
que utilizaban –el asesinato, el secuestro, el tiro en la nuca, los
coches-bomba– como los fines, que eran la destrucción de España, de nuestra
libertad y de nuestra democracia”.
No al acercamiento de presos y sí a aplicar la ley de
partidos
En ese sentido el expresidente del
Gobierno se muestra partidario de que las diferentes marcas políticas de ETA
que están en las instituciones deberían estar fuera de ellas “porque no han
condenado ni condenan los crímenes de ETA, no han pedido perdón por lo que han
hecho, siguen amenazando en muchos casos, siguen condicionando la libertad de
muchas personas” y ante la pregunta de si cree que el actual Gobierno debería
aplicar la ley de partidos, contesta con otra pregunta: “Si la
ley de partidos está vigente, ¿por qué no se va a aplicar? Las actuales formaciones
políticas tienen la posibilidad de cambiar la ley de partidos o de no
cambiarla, pero si está vigente a mí me parece muy razonable que se aplique”.
Sobre el acercamiento de los presos
de ETA a las cárceles vascas que reclaman no sólo el mundo que rodea a la banda
terrorista sino también el PNV, Aznar cree que no hay que llevarlo a cabo: “La
política de dispersión es algo que funcionó muy bien y, puesto que los
terroristas no han cambiado su posición, no hay
ninguna razón para llevar a cabo ningún acercamiento. Esa
política de dispersión ha sido un éxito y no hay por qué cambiarla”.
Para combatir ese planteamiento que
desde el mundo de ETA y del nacionalismo vasco se está llevando a cabo para
reescribir la historia de lo que ha pasado en los últimos cincuenta años a
causa del terrorismo y blanquear a la banda terrorista, Aznar cree que el
Gobierno actual del PP debería de ser más activo: “Supongo que el Gobierno
–explica– sabe bien lo que tiene que hacer y conoce la historia política que
nos ha llevado hasta aquí. El Gobierno está presidido por alguien que durante
algún tiempo fue Ministro de Interior y que fue una parte muy importante y
relevante de esos ejecutivos que plantearon esa lucha contra ETA. Pero si usted
me dice: ¿ha visto movimientos del Gobierno para impedir que se produzca esa
especie de relectura y reinvención de la historia de lo que ha sucedido?, le
tengo que señalar que la verdad es que no lo he visto”.
“Los jóvenes españoles tienen que conocer lo que pasó”
Por último, y pensando en las
nuevas generaciones de españoles que desconocen prácticamente toda esta parte
tan dramática y dolorosa de nuestra historia reciente, Aznar se muestra contundente:
“Conocer la historia es fundamental. Si no
conoces la verdad de lo ocurrido, difícilmente puedes conocer bien a tu país“.
“Que los jóvenes españoles
–explica– entiendan bien lo que pasó; que sepan que en este país hubo una banda
terrorista criminal que asesinó a mucha gente, que produjo mucho dolor, que
buscó la destrucción de nuestras libertades, de nuestra democracia, de nuestro
país; que sepan que se les combatió con todas nuestras fuerzas; que sepan que
causó muchas víctimas en muy diferentes sitios; que sepan que no se puede
aceptar que en esa historia al final no pasó nada; que sepan todo eso a mí me
parece muy importante. La
historia es un elemento básico e intentar reescribirla es un ejercicio político
muy peligroso y
que, además, desde el punto de vista moral, es lamentable porque sólo puede
conducir a no entender bien lo que queremos ser y a no poder explicar realmente
las razones fundamentales de las víctimas”.
Opinión:
De todo lo que el expresidente Aznar declara en la entrevista
doy por supuesto que debe tener pruebas y por ello no voy a mostrar mi opinión.
Pero si el expresidente quiere que los jóvenes conozcan lo que pasó… desde el
derecho que me da ser víctima de un atentado terrorista y haber estado “dentro”
en muchos de los acontecimientos que menciona, aquí van una serie de preguntas
a las que me gustaría tener respuesta.
¿Es cierto que algunas víctimas recibieron sobres con
ciertas cantidades económicas como ayuda para superar las consecuencias del
atentado?
¿Es cierto que del atentado que sufrió el expresidente en
1995 no hay una sola detención ni un solo sospechoso?
¿es cierto lo que informan los siguientes enlaces de prensa
de 1998?
http://www. el-mundo. es/1998/10/03/espana/ Aznar estudia
anunciar en los próximos días el acercamiento de presos de ETA.
http://www. el-mundo. es/1998/12/17/ Aznar emplaza al
entorno de ETA a responder a su oferta de diálogo. . . . . . . . . . . . . . .
. .
http://www. el-mundo. es/1998/11/06/espana/ El Gobierno
negociará con ETA su reinserción en la sociedad vasca. . . . . . . . . . .
http://www. el-mundo. es/1998/11/06/ El Gobierno ordena al
Cesid que tienda puentes hacia ETA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
.
http://www. el-mundo. es/1998/11/03/espana/ El Gobierno
estudia nuevos traslados de presos de ETA antes de Navidad. . . . . .
http://www. el-mundo. es/1998/11/18/espana/ El PSOE respeta
y apoya las medidas del Gobierno. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
http://www. el-mundo. es/1998/12/19/espana/ El Gobierno
admite contactos con el entorno de ETA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
. .
http://www. el-mundo. es/1998/12/12/ Aznar reafirma estar
dispuesto "al perdón y la generosidad"
¿Es cierto que durante su mandato se produjeron más de 300
excarcelaciones de etarras?
¿Es cierto este titular aparecido en diferentes medios de
comunicación?
“Si no se producen los contactos es porque ETA no quiere.
No hay ninguna otra razón". (José María Aznar, 10-9-99)
¿Es cierto que el Ministro de Interior de su gobierno dijo
esto?
“Estamos dispuestos
a dialogar, dispuestos a flexibilizar la política penitenciaria, a imaginar una
reinserción para la gente de ETA, dispuestos a hacer todo sin exigencia previa,
sin ni siquiera discutir la entrega de armas, justo por la paz”. Jaime Mayor
Oreja, Le Monde, 16 de septiembre de 1999.
"Estaría dispuesto a sentarme con ETA" (Diario de Sevilla, enero 2000)
"Estaría dispuesto a sentarme con ETA" (Diario de Sevilla, enero 2000)
¿es cierto que la publicación de estas frases del
expresidente Aznar en la revista de la antigua AVT fueron el detonante para
intentar acabar con la misma?
Curioso que el expresidente hable de relectura... cuando hay víctimas que conocemos muy bien lo que ocurrió durante aquellos años "de plomo", si, los años en los que alguien entendió que muchas víctimas del terrorismo no éramos los pardillos que creían, cuando se dieron cuenta que había gente que trabajaba por otras víctimas por encima de intereses e ideologías personales, cuando nació el interés en utilizar de manera partidista el dolor ajeno...
Y no es ninguna invención, incluso gente a la que se utilizó entonces han reconocido, con el paso de los años, que eso TAMBIEN ocurrió...
¿merecen los jóvenes españoles conocer esto o mejor se lo esconden?
Y no es ninguna invención, incluso gente a la que se utilizó entonces han reconocido, con el paso de los años, que eso TAMBIEN ocurrió...
¿merecen los jóvenes españoles conocer esto o mejor se lo esconden?
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